Un vampiro persistente [Yaoi/Gay]

Capítulo 14: Libro antiguo.

¿Quién iba a creer que tantas cosas pasaran tan pronto?. Muchas aventuras, si podía llamarlas así, habían sucedido en éste mes. Cosas importantes y extrañas habían surgido de la nada, pero ahora sólo había una cosa que me importaba. Ya había pasado una semana desde la última vez que había asistido a clases y casi un mes desde mi encuentro con Alex. Sin embargo las cosas se habían calmado ahora y era momento de ponerme al corriente con mis estudios. 

Hace unas horas había intentado hacer que Alex viniera conmigo al colegio pero tan sólo oír la palabra "ir" había inventado la escusa más barata del mundo y se marchó una vez que se aseguró de dejarme en mi casa. 

Justo ahora estábamos en medio de la clase de Historia, una clase no tan aburrida gracias al maestro que la impartía, de hecho hasta algunas veces solía ser divertida. Shion estaba sentado a mi lado intentando mantener los ojos abiertos mientras que yo me esforzaba por escribir todos los datos que me servirían a la hora de los exámenes. 

-Bien alumnos, la clase ha concluido. Espero ver sus reportes sobre "Las leyes borbónicas" la próxima semana-comenzó a borrar la pizarra mientras que los alumnos salían apresurados por la puerta-. Pueden salir-comentó algo sarcástico haciéndonos reír a los pocos que quedábamos. 

Yo y Shion recogimos nuestras cosas de una forma algo lenta pues era la última clase. Luego caminamos hacía la entrada mientras el profesor apilaba unos papeles en su escritorio. Pero antes de que llegara a la puerta alguien me llamó.

-Kei-llamó el profesor Meirt. Yo me quedé congelado en la entrada sintiendo como el color de mi cara se iba-. ¿Puedes venir un momento?, tengo algo que hablar contigo-terminó. Shion me lanzó una mirada de burla y sin voltearnos ninguno de los dos aún, pude leer fácilmente en sus labios "ya-va-lis-te" para después abandonarme dejándome a solas con el profesor. 

-Sí, profesor Meirt-dije volteando hacia donde estaba él y me acerqué a paso relajado-. ¿De qué quiere hablar?-comenté lo más calmado que pude. El dejó los papeles en el escritorio y me miró fijamente un poco serio pero a la vez amigable.

-No es necesario que estés tan tenso, será algo rápido-me sonrió amigable y me hizo señal de que tomara asiento en el pupitre de adelante. Lo cual hice-. Kei, ¿has estado enfermo?, últimamente has estado faltando a clases ¿estás bien?. Me preocupa que uno de mis estudiantes estrellas falte tantos días-preguntó un poco preocupado. Lo miré un momento antes de responder.

-Sí, no es nada de que preocuparse-contesté algo nervioso-. Solo fue un pequeño resfriado por el cambio de horario y la presión, lo siento no volverá a pasar-contesté con algo de culpa. El me hizo una rápida inspección por todo mi rostro tensando un poco la mandíbula y entrecerrando apenas notable los ojos para seguido asentir despacio.

-Entiendo, bueno con respeto a mi clase-volvió a sonreír de una forma radiante y profesional. Se sentó en su silla y junto las manos a la altura de su barbilla-. Dado que tus faltas fueron por enfermedad, te daré la oportunidad de entregarme todos los trabajos atrasados la próxima semana y a parte no te pondré faltas ¿qué te parece?-cuestionó interesado por mi respuesta. Si hubiera estado con otra persona juraría que en éste momento lo habría abrazado hasta matarlo ante tal buena noticia. 

-¡¿Enserio?! ¡gracias! ¡le aseguro que haré mi mejor esfuerzo!-contesté casi gritando y parándome de golpe de la silla. 

-Bien, eso espero-sacó una hoja de su portafolios y me lo entregó. Yo lo agarré-. Estos son los temas, las instrucciones que debes hacer en cada trabajo y algunas referencias de libros que te pueden ayudar. Puedes irte-finalizó, pero antes de que pudiera agradecerle y que me desmayara de tanta alegría se marchó rápidamente. Vi la hoja que tenía en mis manos, todo estaba perfectamente ordenado. Ahora lo único que tenía que hacer era empezar y terminarlo pronto.