Salí de la oficina apurado, no quería toparme con el rubio alto, pero para mi desgracia estaba en la entrada despidiéndose de todos.
-Rayos..- Susurré entre mi molesto, quería evitar hablar con aquel tipo.
-Yo también lo siento hinata..- Susurro tanaka.
-¿Que?- Hable sorprendido ¿Me escucho?.
-No quiero toparme con el rubio, ni que me lo muestren..- Susurro fastidiado.
-¿Sucedió algo con el?-
-No es mucho pero.. hoy choque con el.. y ni siquiera me ayudo a recoger lo que el había botado al piso- hizo un gruñido.
-Que vengativo..-Susurro sugawara a tanaka.
-Vamos.. que mas da- Camine rápidamente hacia la entrada, junto a ellos.
Cuando camine un poco el rubio miro mis ojos de forma extraña, luego aparto la mirada quitando los lentes de su vista.
~~Sus ojos son de un color claro~~.
En cambio los míos son obscuros. Me pregunto que color de ojos le agradara mas a kageyama, si fuera el color claro y lindos de el, seguramente me entristecería mucho. Después de todo, me gustaría que le gustasen mi color antes que otro.
Seguí caminando rápidamente, al cruzar la mampara de la puerta me alivie y respire hondo ya sabiendo que el chico rubio no se despediría de mi. No me gusta ser así, menos ignorar a una persona solo por que habla mucho con mi... ¿novio?, ¿Somos novios?.
Sentí el ardor en mis mejillas nuevamente. Sentía la ansiedad de verle otra vez, creo que es necesario que le diga lo de el almuerzo si no de otra forma no lograría verle a la cara otra ves. Mire hacia la tienda, dispuesto a hablar con la empleada para saludarla como siempre, pero esta no se encontraba adentro. Volví a mirar hacia los lados, esta se encontraba sentada en la plaza de al frente, miro hacia mi saludando de una forma débil. Me pregunte que sucedía así que cruce hacia al frente para saber.
-Hinata-san, buenas noches..- Saludo un tanto desanimada.
-Buenas noches, ¿Que sucede?- Me senté al lado de ella preocupado.
-Mi madre ha estado enferma últimamente..- miro mis ojos con tristeza.
-Ya veo...- No podía reaccionar muy bien ante su preocupación, no sabia como responder realmente.
-Se niega a ir al hospital...- Su voz se quebró ante mi.
-Yachi....-
-No quiero que le pase nada malo, y menos que sea algo grave...- Rompió a lágrimas crudas.
Se acerco a mi abrazando mi torso, no tenia mas remedio que abrazarla hasta que para su llanto desesperado. Le daba pequeñas palmadas en su espalda tratando de calmar su ser destrozado.
- ¿Puedo llamarte...?- Se alejo de mi mirando mis ojos.
- Si aquello alivia tu tristeza si...- Quería ser bueno, quería ser amable con ella. Luego de todo ella me conocía hace como un año y medio.
Saque mi celular de mi bolsillo, esta hizo lo mismo anotando mi numero.
- Te llamare luego...- Se levanto de la banca secando sus lágrimas con tristeza.
- ¿Volverás a tu turno?- Trate de hacer tema de conversación.
- Si... Así que nos escuchamos otro día - Sonrió triste dejando su mirada gravada en mi, dando una pena tremenda.
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¿Cual es tu color?
RandomTratando de olvidar aquel gran amor, sencillo y simple que ha tenido durante años. En el numero cinco es en el cual este apareció repentinamente. [Narrador: Hinata Shoyo]