Nuestro amor será infinitamente eterno

Capitulo 12:A pesar de todo le quiero

Narra Miriam:

Llegue al hospital, evidentemente sin ella porque todavía era pronto para que conociera a mi familia y mucho más en esta situación tan delicada, no es por ella si no por mis progenitores y mi hermana, se como son ellos respecto a mis parejas y no quiero que empiecen con mal pie, sin embargo, me hizo venir acompañada de Jose porque no queria que viniera sola.
recorrimos pasillos y pasillos y no dábamos con el así que optamos por preguntarle a la chica de recepción.
-Hola buenas, han ingresado a mi padre hace poco por un accidente, es Alejandro Ruiz, de 48 años
-Un momento que busco su ficha- estuvo tecleando en el ordenador un par de cosas hasta que nos habló- si, ha sido ingresado pero no acepta visitas.
-Como que no , si me ha llamado mi hermana que está aquí con el.
-Eso es imposible aquí pone que nadie puede estar ni si quiera en la sala de espera. esta en la UCI y no admiten gente .

Empecé a ponerme nerviosa y José lo notó así que se puso a hablar el.
-señorita, le están diciendo que hay familiares en esa sala, como no vamos a poder pasar nosotros también, somos familia directa del paciente y más si es un hospital privado y tan caro como este, tenemos derecho a exigirle la visita.

- Dejenme consultarlo con el gerente por favor- la chica se dio la vuelta para hablar por teléfono con el que se supone ser su superior y José aprovecho aquello, se incorporó sobre el mostrador y leyó la ficha de mi padre que aún continuaba en la pantalla del ordenador.
-José ten cuidado no te vaya a ver por favor- le indique yo.
-No te preocupes que ya está- dijo volviendo a su posición inicial.- esta en la UCI efectivamente, en la segunda planta pero no se que pasillo es.Nos podemos tirar un rato buscando.
- Bueno algo es algo,vamos a intentarlo- abandonamos el mostrador y con el dejamos atras a la recepcionista grosera.

Probé a llamar de nuevo a mi hermana pero seguía sin coger el móvil entonces no sabíamos donde se encontraban hasta Que vi a lo lejos una figura famliar, parecía que era mi hermana y su repelente novio. Nos encaminamos hacia allí y en efecto eran ellos, acompañados de mi madre y mis tíos.

-Miriam hola- dijo mi madre dándome un abrazo.

-Hola- dijo mi hermana fríamente

-¿Que tal esta papa?¿Que ha pasado?- pregunte

-Venia de una reunion importante cuando el chofer se distrajo, se salto un semaforo y chocaron contra un autobús, los medicos le han hecho pruebas a tu padre, dicen que esta muy debil, puede llegar a perder la memoria, la vista y el oido, Se llevo un gran golpe eso si, el chofer solo tiene golpes leves, esto no va a quedar asi, ya esta en manos de nuestros abogados- dijo mi madre

-¿Y se le puede ver?- pregunte impaciente

-De momento se le puede hacer visitas pero de uno en uno, maximo dos, pero no respondera, está sedado.

-Quiero entrar- dije decidida- Jose por favor acompañame- dije mientras le miraba

-El no puede entrar, no es de la familia- se interpuso mi hermana de por medio

-Si es de la familia, otra cosa es que le conozcais- vi como por un momento mi madre sonreia, seguro que se imagino que estaba saliendo con un hombre y no con una mujer que es lo que ella siempre ha querido pero yo no le iba a dar el gusto.- además tu estas con este aquí- dije señalando a su novio con la cabeza- y tampoco es de la familia.
-Si que lo es- me replicó.
-Lo que tu digas- pase de largo agarrando a José de la mano y trayendolo conmigo

Entramos en la habitacion y ahi estaba mi padre, tumbado en la cama, parecia hasta bueno cosa que el nunca ha sido.

-Si quieres te dejo sola Miriam, querras intimidad

-No Jose, porfavor, quedate, no quiero estar sola- Note como se ponía a mi lado y me abrazaba.

-Nunca fue bueno con nosotras sabes, con ninguna de las tres pero a medida que fue pasando el tiempo se fue haciendo el señor de la casa, le teniamos que llamar señor, pero yo no podia, mis sentimientos me hacian llamarle papa, cuando cai en la adolescencia y me di cuenta de quien queria ser yo todo cambio, empezaron los dos a ponerse en mi contra entonces mi hermana hacia lo mismo y mira que nos llevábamos bien pero consiguieron despegarme de ella también, se unieron entre ellos para dejarme a mi de lado, no queria estudiar lo que ellos elegian para mi, no queria ponerme los vestidos de pija que me compraban, no queri acudir al club de campo con ellos, no queria ir a las fiestas de ricachones, no queria tener como pareja a los hijos de sus amigos, no queria ser feliz a su manera si no a la mia....- llevaba un rato llorando, era imposible no hacerlo si me estaba desahogando como nunca antes lo hice- pero aun así, a pesar de todo lo que me hicieron pasar, a pesar de todo lo que ÉL me hizo pasar por dentro le quiero, es mi padre, siempre lo ha sido y siempre lo será, puede que no se merezca estas palabras pero jamás se las he dicho, siempre le he tenido como un referente para mi cuando era pequeña, siempre era mi ejemplo a seguir pero cuando empezó a beber sabia que debia de cambiar las cosas, que no tenia que seguir sus pasos si no hacer lo que me dictara mi corazón e hiciera lo que yo realmente sentía, aun con todos los castigos, todas las broncas y discusiones, todas las escapadas de casa, todo lo que hemos pasado, siempre lo hacía por ellos, por hacerles ver que se puede ser feliz sin tanto lujo, sin tanto refinamiento, siendo como las demas personas viven a lo largo del día, ser normales y no tener que ser alguien dependiendo siempre del dinero que tengamos, puede que solo quisiera llamar la atención de mi padre por aquel entonces, siempre estaba metido en sus empresas y apenas pasaba por casa, ese fue otro de los motivos que, aunque me cueste aceptarlo, me hizo cambiar de idea con todo, yo solo queria pasar más tiempo en familia pero siendo felices no siempre midiendo al milímetro lo que hacer y lo que no...me duele, me duele saber que puede que estas palabras nunca las vuelva a decir pero no veo mejor momento que este para decir de una vez todo lo que siento.....-se hizo el silencio y me acurruque al lado de Jose- Gracias por estar conmigo Jose, gracias por no haberme dejado sola.