El amor dá asco.

Capítulo 9 - ¿Felicidad?

Al irse Carlos, decido escuchar un poco de música. Me siento muy bien. Podría decir que feliz, y no sé porqué lo estoy, todas las veces que he estado feliz ha sido porque he sacado matrícula de honor, o porque he ganado alguna maratón, pero nunca me he sentido tan a gusto y con ganas de seguir viviendo así, con ilusión. Es como una sensación de esperanza, siento que a mi vida vienen cantidad de cosas buenas, y estoy deseando que ocurra.

Empiezan a sonar las primeras notas de "Por a boca vive el pez" de Fito y Fitipaldis:

Algo lo que me invade,

todo viene de dentro

Nunca lo que me sacie,

siempre quiero, lobo hambriento.

Todo me queda grande

para no estar contigo.

Sabes, quisiera darte

siempre un poco más de lo que te pido.

Sabes que soñaré,

si no estás que me despierto contigo.

Sabes que quiero más,

no se vivir solo con 5 sentidos.

Este mar cada vez guarda mas barcos hundidos.

Bailo y bailo por el salón al ritmo de Fito y Fitipaldis, es uno de mis grupos preferidos, sé que no es el gusto más común de chicas de mi edad pero, claro, yo soy diferente. Y, además, hay que defender los artistas españoles, porque, si nosotros no lo hacemos, ¿quién lo hará?

Decido cambiar de estilo, y me voy a la salsa, mi estilo de música preferida. Mi madre me apuntó desde pequeña a clases de bailes latinos, así que me encanta bailar. Y cómo no, cada vez que suena la voz de este gran cantante, me dejo llevar por la magia de su música. Así que, me pierdo con la voz de Marc Anthony.

Como me cambio de piel
Y como vuelvo a nacer
Como le puedo explicar al corazón
Que no hay peligro al creer en este amor

Como se puede romper
El miedo eterno a caer
Como le puedo enseñar a la razón
que equivocarse es humano
y es necesario el dolor

Ven ayúdame a aprender...
como me cambio de piel

Eso!

¡Dios! ¡Cómo me encanta ésta canción! Es tan bonita...

Empieza a sonar el timbre, para de bailar y apago la música del móvil. Al abrir me encuentro con mi amiga Rachel y un chico pelirrojo, de estatura media, delgado y con una sonrisa de oreja a oreja. Me imagino quién será.

- Hola Isa, te presento a Miguel, mi novio. - Exacto. Ha dicho "mi novio". ¿Tan rápido va la cosa?Puede, incluso, que dentro de poco haya boda.

- Hola Isabella, es un placer conocerte. Richie me ha hablado mucho de ti.- ¿Richie? ¿Quién coño es Richie? Osea, cuando comencé a llamarla con el diminutivo de Rach, casi me mata. Pero, ahora, este chico puede llamarla cómo le de la gana a él. Perfecto.

- Así que, tu eres el chico que ha hecho que mi amiga ande por ahí, vez de asistir a clases ¿no?.- Le respondo con cierto nivel de mala leche. Tiene cara de buen chaval, pero, seamos sensatos, lo que han hecho es de críos.

- Pues sí, pero lo siento... no sabía que las cosas iban a salir de esta forma.. - pone cara de arrepentimiento, y mira el suelo. Vale. Me he pasado un poco con el pobre Miguel. Así que, decido ponerme en su lugar, y cambio mi cara de pocos amigos, por la mejor de mis sonrisas. Algo falsa, pero una sonrisa al fin y al cabo.