Día De Escuela

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Día cuarenta y cinco

La Profe me libero, pero duplicó la vigilancia, sin contar que Erin estaba casi todo el día conmigo por orden de ella, aunque mi amiga no era una preocupación.

-¿En que piensas?.

Fue sencillo acercarme a Ailén, incluso lo que comenzó siendo una falsa amistad de mi parte con el objetivo de sacarle información, con los días nos hicimos muy cercanos.

-Pensaba en lo cómodo que me siento ahora que somos amigos.

Ailen me mira duditativa y supe que había en su mente.

-¿seguís preocupada? .

-¿Como no estarlo? Erin me odia y aunque no lo quieras reconocer no debe estar feliz de que nosotros hablemos, ustedes no quieren ni un poco a mi novio, todo se volvio tan triste.

-Lian no es de fiar, pero apoyo tu decisión que estes con el, no pidas mas que eso.

Ailén es muy importante para mí, es la única persona que me conoce del mundo real y no quiero que le suceda nada, ya sufrió mucho por mi culpa.

-Ya es hora de ir a clases, nos vemos dentro.

Se va dando saltos, típico de ella. Hace unos días pude entender porque la líder se puso ese apodo, resulto ser que La Profe es la encargada de enseñar a los nuevos todo lo necesario para sobrevivir en este juego.

Eso nos incluía a Ailén y a mi, aunque tanto Lian como Erin tambien participaban de las clases aunque no era obligatorio para ellos.

La escuela no era mas que una casa común y corriente, y el salon de clases solo una habitación mas.

Al entrar pude ver que La Profe aún no había llegado, vi a los compañeros de siempre de los cuales ninguno superaba los 17 años de edad.

Ailén y Lian como siempre sentados juntos adelante, Erin me reservo un lugar en el fondo, su mirada me decía que no le agrado mucho que la hiciera esperar.

-Recién llegó Ailén, estuviste con ella ¿cierto?.

Erin sabia que mi amistad con Ailén no era del todo sincera, acordamos que me acercaría para sacarle información de Lian pero nunca le gusto del todo la idea.

-Silencio todos, voy a comenzar, así que presten atención y no me hagan perder tiempo.

La Profe me salvó de una de las ya cotidianas discusiones con Erin sobre ese tema.

Las clases anteriores fueron mas práctico que otra cosa, para conocer las habilidades de cada uno y aprender los principios básicos.

No me extraño saber que ninguno poseía alguna magia elemental, La Profe explico que se necesita mucha experiencia para despertar nuestro poder oculto.

-Como ya todos sabemos existen 4 magias elementales, ¿cuales son?

Todos levantaron la mano, era una pregunta sencilla, contesto un niño, no recuerdo su nombre.

-Bien, las magias elementales son, tierra, agua, fuego, aire. Ahora presten mucha atención, existen 2 tipos de magia muy raras que muy pocas veces podrán ver, ¿alguien sabe cuales son?

Nadie levanto la mano esta ves, y tengo que admitir que esta clase si captaba mi atención.

- Existen sanadores aunque nunca vi a alguno ,así como también me cruce con un par de hechiceros sombra.

De todos en la clase justo tenía que contestar Lian, no pude esconder mi desagrado, por suerte solo Erin lo noto.

-Así es, además de las magias elementales existen los hechiceros de luz y oscuridad, son muy raros de encontrar y muy poderosos.

Aun no olvido que la persona con la que pase años de mi vida tenia la habilidad de mezclarse con las sombras, pensar en Bella ya era algo recurrente desde que la volví a ver en este mundo.

-Como sabrán soy una hechicera agua,a pesar de mi gran experiencia solo puedo controlar un elemento, existen jugadores que poseen mas de una sola magia, cuenta la leyenda que si alguien domina todas las magias existentes incluyendo luz y oscuridad será quien nos libere de este juego.

-Ese jugador ya existio y tu lo asesinaste

Todos en la clase incluyendome miramos sorprendidos a Erin y luego giramos para ver la reacción en La Profe, la cual respondió con total normalidad.

-No es ningún secreto, existio no hace mucho tiempo un jugador invencible, por lejos el mas poderoso hechicero, no solo controlaba todas las magias existentes además poseía poderes nunca antes visto.

Sin embargo uso sus habilidades para el mal, liderando cientos de jugadores rojos que lo proclamaban como su amo, su nombre era Zero y se autonominaba a si mismo el Angel de la Muerte.

-Disculpe Profe tengo que salir.

Ailen se fue y detrás la siguió su novio, no preste mucha atención, la historia que escuchaba nos tenia a todos muy concentrados.

- Zero y sus seguidores custodiaban la torre Malva impidiendo que nadie se atreviera a enfrentar a los jefes del juego y seguir en este mundo por la eternidad, los mas fuertes hechiceros y guerreros se unieron para enfrentarlos, así comenzó lo que se conoce como la guerra de los 100 días.

La profe encendió un cigarro, era la primera ves que la veía fumar, no le debe ser facil rememorar esos momentos llenos de muerte, quizás por eso sea tan fría y antipática.

-Estuve en la batalla final, pero no fueron mis manos las que le arrebataron la vida a Zero, su nombre era Jonathan, el mejor guerrero que haya pisado este mundo, murió junto con ese bastardo dando su vida por todos los presentes ese día.

De pronto comenze a cuestionarme cosas que no había pensado antes, ¿hace cuanto estaba La Profe en este juego? , ¿hace cuanto se habrá creado este mundo? , de cualquier forma este no era momento para preguntar.

-Los seguidores de Zero escaparon luego de su muerte y de nuestro bando sobrevivimos muy pocos, actualmente si bien están dispersos y mal organizados, los jugadores rojos siguen siendo un problema, se hacen llamar el escuadron de la muerte, se visten con tapados de diferentes colores dependiendo su fuerza, tienen una gran "Z" en su pecho y hasta donde sabemos su líder se llama Velo Nocturno.

Escuchar eso fue como un baldaso de agua helada y antes que siquiera pudiera reaccionar La Profe clava su mirada en mi.

-Me enfrente a esa malnacida en dos oportunidades, en ambas pudo escapar, pero juro que la próxima ves no tendrá tanta suerte.

Nuestras miradas no se soltaron y por dentro supe que mi odio hacia ella ya no tenia límites.

Elemental Masters y La Espada kaosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora