Los Mellizos Potter: Luz y Oscuridad. (Tercera Temporada)

Capitulo 15 Sirius Black...otra vez.

El cielo se encontraba totalmente despejado a excepción de unas cuantas nubes, era el primer día de sol después del invierno y la mayoría de los estudiantes lo estabamos aprovechando al máximo.

-Es increíble ¿no?-dijo Harry a lado mío, estabamos recostados en el pasto disfrutando el calor.

-¿El qué?-pregunte confundida.

-Que desde hace dos años casi no hablamos-contesto triste.

Esa verdad me impacto, era totalmente cierto, desde que me entere que era semidiosa casi no he hablado con mi hermano, o con alguien en general. Hermione estaba tan ocupada con los deberes que apenas intercambiabamos palabras, me había peleado con Fred por lo que tampoco hablaba con el o con George, Ron y Harry estaban casi siempre juntos así que tampoco hablaba con ellos demasiado a Alex y Caroline los veía cada verano y ocasionalmente nos escribiamos, entonces caí en la cuenta de que con la única persona que hablaba era con Cedric.

-¡Oh no!-exclamé sentandome de golpe

-¿Qué? ¿Qué pasa?-pregunto mi hermano imitando mi acción.

Cubrí mi cara con las manos avergonzada.

-¡Me convertí en la clase de chica que odio! Solamente habló con mi novio e ignoro a todo el mundo, ¡me doy asco!-me lamente odiandome.

Al escuchar mis palabras, mi hermano se rió a carcajadas.

-¿Qué te sucede?-le pregunte furiosa

-¡Que eres rídicula!-se rió de mi

Y sin poder evitarlo, me lance hacía tacleandolo para callarlo de una vez por todas, ambos estabamos riendo ya que hacía mucho tiempo que no peleabomos así. Nuevamente, nos recostamos en el pasto disfrutando la compañía del otro, dioses, por fin un momento de paz. Regresamos a nuestra Sala Común donde nos encontramos a Ron y a Hermione peleando, de nuevo.

Sin dejarla hablar, tome a Hermione del brazo y la arrastre hasta nuestra habitación obligandola a recostarse y pidiendole que me hablara de su problema, me sentí psicologa. Resultaba ser que a ella no le podía importar menos que Ron estuviera molesto con ella, ella estaba sensible por tres simples razones:

1.-La estupida menstruación.

2.-El giratiempo la estaba volviendo loca al igual que las tareas y trabajos.

3.-Draco Malfoy.

Grité como loca al enterarme de lo último y le exigí que me contara hasta el más mínimo detalle, aunque según ella solo se habían besado, yo sabía que había algo más.
Esa noche ambas nos fuimos a la cama tranquilas, lástima que no me duró mucho tiempo el gusto de dormir.

Me encontraba en una pradera rodeada de flores de preciosos colores y por un momento dude que fueran reales, un cielo estrellado estaba sobre mi cabeza y fue entonces cuando note algo demasiado extraño, en algunas partes del cielo se encontraba totalmente blanco, como si estuviera vacío.

-¿Qué esta pasando?-me pregunte a mi misma

-Urano está despertando, el reclama lo que alguna vez le perteneció-dijo una mujer joven con un vestido hecho de flores

-¿Quién es usted?-pregunté cautelosa

Sonrió, fue cuando me percate de su poderosa aura, era aun más intensa que la de un dios.

-Soy Gea, la Madre Tierra-respondió amable.

-¿Qué quiere de mí?-dije sin poder evitar el miedo en mi voz.

Lo pensó un momento mientras me veía de pies a cabeza, como si analizara de lo que soy capaz.

-Quiero que mates a mi esposo-me pidió pronunciando cada palabra con odio