III

30 1 0
                                    

No teníamos tiempo que perder. En cuanto se cerró la sesión Mia propuso que nos fuéramos a la semana siguiente. Mia dijo que si alguien más quería unirse, que lo pensara y que se uniera lo más rápido posible. Cuando la sesión se cerró una chica llegó corriendo y jadeando.

-¡Hola! Lo siento, no pude llegar a tiempo, una maestra me detuvo y me dio otro de sus discursos, pero yo quiero participar- me miró a los ojos y no los apartó- me llamo Xareni- me extendió una mano y yo la tomé.

-Yo soy...

-Emily, lo se, yo te admiro demasiado, y espero que podamos ser muy buenas amigas.

Xareni parecía buena onda. Era chiquita, igual de bajita que yo, tal vez un poco más chica, tenía el pelo corto como un chico, pero le quedaba muy bien, iba de negro de cabeza a pies, era demasiado blanca, y sus ojos eran marrón. Era tipo gótica, pero parecía que podía hacer reír a cualquier persona en cualquier momento, así que sonreí.

-Mucho gusto Xareni... Xareni qué perdón?

-¡Oh! Soy Xareni Dashner. 

-Bueno Xareni Dashner, bienvenida.

16. No eramos muchos, pero al menos los suficientes como para hacer este viaje.

La lista era simple, y no conocía a muchos de los voluntarios, excepto a mis amigos:

Adam

Mia

Linda 

Anastasia

Claire 

Andrew

Carlos Martin

Xareni

Militza (Mily)

Marco

Edwin

Rafael (Rafa)

Nina

Amber

Olivia (Livvy)

Y yo.

Nuestro pequeño grupo. 

Quedé de ver a Mia en la noche. Más bien, todas las chicas lo acordamos. Empezaríamos a empacar porque partiríamos el domingo en la noche y estábamos a viernes.

Toqué la puerta y me abrió Xareni.

-Hola. Pasa, estábamos a punto de empezar.

Pasé y Xareni cerró la puerta detrás de mi. Eramos más chicas de lo que pensé. No conocía a Livvy, Amber, Nina, Mily y apenas conocía a Xareni, pero en cuanto llegué todas me saludaron.

-Bueno, bueno, cálmense, Emily es sólo una chica más dijo Anastasia, y yo le agradecí con la mirada.

-Hola chicas- empezó Mia- como saben, el domingo partiremos para emprender nuestro viaje, va a ser uno muy peligroso así que les pregunto por última vez, ¿están seguras de que quieren venir con nosotros? ¿No hay alguien que se quiera echar para atrás? Esta es la última oportunidad.

Recorrí la mirada entre todas nosotras. Nina y Amber estaban recargadas la una en la otra, supuse que eran hermanas porque tenían el mismo tono castaño, los mismos ojos verde aceituna, las mismas pecas por todo el cuerpo y la misma expresión insegura. Las dos se mordían el labio.

Livvy estaba recargada en la esquina. Ella era la más pequeña de todas nosotras, pero una que llevaba ya mucho tiempo con su inmortalidad. Era un poco menuda, pero tenía unos rizos negros que le caían por la espalda y le llegaban a media espala. Tenía ojos tan cafés que parecían negros y se vestía con colores demasiado chillones.

La elegidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora