Bajo del auto y me apresuro a correr hacia la puerta de la casa de la castaña rogando al cielo que no se haya ido ya. Justo después de subir al auto mi celular había sonado, el número era de la casa de mis tíos y aunque estaba dispuesto a ignorarlo consciente de quien era, terminé por responder y aceptar desayunar con el imbécil de mi primo, después de todo había entrado de nuevo en la vida de Nora, no podía estar más feliz, "lo estarías si ella quisiera ser tu novia" susurró una voz pero la había ignorado, no se construyó Roma en un día. Había pasado toda la mañana ayudando a Alan ayudando a limpiar su casa y no le había contado nada acerca de Nora, no quería ocultarcelo pero tampoco me nació decírselo, el tampoco preguntó así que no creía que se considerara mentira, la puerta se abre después de unos momentos de haber tocado el timbre y sonríe al verme, si, ella sonrío al verme.
—Hola Sykes —dice besando mi mejilla y dejándome tieso, asiento y trago saliva haciéndola sonreír de nuevo, -puedes decir que me veo bien, los amigos hacen eso -asegura y se gira, y maldita sea, podría jurar que agitaba las caderas a propósito, ¿estaba coqueteando?, "esta intentando probarte" me advierte mi voz interior y sacudo la cabeza, "no voy a caer Nora Hansen" pienso mientras caminó detrás de ella.
—te vez bien —digo de la forma más casual metiendo mis manos a mis bolsillos para sacar la llave y abrir su puerta, —aunque yo me veo mejor —bromeo y ríe mirándome, muerde su labio y se encoge de hombros.
—No puedo protestar a eso —dice y se desliza en el asiento, ¡carajo!, esto sería mas difícil de lo que había pensado.
Subo a mi lugar y coloco mi cinturón sintiéndola sonreír a mi lado.
—Chico precavido eh? Me agrada —se burla y la miro de soslayo.
—Conocí a una chica bastante decidida hace tiempo —digo y sonríe con malicia.
—¿Ella era sexy? —cuestiona y niego encendiendo el auto.
—Solamente caliente como el infierno —agrego sonriendo al sentirla hacer lo mismo.
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Cuando llegamos al boliche bajamos del coche y caminamos hasta la entrada, —entonces... ¿Dónde los veremos? —preguntó metiendo mis manos a los bolsillos de mis pantalones y a encoge de hombros.
—Han cancelado, creo que solo seremos tu y yo —dice y se adelanta, frunzo el ceño y la observo mientras avanza, su celular jamás sonó, ella jamás lo sacó, aún estaba probándome, sonrió decidido y camino detrás de ella, "voy a ser todo lo que esperas que sea Nora Hansen, vas a enamorarte de mi otra vez, y ahora no voy a defraudarte" pienso mientras camino a su lado empujando su cuerpo con mi hombro haciéndola reír y empujarme riendo.
—El punto de el juego es tumbar la mayor cantidad de bolos Nora, no dejarlos parados —la molesto cuando su bola se va por la sanja una vez más y se gira molesta, —la cinta de tu zapato —señalo antes de que camine y suspira inclinándose para abrocharla, cuando lo hace mi pecho duele al ver lo que cuelga de su cuello, —lindas gafas —susurro y se tensa, cuando vuelve a enderezare toma la pequeña joya entre sus dedos y sonríe.
—Hace un tiempo conocí a un chico, era un idiota pero sabía dar buenos regalos —murmura y me observa, se que espera que diga algo porque me conoce, y sabe que eso quiero hacer, quiero explicarle cuanto pensé en eso, en ella, en nosotros, pero ella no quiere escucharlo, aún no esta lista para eso y yo pienso esperarla, cuanto sea necesario.
—Conozco algunos tipos como ese —digo haciéndola sonreír.
—Seguro que sí —me molesta y la miro con recelo haciéndola reír, tomo la bola roja y me acerco a mi columna listo para lanzarla.
—Te apuesto a que hago chuza —digo y alza una ceja, niega y se pone de pie caminando hacia mi.
—Si fallas me mandarás una foto desnudo —dice y alzo una ceja justo como ella.
—¿y si lo logro? —cuestiono y sonríe aún más encogiendo se de hombros luciendo malditamente adorable.
—Entonces yo te mandaré una foto desnuda -dice con tranquilidad y mis ojos se abren, muerde su labio evitando reír ante lo que supongo era un rostro lleno de emoción.
—¿Por qué haces eso si sabes que voy a acertar? —cuestiono y niega.
—Tal vez quiero que me veas desnuda —señala y niego, quiero decirle que eso es jugar con fuego pero no es algo que me molesta, así que me giro y lanzo la bola, había hecho mucho hasta ahora como para arruinarlo en una noche por ver algo que no había olvidado aún, los bolos caen y notó el último bailar sobre su base "no te caigas, por favor no te caigas" y como sí el objeto me escuchara se queda en su lugar, me giro para encontrar a Nora con sus ojos abiertos en sorpresa, sin poder creer que había errado, una vez más había pasado su prueba.
—Fallaste —señala y me mira, y se que ambos sabemos que ha sido a propósito.
—Supongo que terminó mi buena racha —digo de forma casual, pero nuevamente ambos sabemos lo que significa, "te dije que haría las cosas bien gafitas, y lo voy a cumplir"
—Supongo que me debes algo —agrega divertida y sus ojos brillan, "estas avanzando Oliver, lo estas haciendo bien" me apremio mentalmente y asiento guiñadole un ojo haciéndola reír y sonrojarse.
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Salgo de la regadera y camino frente al espejo, retiro la toalla y tomo mi celular, "si pierdes tendrás que mandarme una foto desnudo" sonrío con malicia y saco una foto de mis pies y el piso de mármol.
"Cumplido, estaba desnudo mientras la enviaba" escribo y envío.
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Obteniendo mi victoria.©
Teen FictionSegunda parte de "El que se enamora pierde" -------------------------------------------------------------- Obra registrada en safe creative. NR 1507024547768 Prohibida su copia y/o adaptación. Todos los derechos reservados © 2015