Esquizofrenia.

v e i n t e.

Tyler tomaba valor, pensando en una buena excusa en decirle a sus padres para faltar a sus "vacaciones familiares". Tronó sus dedos, nervioso y relamió sus labios rápidamente.

- Mamá... ¿Podemos hablar? - preguntó con una voz inaudible, casi inexistente.

La madre del chico asintió, mientras leía una revista de cocina. Su madre era fan de la repostería, y tenía una especie de "hobby" al buscar nuevas recetas.

- Quiero quedarme con Josh unos días...

Su madre lo volteó a ver, y le sonrió cálidamente. Asintió, devolviendo su vista al par de revistas que tenía en la mesa.

- Claro, cariño... ¿Irán de campamento o algo así?

Tyler negó efusivamente. Sus manos sudaban, al igual que su frente. El corazón le latía a mil por hora, era la llamada adrenalina.

- Voy a quedarme con Josh... En la semana de "vacaciones" que van a tomar. - soltó, con la voz temblorosa. Reprimiendo un par de lágrimas que eran provocadas por el nerviosismo.

- Definitivamente no, Tyler - escuchó una voz detrás de el. Profunda y rasposa. - Vas a ir a esas vacaciones, eres parte de la familia aunque no lo parezca.

Volteó lentamente, topándose con la mirada dura, y fría que tenía su padre. Sus ojos color marrón eran los mas dominantes que Tyler pudo haber notado en una persona. Parecía anormal.

Tyler bajó la mirada. Aun así, podía sentir la presión que su padre ejercía con su mirada, lo juzgaba y sabía perfectamente la razón. Como era de esperarse, homofóbico.

- De ninguna manera aceptaré mas burla de la gente de esta buena ciudad, ya tengo suficiente con ser el padre de un completo loco y además ¿joto?* - exclamó con un tono de desagrado, podía notar su asco a travez de las palabras.

- No soy gay. - tartamudeó.

Alzó la mirada, retando a su padre. Sus mejillas se ruborizaron al sentir la presión, volvió a desviar la mirada, recibiendo como respuesta una carcajada por parte de el.

- Como lo pensé, joto.

Tyler alzó la vista a su padre. Sus ojos se encontraban cristalizados, amenazando con soltar lágrimas. Su madre veía la escena, atónita. Ella tenía ligeras sospechas sobre Tyler y Josh; sin embargo, no le importaba mucho. Su única creencia era que si podía ver que su hijo tenía mejorías, estando cerca de Josh, eso era lo correcto. Solo le importaba la condición de su hijo. Su mejoría.

¿Qué te parecería un pequeño juego ahora, Tyler? Hay que llamarlo, corre por tu vida.

Tyler comenzó a sentir que la sangre en su cabeza disminuía, al igual que su presión. Su tez - pálida de por sí - se tornó en casi transparente. Las venas de su rostro comenzaban a notarse, y sus ojos pesaban. Su vista se nubló y lo único que alcanzó a sentir fue su cráneo chocando con el frío y duro suelo.

[...]

[tyler]

La luz de mi habitación comenzaba a lastimar mis ojos. Los tallé con dificultad mientras me estiraba. Por alguna razón, me encontraba tomando una siesta o algo parecido.