Obteniendo mi victoria.©

12.

Y después de su confesión no hubo besos, no corrí hacia ella y la hice mía nuevamente en la pared de la habitación, no pude siquiera decir nada porque Paula y Alan hicieron su aparición, escuchaba sus voces haciendo preguntas e invitaciones a lo lejos pero no les tomaba atención, todo lo que miraba eran esos hermosos ojos azules posados sobre mi con intensidad, ella había entendido todo lo que había tratado de enseñarle, ella sabía todo lo que necesitaba saber, pero aun así había decidido venir y pretender que no lo hacía, cuando vuelvo a la realidad estoy escuchando un ''adios'' de paula seguido del cierre de la puerta llevándose consigo a mi chica.

—Entonces hombre... ¿Cuáles son los planes? -pregunta y me encojo de hombros, yo ya no hacía planes, los únicos que tenia me los había fijado desde hacia unos meses y era todo lo que me interesaba hacer, cualquier cosa que apareciera en el camino estaba fuera de mis manos, —Genial, nos vamos de putos -dice emocionado y río, porque él no era así, no lo fue antes y sabía que no lo sería ahora, no cuando su novia llevaba un anillo en el dedo.

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La música del lugar suena fuerte y aunque pensé que estaría aburrido, la alegría de mi primo logró contagiarme.

—Harnold y Leon están cerca, es probable que nos alcancen -informa y asiento de acuerdo, las cosas estaban mejor ahora, así que podría ser divertido, cuando finalment logramos entrar caminamos hasta una de las mesas libres y nos sentamos mirando el lugar, jamás me sentí tan incomodo un bar, solo Alan y yo sin intención alguna de conseguir chicas.

—Si, será divertido -murmuro con sarcasmo. Una chica se acerca a ofrecernos bebidas y tomamos dos shots de tequila, hablamos sobre el ultimo partido de futbol y cuando estamos por decidir que no resulto como esperábamos el grito emocionado de Harnold nos hizo detenernos.

—Hola guapos -chilla y muerdo mi labio para no reír ante la cara de Harnold y el cabello de Leon.

—Oh por dios ustedes no.....

—Oh si -presume Harnold haciendo que los ojos de Leon se abran avergonzado, si definitivamente sería divertido.

Las platicas pasan a volverse discusiones sanas entre nosotros intentando molestar a Harnold, quien nos manda a la mierda cada dos palabras haciendo sonreír a su esposo.

—Ustedes chicos, son un par de jodidos idiotas -dice Leon entrando en defensa de su esposo y reímos.

—Olvidalo Le, vámonos a bailar -anima Harnold y nos gruñe antes de irse.

—Realmente me agrada ese idiota -admite Alan y asiento.

—Es imposible no caer en su encanto -cito las palabras que alguna vez Nora me dijo hablando de su amigo, sonrío antes de que mi primo pueda decir alguna estupidez una tercera y dulce voz nos interrumpe.

—Hola -saluda la peliroja para ambos pero su mirada centrada solo en uno, mi primo, ella es hermosa, realmente, alta y con un cuerpo de escándalo, —¿quieres bailar? -pregunta a mi primo y este niega avergonzado, ella abre sus ojos incrédula de haber sido rechazada y me mira a mi, —¿es gay? -cuestiona y suelto una carcajada haciéndola molestar más, después de decirnos idiotas se marcha y Alan me dedica una mirada de advertencia.

—Soy Fiel, gracias -dice con sarcasmo y me encojo de hombros en señal de ''yo no hice nada''.

Minutos después otra chica se acerca a la mesa y cuando Alan esta dispuesto a negarse se gira hacia mi.

—¿Bailamos? -cuestiona y la sonrisa se atora en mi garganta, abro la boca para negarme pero al notar los cuchicheos de las chicas a su espalda puedo notar que la han retado, dejo mi vaso en la mesa y asiento.