Cap.15 En La Salida.

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Solo dos días para que se marchara de mi vida Kyan el pequeño rey que llego solo a dictar para luego dejar su imperio destrozado.

No quería ni ver mi propio reflejo en el espejo que me absorbía la poca esencia de mi alma. Porque tal vez estaba muerta, no sentía la ausencia ni de mis padres en estos dos años y entonces no tendría necesidad de sentir la ausencia de Kyan por que él se había marchado desde hace antes de conocerlo, y no sería difícil de olvidarlo porque aveces olvido que yo también existo.

Ahora tengo muchas dudas que nadie me ha explicado aún , estoy probablemente en un laberinto sin salida. ¿Por qué? Nadie me aviso que esta historia se terminaría el día de mañana.

No me duele ni pienso sufrir, porque eso seria mostrar una parte débil y esa no seria yo, porque si solo me dedico a llorar lo único que ganaría de Kyan seria su lastima y no necesito la lastima de nadie, como nadie necesita mi lastima ni yo la de los demás.

Le tocara al chico malo sufrir esta vez.

El chico malo debería de tener miedo porque no tiene nada a lo que aspirar en esta vida.

Después del abrazo de ayer no sucedió nada relevante, porque no tenia que pasar nada. Es algo predecible cuando Kyan me regala un momento con él o un detalle en automático momentod después se vuelve la persona que e realidad es frío y realmente antipático y el chico que prefiere su compañía a la de alguien, aquel que solo le gusta sentir su carne con la de alguien más en una cama.

Para él no hay sentimientos ni cosas así.

Me pregunto en cuantas camas diferentes podrá estar en estos dos años y el resto de su vida condenado a la soledad.

Hoy es jueves y no es difícil asimilar que hoy se terminara todo.

No sera difícil olvidarme de él.

Salí de mi departamento solo para encontrar un clavel fuera de mi puerta, lo recogí y guarde en mi mochila, no pensé nada al respecto solo que Kyan era un estúpido para traerme un clavel a la puerta de mi casa porque él sabia que no recibirá nada a cambio.  

Camine sola a la escuela, llegue sola, me senté sola y tome clases sola, lo único que cambio fue que en el almuerzo estaba en la mesa de siempre y rodeada con las mismas personas vacías de siempre.

Estaba con mis ojos adormilados por no poder dormir bien y tener miles de cosas en la cabeza.  

Pero cuando estaba a punto de dormir en la mesa del comedor, sentí una mano en mi hombro sacudiendome mientras susurraba en mi oído era la voz de Kyan que me decía:

-Despierta pequeña princesa, no te duermas. 

Con una expresión de enojo, lo mire y lo único inteligente que se me ocurrió decirle:

-Kyan, ¡Que rayos haces aquí!

-Ya no me importa que los demás me vean a lado de ti si esa es tu pregunta, de todos modos mañana me largo de esta escuela.Y no sabre de nadie.

Claro a él ya no lo joderan por enamorarse de una estúpida que se queda en el único lugar que no perdona a nadie y que no pretende seguirlo.

En cambio yo me quedo aquí dos años de mi vida, donde me conocerán como la persona que tiene un  "Novio de intercambio estudiantil" quién sería el mayor patán que existió en el instituto.

Claro así de fácil, me deja así para que los demás me recuerden que tuve una relación que nisiquiera existió con Kyan. 

-¿Y?

-Te veré hoy ¿Cierto?

-Sí

¿Y ahora que tengo que esperar de él? 

-Terminaremos la conclusión del trabajo entonces. 

-Claro

-Esta bien,te veré en la salida. Que tengo varias sorpresas para ti antes de mi partida.

Toco la campana que indicaba la siguiente clase el tenía historia clásica mientras que yo arqueología básica.

Y ahora esperar una eternidad de cuatro horas para que se termine esto. Y esperar alguna de las sorpresas del pequeño príncipe.

Esto debe de ser una broma de mal gusto.

Una Sumisa Del MontonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora