Cap.22 Llamada.

120 3 10
                                    


Ya han pasado un poco más de 2 meses o un poco más ni siquiera lo recuerdo a la perfección debido a las pastillas.

Kyan y yo nos distanciamos completamente cuando el se fue solo da una trasferencia al mes que costean los cuidados de los animales, le he agarrado un afecto muy especial a Atila con el paso del tiempo el igual se ha acostumbrado a mi por completo y al parecer le agrado.

Mi pequeño departamento se siente mas cálido debido a las plantas y a los animales que en el habitan, no debe de ser sorpresa porque a Kyan le encantaba tanto su departamento lleno de animales y plantas a mi apenas me agrada el limpiarle sus gracias pero aparte de eso no me quejo disfruto de ellos cada momento en el que puedo.

En la escuela sigo leyendo libros enormes y haciendo ensayos de investigación el doble todo marcha bien en mi plan estudiantil, pronto me podre recibir.

El recuerdo de Kyan aveces me ronda por la cabeza como un terrible fantasma jugando a no irse aveces duele pero no dejo que me afecta en este tiempo no he salido con nadie no si ni siquiera si yo misma me estoy privando de ese derecho porque Kyan no me dijo absolutamente nada del tema no me dijo si lo tenia que esperar o no el solo se marcho y fue solo una noche en la que nuestros cuerpos estuvieron juntos. solo una noche y ya, solo eso.

Los últimos claveles secos que me regalo Kyan siguen en un florero de mi mesa no me atrevo a tirarlos prefiero verlos y que me maten un poco mas.

Una mañana en la que nada me podría sorprender y así de simple paso.

Mi teléfono sonó en timbre de llamada con una lada un poco extraña.

Era Kyan al telefono, pero no fue lo suficientemente fuerte para poder decirme la verdad.

-Hola princesa.

-¿Kyan?

-Sí, soy yo....

-¿Comó has estado?

En este momento empece a notarle una voz completamente quebradiza.

-Estoy bien pero no quiero hablar de mi. ¿Comó están todas mis mascotas? ¿Atila está bien? Comó te va en la escuela?

-Bueno Atila ya no es un cachorro ahora es un enorme perro el esta bien, me hace compañía y todo bien aquí estoy bien en la escuela. ¿Y tu como te va en Inglaterra?

-Me va igual que si estuviera en New York solo que aquí son mas refinados pero pasados de aburridos. Claro que solo me faltas tu...

-Eres un tonto.

-Rose perdón pero me solo te hablaba para saber algo pero creo que la respuesta es un no, me tranquiliza bastante que estés bien pequeña.

-No se a que te refieres pero no me interesa.

-Esta bien, sabes te he extrañado bastante....bueno Rose cuídate mucho este es mi numero por favor marcarme cuando lo necesites vale, me tengo que ir cuídate mucho.

No dejo despedirme solo colgó el teléfono.

No se a lo que se refería Kyan con confirmar algo ni siquiera yo pude contestarle algo sin duda todo un misterio.

Una Sumisa Del MontonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora