Capitulo 48

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  {narra _____}

Salí del ascensor a duras penas; respirando con mucha dificultad y apenas podía caminar pero ya estaba ahí y me sentía mas a salvo que en cualquier otro lugar.
Me recargue en la pared para tomar aire y lleve mi mano a mi nariz.
Tenia sangre.
Me dio un ataque en el auto de Lizzy antes de bajar, ella estaba llorando totalmente asustada de que algo peor pudiera pasar, insistió mil veces en llevarme a un hospital, incluso arranco el auto decidida a llevarme, abrí la puerta y amenace con tirarme.
No lo iba a hacer pero eso hizo que Lizzy parara.
Trate de comportarme después como si mágicamente todo estuviera bien para no asustarla aun mas, le rogué una vez mas para que no le dijera nada a Justin y al parecer la convencí.
Pero no podía fingir conmigo misma el dolor, me dolía el pecho mas que con cualquier otro ataque; esos últimos días estaba terriblemente asustada de mi muerte, mas que de costumbre, porque sabia que cualquier momento podía caer muerta de algún ataque y saber eso no es nada lindo.
Mis uñas se estaban poniendo amarillas y se rompían con facilidad, era asqueroso; el cabello se me estaba cayendo y yo me sentía cada día que pasaba con menos fuerzas.
Se volvía cada ves más y más difícil para una persona tan débil como lo era yo sobrevivir a eso.
Me limpie la nariz y las lagrimas con el interior de mi blusa pero al parecer no me dejaba de sangrar. Puse la cabeza hacia atrás y desee que Justin no me pusiera tanta atención para que no notara nada.
Me quede unos minutos afuera hasta que todo estaba bien, dentro de lo que cabe.
Saque las llaves y abrí la puerta de entrada.
Justin saltó cuando me vio, tiro su computadora al piso, metió algo debajo del sillón y se levantó rápidamente tropezándose con un cojín tirado, se paró derecho y me miro con un aspecto adorable, como de un niño pequeño que acababa de ser descubierto en alguna travesura.
—¿estabas... viendo pornografía? —pregunte con la boca abierta. El negó con la cabeza fuertemente y empezó a balbucear.
—¿qué? no ¡Claro que no! Yo solo estaba...
—esta bien, Justin —cerré la puerta a mis espaldas y camine hacia dentro con una sonrisa. —solo.. lávate las manos ¿si?
—tengo las manos limpias ¡por dios, que malpensada! No estaba haciendo eso
—te creo Justin —la verdad no le creía. —pero voy a estar mas tranquila si te lavas las manos, no voy a volver a tocar esa computadora...
—___ estoy hablando en serio —se acerco a mi y hice mohín de retroceder horrorizada. El me miro con los ojos entrecerrados. —solo me asuste porque abriste de repente.
—si, claro... ¿qué escondiste debajo del sillón, eh? —pregunte acercándome al sillón. El me tomo del brazo para que no fuera.
—no es nada, ____ —me dijo tratando de ocultar que estaba desesperado. Me gustaba verlo así.
—¿te estabas drogando? —abrí la boca muy grande. Yo sabia que no se estaba drogando o algo así, pero verlo asustado me daba gracia. —¿drogando y masturbando?
El empezó a reír —¿estas hablando en serio? Solo estaba... pues estaba tocando la guitarra un poco
—ya, no te creo pero me da igual —puse mi mano en su cara y le di unas palmaditas suaves —¿me vas a enseñar ya?
El sonrió incomodo y tomo la guitarra del piso. Yo me senté en el sillón.
Justin nunca me había dicho que tocaba la guitarra, eso era como, no lo se ¡Lo mas genial del universo! Mi amor por el creció, si eso podía ser posible y cuando me dijo que si me enseñaría quise gritar de la emoción; bueno, de hecho si grite. Solo porque estaba muy feliz.
Se aclaro la garganta varias veces antes de sentarse a mi lado con la guitarra en las piernas.
—espera, primero tócame una canción —dije emocionada. El se me quedo viendo diciendo algo con los ojos que no pude descifrar y soltó el aire de repente.—cualquiera.. la que te salga mejor
—de acuerdo, solo... déjame pensar cual te tocó, de todas las miles de canciones que me sé, porque son muchas y... —se paso la lengua por los labios y bajo la cabeza concentrándose en la guitarra.
Ahora a todos sus magníficas virtudes le iba a atribuir "músico".
Era de verdad el hombre mas perfecto en el mundo.
¿había algo en lo que fuera malo o que no supiera hacer?
Empezó a tocar algunos acordes y justo alguien toco la puerta.
Justin suspiro.
—¿estabas esperando a alguien? —le pregunte con el ceño fruncido. El negó y se levanto para abrir la puerta.
Me estire y voltee para ver quien era.
La puta Trisha estaba parada en el umbral con los ojos y la nariz roja. Ella no me podía ver.
Sollozo y se tiro a los brazos de Justin. El retrocedió asombrado pero la tomo en sus brazos. Entonces la dura mirada de Trisha se puso en mi.
—necesito hablar contigo a solas —volvió su mirada a él— es muy importante, Justy
—oh, esta bien —la abrazo otra vez y me miro por la espalda de ella. Me hizo una mueca de que no sabia que se traía entre manos— vamos a hablar a mi habitación
—esta bien —se alejo de su cuerpo y camino con la cabeza gacha por el pasillo sin mirarme de nuevo.  

The Perfect Bucket List  {Adaptada} TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora