Capitulo 4

1.8K 82 0
                                        

-¡Hola!- Dije alegre al abrazar a Martin

-¿Ha mejorado algo tu pie?

-Si, pero prefiero fingir que me siento mal, así... me dejan quedarme el día en casa y contigo.- Ambos reímos.

-¿Qué tal si cambiamos un poco el panorama?- Dijo haciéndose el misterioso mientras tomaba mi mano y entrelazaba nuestros dedos.

-¿A qué te refieres?

-Salgamos.

-¿A dónde?

-No sé, podemos ir a tomar un helado. ¿Qué te parece?

-Está bien.- Dije sonriendo.

Caminamos por la casa hasta llegar al potro extremo y pasar uno a uno por el agujero que nos llevaría a un terreno baldío. Caminamos de regreso a la calle. Avanzamos alrededor de unas cinco calles cuando el celular de Martin comenzó a sonar desesperadamente, tal como si se tratara de una emergencia. Le dije que contestara ya que el estaba resignado a hacerlo, para ser sincera no me molestaba, o por lo menos no como para que fuera relevante, además.. Era mejor que contestara y así lo dejaban e molestar ¿O no?

"Buenas tardes... Si... No... No, aquí... En la ciudad... Pero.. Me tome el día libre... Pero... Está bien..." Eso fue todo lo que pude escuchar, o sea, las respuestas que el daba, no lograba identificar quien hablaba del otro lado del teléfono debido a las transitadas calles que bordeábamos y a los millos de automovilistas enfurecidos por la mañana con alto tráfico vehicular.

-_____... ¿Podrías acompañarme a solucionar un problema? lo siento, no era mi intención.

-No te preocupes. Pero me debes un helado.

-Está bien, prometo que apenas termine tomaremos un helado, ¿Bien?

Asentí con la cabeza, y esa fue nuestra ultima interacción antes de dirigirnos a su auto y bajarnos calles más allá.

Me sorprendí de lo rápido que la ciudad alegre y colorida paso a ser monótona y deprimente, llena de tonos grises y casas estilo "mediaguas" . Hundiéndonos en un agujero sin fondo de barricadas y peleas callejeras, cuando ya pensé que nada podía ser peor nos estacionamos en la cuadra frente a un  edificio abandonado con  una estructura poco estable... Comparado con eso, mi casa era un lujo, a simple vista el lugar que atemorizaba con sus grises paredes manchadas con rojo en algunas regiones. Al entrar al edificio caminabas casi a ciegas debido a lo lúgubre que era. Sin embargo algo de luz pasaba por las ventanas enrejadas que funcionaban como tragaluz, gracias a la escaza luz podías ver todas las ampolletas rotas en el techo, que por si… No tenían un mejor aspecto que todo lo anteriormente descrito. En fin, el lugar te daba miedo tan solo con verlo.

Caminamos pasando gran cantidad de pasillos siniestros, escuchando el eco de otras conversaciones. Me aferré al brazo de Martin, pensando quizás que era la única salvación de un lugar como ese en caso de un momentáneo apocalipsis como el que mi mente imaginaba en ese segundo en aquel lugar. Bajamos unas cuantas escaleras, llegando a los que posiblemente fuera la planta baja del edificio. Se escucharon otros pasos acercándose a nosotros, y no pude evitar dar un respingo al notar que la sombra de una silueta humana se acercaba cada vez más a nosotros. Mis ojos seguían los pasos que estaban frente a nosotros, Martin estaba calmado, como si no le afectara nada en lo más mínimo. 

-Hola preciosa.- Dijo una voz masculina a mi oído, ocupando lo que seguramente sería un tono de chico seductor.

Salte y para ser sincera casi me muero del susto. No esperaba que alguien apareciera detrás mío casi mágicamente. 

- * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - * - *

Hola :) bueno, he aqui el cuarto capitulo. Dos votos para continuar, y Carla Gabriela, esta vez no me copnvencerás de publicar antes (hehehe). Bueno eso, seré paciente ;)

The reason. (Zayn Malik)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora