XLVII

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Forest of Bowland, Lancashire.

England.

2014.

Maddison

— Yo nunca he esnifado cocaína. —dijo Allison poniendo a prueba al grupo.

Pasó un minuto y todavía nadie había bebido hasta que vimos que Louis hacía el amago de levantar la mano en la cual tenía el vaso rojo.

— Eh, relax. No iba a beber. —dijo y al segundo se echó a reír.

Menos mal. Aunque, ¿a mí qué más me da?

Valerie levantó su vaso y bebió de él dejando a todos los presentes con la boca en el suelo.

— ¿Valerie? ¿Tú? 

— ¿Qué pasa? En el instituto. —respondió ella como si fuera algo normal.

Si hubiera llevado unas copas de más, admito que habría resultado gracioso, pero en este estado de sobriaguez no me ha parecido tan chistoso el hecho de que mi amiga haya esnifado cocaína en una fiesta alocada de instituto con los cuatro típicos porretas. No quiero imaginarme la continuación de aquella noche después de aquel acto.

— Quién lo hubiera imaginado, la famosa Hudson esnifando cocaína con sus amigos delincuentes del instituto. —repuso Louis.

— Y echaba tanto de menos a los delincuentes que en cuanto os vi decidí que deberíais ocupar su lugar. —respondió ella guiñándole el ojo.

Éste se echó a reír y negó con la cabeza.

Oí las risas de mi hermana y detrás de ellas haciéndoles un coro las de Zayn. Volví la cabeza y vi sus vasos tirados encima de la moqueta mientras no paraban de reírse de quién sabe qué absurdez. Parece ser que soy la única que no está de humor esta noche.

Me levanté de mi sitio y al instante vi cómo todos dirigieron sus miradas hacia mí, me hubiera gustado decirles a todos que dejasen de mirarme como si tuviera dos cuernos en la cabeza, pero preferí callarme e irme a dormir.

— Me voy a la cama, chicos. Creo que se me ha subido el vodka a la cabeza. —era una excusa patética pero no estaba en condiciones aptas de pensar algo mejor.

Zayn le dio un respiro a sus risas y se dio cuenta de que mi presencia a su lado se había desvanecido como un soplo de aire frío y me dedicó una pequeña sonrisa.

— ¿Tan pronto? —vaya, no sabía que te importase tanto ya que hace un momento estabas pasando de mi culo y descojonándote con mi hermana.

— Sí, necesito tumbarme o explotaré. —le sonreí, di las buenas noches y empecé a  subir las escaleras que conducían al piso de arriba.

— Ya. —susurró más para él que para mí.

Sabía que me iba a seguir, de hecho, escuché cómo sus botas impactaban contra los escalones de madera en busca de una explicación, que estaba claro que no tenía.

Mierda Maddison. Piensa algo, ya.

Sus pasos eran cada vez más rápidos y sentí que mi cerebro iba a explotar tarde o temprano, pensé una excusa rápida pero mis pies se dirigían a la habitación en la que él y yo dormíamos. Antes de que le de tiempo a entrar, cerré de un portazo y me planteé esconderme debajo de las sábanas como cuando era pequeña.

— Eh, Madd, ¿se puede saber qué te pasa? Un poco más y te haces una maratón. —bromeó mientras cerraba la puerta.

Casi me río, casi.

Screwed up mess | One Direction Fan Fiction |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora