—¿no puede ser, que? —pregunto con una ceja arriba.
—que quieras robar dulces, vamos a una tienda y te compro todos los dulces que quieras
—no entiendes, yo quiero robarlos
—¿de donde sacaste esa tontería?
—no lo se, siempre eh querido hacer eso —sonrió tiernamente— mi mama siempre me llevaba a comprar dulces cuando me portaba bien, me compraba todos los dulces que quería, pero eso no me llenaba del todo, no era emocionante ¿entiendes? Lo máximo que me eh atrevido a robar son chicles de Liam
—pero... esta bien —tome aire—te voy a ayudar
—¡eres genial! ¡eres el mejor amigo de todo el mundo! —exclamo emocionada— esto va a ser estupendo, maravilloso ¡por fin voy a robar dulces!{narra ___}
Terminamos de desayunar y nos pusimos a ver televisión un rato. Yo me movía a cada rato en el sofá, acostada en las piernas de Justin, sentada a su lado, acostada al revés, con las piernas sobre las de Justin, como sea que estuviera no podía dejar de moverme como loca ¡porque no cabía en mi de la emoción y la felicidad!
Tenia ganas de gritar, saltar, volar, no se, estaba completamente emocionada.
Me levante del sillón pensando que quizás a Justin le molestaban mis movimientos.
—¿a dónde vas? —pregunto cuando me levante.
—iré a darme una ducha ¡que no se te ocurra entrar si me tardo mucho! —grite lo ultimo cuando ya estaba en la puerta de la habitación de Justin.
—que chistosa, me matas de la risa —me grito de vuelta con voz sarcástica.
Yo no podía dejar de sonreír, mis cachetes me estaban doliendo pero me sentía como una niña pequeña y soñadora de 11 años que va a cumplir su sueño y lo era, solo que ahora tenia 17, pero aparte de ir a Londres, robar dulces era lo que mas deseaba cumplir.
Abrí la puerta del armario de Justin donde habíamos metido toda mi ropa por que el insistió y saque una camisa blanca suelta, un pantalón negro de malla y ropa interior para darme una ducha.
Me metí al baño y justo cuando cerré la puerta el pecho me empezó a doler otra vez, aun mas fuerte que las anteriores, era un dolor tan intenso que me recargue en la puerta y solté un gemido muy alto que no pude reprimir al mismo tiempo que me iba deslizando al piso con mis manos sobre el pecho. Sentí la necesidad de gritar de nuevo porque aquello dolía como si me estuvieran sacando el corazón pero apreté los dientes y golpee mi cabeza en la puerta.
—¿____, estas bien? ¿gritaste? —Pregunto Justin preocupado del otro lado de la puerta. Yo no podía ni siquiera hablar del dolor, las lagrimas ya salían como si estuviera lloviendo fuertemente en mi cara. Sin haber hecho ningún ejercicio ni nada ya sentía como me faltaba el aire de nuevo y me empezaba a doler fuertemente debajo de las costillas —¡contesta, demonios! ¿por qué gritaste? Si no hablas voy a abrir
—dios, por favor, haz que pare el dolor —susurre retorciéndome de las fuertes punzadas en dos partes vitales de mi cuerpo. Como pude levante mi mano y le puse seguro a la puerta.
—¡maldita sea, ____! Dime algo por lo menos —el dolor del pecho comenzó a bajar y ya casi no se sentía así que pude tomar aire para hablar
—estoy bien, vete de aquí —logre decir con voz ofuscada lo suficientemente alto para que escuchara pero no lo suficientemente fuerte para convencerlo.
—no me voy a ir hasta que abras —advirtió. Tome aire unos segundos y sentí como el dolor en los pulmones también se iba de mi. Me levante como pude aun sintiéndome muy débil y me limpie la cara antes de abrirle a Justin. El me miro y negó levemente antes de tomarme entre sus brazos.
Yo pase mis manos por su cuello para apoyarme en su cuerpo.
—¿ya no confías en mi? –murmuro en mi cuello mientras me acariciaba el cabello con ternura. Yo seguía débil, estaba completamente apoyada en el, básicamente el me sostenía para no caer de lleno en el piso.
—confió mas en ti que en mi misma —admití y me separe de el.
—entonces dime que pasa —pidió mirándome a los ojos con su cara muy cerca de la mía.
—solo estoy siendo patética, estos días lloro por todo, ya sabes como soy —levante mi mano y acaricie su mejilla, el miraba incredulo—todo esta bien, Justin, no te preocupes
—bueno, te voy a creer, pero quiero recordarte que yo siempre voy a estar para ti, en lo que sea —tomo mi cara entre sus manos y me beso la frente con dulzura— eres mi princesa y haría lo que fuera por ti, hasta robar dulces... te dejare para que te duches, pero sin llorar ¿lo prometes?
—lo prometo —murmure sintiéndome soñada. El me dedico otra sonrisa antes de salir del baño y yo deje salir todo el aire que tenia en mis pulmones~~~~
estábamos en la cama sentados platicando de cualquier cosa, habíamos acordado hacer lo de robar dulces otro día, para planear bien todo y esas cosas.
Nunca pensé que estaría en una cama con alguien que no fuera Marbella, hablando de cualquier estupidez por horas sin aburrirme en lo absoluto. Sin televisión, ni música , nada que escuchar mas que el sonido de nuestras voces en la habitación.
El sonido de mi celular nos saco de la perfecta platica que estábamos teniendo, Justin se levanto y cogió mi celular de la cómoda
—es Marbella —anuncio con una sonrisa. Yo me levante como si estuviera sentada en fuego y tome el celular. Justin se volvió a sentar en la cama.
—hola —conteste sin saber bien que decir
—¿hola? Maldita sea, no hemos hablado en muchos días y solo dices un frio hola —soltó Marbella sin siquiera respirar—¿cómo estas? ¿dónde estas? ¿con quien estas?
—voy a ir a hablar afuera —le dije a Justin, el asintió y yo salí al balcón, cerré la puerta corrediza para que Justin no escuchara todo lo que le tenia que contar a mi mejor amiga —lo siento, lo siento mucho, se que soy una *beep* egoísta, pero estoy muy bien, en Londres y con Justin
—¿en Londres? ¿con Justin? ¡oh, por dios! —grito emocionada— eso es genial mi querida amiga pero te tendrás que regresar
—no quiero regresar, Marbe, estoy perfectamente bien aquí
—¡tienes que regresar! Tu doctor llamo, dice que descubrió un par de cosas que quizás ayuden a encontrar la cura a la enfermedad, pero tienes que estar aquí porque necesitan sacarte sangre
—no —le conteste decidida mirando a Justin por el vidrio. Estaba sentado de perfil a mi mirando a la nada —no me importa, no voy a regresar
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The Perfect Bucket List {Adaptada} TERMINADA
FanfictionEs sorprendente lo ciego que fui, el tiempo que perdí pensando que lo inevitable jamas pasaría. Pero me equivoque y ese fue el peor error de mi vida. Todo tiene solución, menos la muerte.