Capítulo 1

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Hoy nos hemos mudado las 3 juntas para empezar nuestro último curso e ir preparándonos para conseguir nuestro futuro, La Universidad...

Acabamos de llegar, nos queda mucho por hacer, cajas que vaciar, ropas que guardar y casa que decorar pero es una suerte estar las tres juntas así que terminaremos pronto.

Unas horas después...

-Esta es nuestra última caja- dijo Madi suspirando cansada y colocando esa caja de cartón sobre una pequeña mesa de cristal tallado que había a la entrada de nuestro pequeño piso en el centro de la ciudad.

- Al fín terminamos, nunca pensé que tardaríamos tanto.- Dijo Didi apoyándose sobre sus rodillas.

Bueno chicas.- pronunció Scarlet- el lado bueno es que hemos terminado todo en menos de un día, tenemos tiempo de descansar, mañana recompensaremos este esfuerzo yendo a desayunar al Starbucks que esta a unas manzanas de aquí.- se notaba un cierto entusiasmo en su voz.

El Starbucks aquí en Londres las mañanas de invierno suena tan atractivo como un helado en verano.

Pues bien - dijo Didi estirándose.- Yo me voy a mi cuarto estoy demasiado cansada, ¡buenas noches! - lanzó un beso a sus compañeras.

Madi y Scarlet al unisono mandaron las buenas noches a su amiga.

Por muy cansadas que estuviesemos apenas podíamos dormir. Algo estaba a punto de pasar, cada una de nosotras lo sabía. La noche pasó rápida gracias al sonido de las gotas de lluvia chocar contra las gruesas ventanas del apartamento. Con la llegada del amanecer la humedad se esfumó y las calles mojadas comenzaban a llenarse de gente que corría hacia sus trabajos.

-Scarlet..- llamó Madison.- ¿tienes por casualidad esa falda negra que me encanta a mano?-

- Mmm.. Sí la tengo aquí, ten.- sonrió Scarlet y se la dio.

-Gracias, algún día te la robaré.- dijo Madi poniendo cara de amenaza.

- Entonces tendré que cerrar mi armario con candado -dijo riendo Scarlet.

- ¿Que tal estoy?- Interrumpió Didi saliendo con una preciosa blusa azul electrico y unos shorts de mezclillas cojuntandolos con unas All Stars blancas de caña baja.

- Didi..- dijo Madi con chispitas en los ojos.- siempre he dicho que tienes un gran sentido para la moda.

- Gracias Madi..- dijo poniendo morritos.

En cambio ella iba con una falda corta negra y una camisa blanca de botones dorados con una sandalias del mismo color que la falda.

- Madi tu no te quedas atras.- Dijo Scarlet. Todas ríen, la verdad es que todas tienen
un gran don para la moda.

La última en vestirse fue Scarlet con unos jeans blancos, una camisa de tiros rosa y unas botas altas negras. Se veía realmente linda con eso, empezando por que su color es el rosa. Siempre le queda bien.

- Wow..- dijo mirándonos a todas de arriba a abajo.- y eso que sólo vamos a desayunar.

- ¿Quién dice que solo vamos a desayunar?- preguntó Scarlet alzando las cejas.- 

- Además hay que estar preparadas para todo, ¿y si de camino nos encontramos a nuestra media naranja?-Madi siempre la misma.

- Vámonos anda.- dijo Didi negando con la cabeza.

Scarlet cogió su Iphone junto a sus cascos y comenzó a escuchar música por el camino. Madison iba cabizbaja tras Scarlet debido a que le gusta pasar desapersivida, aunque con su cuerpo no sé que chico se le resistiría. Didi se limitaba a observar el paisaje y a la gente pensando en la de cosas que deben hacer hoy.

Realmente no tuvimos problema para llegar a la cafetería, Londres es otro mundo para nosotras. Entramos elegantemente por la puerta donde estaba incrustado en grande el logo de Starbucks. Madison quitó sus gafas de Sol y se colocó el pelo. Scarlet miró hacia la derecha donde había un grupo de chicos armando alboroto en la sala. Suerte de que no hubiera nadie más.

Miró a los dependientes del café, se notaban irritados con ellos. Que falta de educación tienen algunos, pensó Scarlet. Aunque el ruido provocado por sus graves voces se dejó de escuchar unos segundos después de entrar nosotras.

Las 7 personas que había en la mesa de repente cayaron mirando hacia nosotras, cosa que a Madison le incomodó pero a la vez gustó. A Didi se le pusieron los pelos de punta, aquella mesa estaba llena de sensualidad. Uno de los chicos estaba comiéndose a Scarlet con la mirada, literalmente, para ser exactos el único rubio de la mesa. Lo que más nos sorprendió fue que había una chica con una total apariencia contraria a como aquellos chicos se veían.

Era bien alta con el pelo corto castaño, ojos avellana y de apariencia muy dulce. Los tios que la acompañaban tenían miradas verozes, la gran mayoría tenía todos los brazos tatuados y no tenían pinta de amigables.

Después de pocos segundos de miradas cruzadas los chicos decidieron volver a prestarse atención hacia ellos con medias sonrisas. Susurraron algo mientras nos miraban, no volvieron a levantar más la voz.

Nos apresuramos a pedir nuestros cafés con crema de chocolate y nata. Didi no estaba para comer delante de tales tigres. Madison y Scarlet en el fondo se divertían con esto, ya que decidieron sentarse en la mesa de al lado. El rubio volvió a mirar a Scarlet, más bien todos en la mesa nos miraban de arriba a abajo excepto uno de ellos que estaba de la mano con la chica de antes.

- Y bueno chicas.. - dijo Scarlet para cambiar de tema.- ¿os apetece ir después a la biblioteca?

A tal comentario, el de pelo rizado la miró de reojo y luego sonrió pícaro a sus compañeros. El que más tatuajes tenía le golpeó suave en el hombro e hizo señas para que se cayase.

El rubio prestaba disimulada atención ahora a Madison. A Didi estas cosas la ponían muy nerviosa. Uno de los chicos que tenía unas extrañas flechas en el brazo la miraba. Ella al juntar su mirada con la de él sonrió apenas, pero él sólo alzó las cejas un par de veces y apartó la mirada.

- Genial.- Dijo Madi dando un sorbo  a su bebida, cosa que al rubio le hizo oscurecer la mirada.

Comenzamos a hablar de nuestras cosas intentando olvidarnos de ellos, y lo conseguimos...

No Control [One Direction] <Hot>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora