Los Mellizos Potter: Luz y Oscuridad. (Tercera Temporada)

Capitulo 11 Cómo saber si estas enamorada en tres sencillos pasos

Después de haber caminado 20 kilometros me arrepentí de haber aceptado que Argos nos acercara al lugar que debíamos ir...cualquiera que fuese, era mejor hacerlo a la antigua.

-Que bueno que al menos estoy haciendo esta caminata con un amigo-dijo Caroline.

Llevaba alrededor de tres horas lanzando ese tipo de indirectas e ignorandome por completo.

-¡Basta!-grite furiosa-¡Si no querías venir bien te hubieras quedado! No has hecho más que ignorarme y tú-señale a Alex-¿no piensas hacer nada?-me miraron sorprendidos, definitivamente no pensaron que reaccionaria así pero con todo lo que estaba pasando era díficil no hacerlo-¿Y bien? ¿Van a decir algo?

Hubo un largo silencio en el que dude si ellos habían escuchado mi pregunta y siquiera me hubieran entendido una palabra.

-No pienso disculparme por algo que no fue mi culpa-habló Caroline, tan sincera como siempre.

-Tampoco fue la mía-me defendí-¿Crees que yo quise que me secuestraran? ¿Piensas que disfrute el ser torturada hasta desear la muerte por algo que yo no sabía?

Caroline y yo nos habíamos acercado poco a poco y habíamos terminado en una pose amenazadora, nunca creí que terminaría así con mi mejor amiga.

-Chicas, chicas, tranquilas, no quierrán hacer algo de lo que se arrepentirían ¿verdad?-intervino Alex poniendose en medio de nosotras.

-Explicate-escupió Caroline

Levante una ceja desafiente.

-No. Me. Jodas.-dije molesta

Caroline alzó su mano en forma de puño y yo le mire a los ojos aún mas desafiante esperando el golpe, con mi orgullo a todo lo que da.

-¡Está bien, chicas idiotas! ¡No permitire que se maten emtre ustedes por algo tan estupido como que Nina no nos haya escrito en medio año! -grito Alex empujandonos para alejarnos-¿En serio son tan estupidas? No contesten.

La verdad me calló como un balde de agua fría, era verdad no había razón para que Caroline y yo pelearamos por algo en lo que ninguna había tenido la culpa. Mire a Caroline, ella no parecía con intesiones de disculparse así que decidí ignorar la ira y el orgullo que sentía para disculparme.

-Escucha, Caroline, lo siento en verdad-comenzé a decir con toda sinceridad.-Es solo que después de lo que pasó este verano pensé que era mejor alejarme un poco del mundo griego, a mi padre no le agradó mucho eso por razones obvias pero...-me enfurecí-¡el no esta aquí cuando vengo! ¿Qué mierda?-grite al cielo con la esperanza de que me escuchara.

-¿Crees que me molesta el hecho de que no querías ver a tu padre? No contestes, el culpable de mi furia es él...-me lanzó una mirada significativa y me sonroje-¿Acaso creías que no me enteraría de que estas enamorada? Por favor, soy la hija del amor...

Solté una risa nerviosa, yo no estaba enamorada de Cedric, eso era imposible.

-Esperen, esperen...¿de qué demonios me perdí?-intervino Alex confundido, no lo culpo, hace un momento tratabamos de matarnos y ahora hablamos como si nada e intimamente.

-Nina está enamorada y nos lo dijo-espetó Caroline molestá de nuevo

-¡Oh! Eso está bienl pero...¿de quién?-dijo comprendiendo un poco

Me sonroje completamente.

-No estoy enamorada-me defendí muy poco convincente, no era posible que estuviera enamorada, quería a Cedric con todo mi alma y sabía que posiblemente él me quería de igual forma.