Estar con Alex es genial. Me hacía sentir única, querida, especial.
Al ser las diez y veinte de la noche, nos dirigimos a la preciosa Triumph.
Me tocaba conducir. De nuevo...
Al llegar, me despedí de Alex. Fui directo a la recamara. Papá y mamá estaban en su habitación, y Sebastián estaba en la casa de Marie.
Al llegar a mi cuarto noté que sobre la cama había una enorme caja blanca con un lazo morado en la tapa.
-¿pero qué es esto?
Abrí la tapa. Y un "oww" salió de mi boca.
Un precioso cachorro de Labrador Dorado, me miraba moviendo su diminuta colita.
-y tú ¿cómo te llamas?- le pregunté tomándolo con mis manos. Lo alcé, y en una patita tenía una tarjetita colgada. Puse el cachorro en la cama, y tomé la tarjetita.
"Porque sé, que extrañas a Marshall"
PD: sé que no lo reemplazará.
PD2: No conseguí un san Bernardo, pero igual creo te gustará.
Te quiero.
Alex
¿Pero?, ¿en qué momento lo ha metido a mi habitación?
Solo hay una respuesta...
Mamá.
Lo volví a tomar en mis manos y lo abracé. Se siente como un muñequito de felpa.
-oye, ¿cómo te llamas?- tras mirarlo un momento -¡ya sé! Coli, tú tienes cara de ser Coli.
A la seis en punto, la alarma se encargó de sacarme del profundo sueño en el que me encontraba. Me giré en la cama, y unos lengüetazos impactaron mi rostro.
¡Está para comérselo!
-hay pero que perrito tan mono- dije con el típico tono con el que le hablábamos a un bebé.
Dejé a Coli sobre la cama y me metí en la ducha.
Al salir, ya me encontraba, maquillada y peinada. Me encaminé hacia la mesita de noche, para buscar mis pendientes, y de pronto "Give you Heart a Break" de Demi Lovato, me avisaba que alguien me llamaba al móvil. Lo comencé a buscar, tarareando la canción.
"The day I first met you,
You told me, you never fall in love,
But now that I get you
I know fear is what it really was"
-¿Pero dónde se ha metido? ¡A ver Monserrat!, ponle atención al bendito sonido.
Escuché.
Escuché.
Escuché.
Tarareé.
Seguí el sonido hasta mi cama. Escuché, escuché, tarareé. Venía desde donde Coli se encontraba. Lo alcé. ¡Lotería!.
-¿ha... haló?- contesté mientras dejaba a Coli en la cama.
-hola, ¿recibiste mi presente?
-oww, si Alex está precioso.
-yo sabía que te iba a encantar.
