Aún no estoy segura de que hora exacta fue la cual logré conciliar el sueño, peor si sabia que me había despertado a las dos de la tarde. Me di media vuelta y traté de volver a conciliar el sueño, a pesar de lo tarde que me había despertado, pero tenía mucho sueño.
-Despiértate enana, es tarde.
Tape mi car con una almohada para cubrirme de los rayos de sol que se infiltraban pro la ventana gracias a que mi hermano había abierto la cortina con el fin de molestarme, no me sirvió de mucho cubrirme tras la almohada, ya que segundos después comenzó a hacerme desenfrenadas costillas por el costado de mi torso, provocando una risa que me dejaba sin aire. A pesar de todos los dolores, hoy comenzaba bien mi día, alegre y extrañamente feliz, quizás por el hecho de que no haya ido a la escuela, o porque no me haya topado con mi madre en la mañana.
-¿Todavía te duele el pie?
-No mucho.
Comenzó a reírse apenas retiro las cobijas y vio el manchón de agua que había.
-Ahora no solo te haces en la cama, si no que también lo haces con los pies.- Dijo riéndose.- Hablando de otro tema. Debo salir, Martin vendrá a quedarse contigo.- Inconscientemente festeje en voz baja, me gustaba la idea...- Prohibido hacer cosas indebidas, ¿entendido?
-¿A qué te refieres exactamente con cosas indebidas?
-Ya sabes. Creo que aun no estoy preparado para un sobrinito. Bueno, solo te digo que tengas cuidado, y recuerda que te dejo con e solo por no dejarte sola, porque no me da buena espina, pero no tienes con quien más quedarte. Volveré a eso de las... Nueve y media, por ahí.
Asentí con la cabeza, luego el se acerco y me dio un beso en la frente. "Adiós", dijo desde la "puerta antes de salir".
La tal puerta consistía en un pequeño espacio escondido a los ojos externos a la casa. Mi hogar, para ser más exactos, era algo así como un escondite, bueno, era un escondite. Digamos que desde que la policía busca a mi "madre" por tráfico de drogas, mi vida no ha ido de flor en flor. Pero... Nada se puede hacer supongo.
Mamá salía todo el día y casi toda la noche, lo más normal era que llegara a las tres o cuatro de la mañana y que se fuera antes de las ocho, aún no entendía que era lo que hacia todo el día fuera de la casa, pero de algo estaba segura, era en parte para no vernos a nosotros. Es cierto hay millones de chicas que alegan todo el día porque no le prestan atención sus padres, pero este caso es diferente.
Flashback.
Sentí como mi hermano apretaba mi mano. La verdad tenía miedo, no quería que ella se fuera.
-Tranquila enana, estaremos bien.- Dijo el tratando de sonreír, pero y sabía que estaba igual de asustado que yo.
Sin embargo se trago sus lagrimas, y trato de hacer que pararan las mías, por diversión me llevo en su espalda, y camino así unas diez calles hasta llegar a casa del tío Ernest. Apenas llegamos a la cuadra en la que mi tío vivía; mi hermano me bajo con cuidado de su espalda, y todo mi mano, preocupado de no dejarme sola en ningún momento, de no hacer que me sienta sola, o quizás de que el no se sienta así. Tocamos la puerta, y con una gran sonrisa esperamos ambos a que nos abrieran la puerta. Se escucho un pequeño sonido, como rechinaba la puerta mientras se abría, dejando a la vista un viejo de cuarenta años, con una panza gigante junto a una cara de sueño, parecía que había bebido.
-¿Qué?- Pregunto el.
-Somos _____ y Ethan Wright, somos sus sobrinos. ¿Nos recuerda?, vinimos hace algunos años.
-¡Ah, si si! . La niña llorona y el niño pajarón. Pasen.
Realmente no sé si dijo eso porque estaba pasado de copas, o porque realmente le molestábamos, Ethan hizo una señal, con la mano, como queriéndome decir que no me preocupara. Tomé entre mis manos la pequeña mochila llena de ropa que había traído conmigo y luego avancé tratando de no congelarme con la temperatura que había, dándome paso a una casa inmunda, llena de basura, latas y botellas de cerveza, entre otras muchas cosas tiradas en el suelo mugroso, lleno de manchas negras y pegoteadas, quizás por la innumerable cantidad de veces que se le debió haber caído algún líquido sobre la fría cerámica. Mo hermano paso detrás de mi y cerró la puerta.
-Bueno...- Dijo algo borracho.- Pueden dormir por... ahí, o por donde se sientan mejor. Yo estaré en mi pieza, no molesten. Y comienzan a trabajar mañana.- Dijo cerrando la puerta que posiblemente seria de su cuarto.
Examinando un poco mas la situación, estábamos en la casa de una persona a la que no le importábamos como algo más allá que un estorbo y que nos obligaría a trabajar. Mamá me había hecho trabajar antes, vendiendo pequeños recuerdos en los mall, decía para convencerme que me ayudaría a ser una buena actriz, porque así desarrollaría mi expresión de pobreza, y dejar esa pena en los demás, no me quejaba del todo de aquel trabajo, no era la gran cosa poner una cara triste y esperar a que te dieran moneda solo por tu ternura, o por las lagrimas que caían desde tus ojos, era una manera fácil de pagar la renta.
Comenzamos a tirar las cosas que según nosotros estaban encima del sillón., buscando algún lugar para dormir entre el gran desorden y los malos olores que abundaban en la sala, ¿Cuántas cosas ya se habían podrido aquí?, ¿No sentía el olor que acaso nunca limpiaba tal suciedad?
Ethan se tiro en el sillón, dejándome un hueco para poder dormir con el. Tomo una chaqueta de su "bolso de mano", que vendría siendo algo así como una mezcla entre una bolsa y un saco, y la tiro encima de ambos, tapándonos y cubriéndonos del frío. Lo abracé.
-Tranquila. Estaremos bien.- Dijo sonriéndome.
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-¡No quiero vender palomitas de maíz!- Grite con mi voz chillona.
-¿Crees que importa? Cállate y vuelve a trabajar que estás haciendo todo un escándalo mocosa.
-Discúlpela señor, no sabe lo que dice. Yo puedo ocupar su puesto.- Ofrece piadoso mi hermano, me dan unas inmensas ganas de corre r y abrazarlo, agradeciéndole todas las veces que me ha defendido y que hace cosas por mi, peor en lugar de eso me quedo donde estoy, petrificada. Siento una mano grande que agarrada desde detrás el cuello de mi polera, alzándome del suelo.
-¿Ven a esta muchachita de aquí?- Grita el fuertemente y señalándome, llamando la atención para que todas las personas ahí presentes lo escuchen.- Es una mocosa inútil, no hace nada más que quejarse todo el día.
Siento que vuelo por un momento y segundos después me doy cuenta de que estoy estrellada contra la pared gris. Me duele la cabeza, y admito que extrañamente me mareo un poco. Acerco mi mano hacia el lugar que me duele y descubro que estoy sangrando. Rápidamente mi hermano se acerca a mi y me toma en brazos, sacándome de ahí y llevándome por algo de hielo. Me acurruca entre sus brazos, diciendo su nueva frase más repetida: " Tranquila, todo está bien".
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Bueno, creo que eso es todo por hoy carios, si, realmente es ve fome, pero creo que a medida de que avancé se pondrá mejor, aun falta un poco para la aparición de Zayn, pero espero que sean pacientes. Bueno, pido dos votos para continuar, y no se preocupen, soy paciente ;)

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The reason. (Zayn Malik)
ФанфикTodo lo que pasa, pasa por algo, ¿No?... La razón por la cual aquel chico renuncio a su anterior vida, para mejor tratar de ser "mejor", la razón por la cual lo haz visto tantas veces, la razón por la cual haría todo por ti, y la misma razón por la...