The reason. (Zayn Malik)

La despedida de Ethan.

Hola antes de comenzar este cap, aclararé que no es parte directa de la historia de Zayn y rayita .-. Si no mas bien un shoot de la despedida de Ethan con su novia. Comenzaré a ponerle nombre  a los capítulos en vez de los números. Es que me suena muy frío...  Espero que les guste.

Narra Ethan <3

Voltee mi rostro para verla allí, tendida en la cama a mi lado, con una mano sobre mi pecho. Se veía hermosa cuando dormía. Bueno, se veía hermosa siempre... Zöe... Sonreí mientras escuchaba su respiración tranquila y como decía mi nombre entre sueños. Me fijé en el reloj alarma del velador  a mi lado izquierdo, ya eran las 3:45 Debía irme luego. Corrí sus brazos y me desprendí de su abrazo mientras me sentaba en la orilla de la cama, dejándola cómoda entre las escazas y suaves almohadas dispersas en la cama. Abroche mi camisa, luego encajé mis botas. Deje en el velador de la habitación la cadena de plata con una cruz que llevaba colgada al cuello desde niño, dejando mi infancia lejos de mí en esos momentos. Esperando  que Dios no me viese de aquella frágil y detestable manera en aquel entonces. Pasaría a ser otro más de los tantos que se queman en el infierno, y desde hoy acudiría a esa promesa, dejaría mis principios de lado y me enfocaría en proteger o que quiero.. A quienes quiero…

Me mire por última vez en el espejo, esperando defraudarme de lo que vería, no fue todo así.

Sentí como sus delgados brazos me enroscaban por el torso. Impidiéndome moverme. Hundió su cara en mi espalda mientras comenzaba a llorar nuevamente. Cerré los ojos. No quería pasar por esto. Me di vuelta y la abracé, protegiéndola entre mis brazos, y brindándole calor, tratando de sentir los sentimientos de temor que su piel casi congelada desprendía.

-Llévame contigo, haré todo lo que me pidas. Te ayudaré en todo lo que pueda. Te lo suplico.

-No puedo.- Respondí impotente.

Sentir aún sus húmedas lágrimas en contacto con mis hombros, no ayudaba de  mucho en ese momento. Menos cuando ella me repetía una y otra vez que me quedara a su lado. Y si hubiera tenido la opción lo hubiera hecho. Pero no podía permitirme ser lo suficientemente egoísta para quedarme a su lado y dañarla a ella, a _____, a Zayn e incluso a mí.

-Ethan... Por favor… Piensa en mí. No me dejes. No puedes dejarme luego de todo lo que hemos pasado juntos. Por favor, quédate conmigo.- Decía la pelirroja mientras lloraba.

Pase mi mano por su espalda frágil y desnuda, una y otra vez, esperando que el tiempo se congelara en aquella traite y vacía escena de despedida... Y diciéndole una y otra vez que estaría bien, más que nada convenciéndola porque ambos sabíamos que quizás no sería así, y que las posibilidades de no volver eran realmente y aún menos la de tener un final de cuento feliz tal como el que ella siempre quiso, y como yo ya me estaba convenciendo... Por eso lloraba

 Debía dejar toda aquella cursilería del amor de lado en ese momento y mostrarme fuerte, debía saber y mentalizarme que era fuerte. Yo sabía que lo era, solo debía mostrármelo, ¿Que mejor ocasión que esta?... Podría dejar  de lado mi lado emocional como tantas veces lo había hecho antes con todo, ____, mi madre, Ernest… Podía ser fuerte si me lo proponía, tal  como la había hecho millones de veces antes, tan solo debía seguir con la misma línea de mis pensamientos, fríos y escasos en busca de una alternativa trascendente y equitativa para mí, dejando detrás todo aquello que me importaba solo para lograr seguir.  

Gracias a nuestro romance “secreto” ella no estaría en peligro. Nadie sabía lo nuestro. Nadie excepto ella y yo. Y eso había sido suficiente por más de un año para ser felices. No podía prolongar el tiempo y menos ahora, puesto que eso significaría ponerla en peligro. Debía alejarme de ella rápido para que nada le ocurriera, y que nadie sospechara de ella. Si me iba y no regresaba podía conseguir que estuviera  salvo.

Minutos después de pasar mis manos grotescas por su delicada y suave piel, sentí como paulatinamente se atascaban sus lágrimas a tal punto  que cesó su llanto y sus palabras bonitas, dejando un rastro húmedo en sus mejillas y en mi cuello y hombro izquierdo. Levanté su rostro para quedarme estático en sus profundas lagunas verdes. Ella me miró de igual manera y dejamos que el tiempo pasaba mientras tan solo nos veíamos a los ojos mutuamente. Me acerqué y la abracé una vez más.

-Por favor… Ethan quédate conmigo.- Dijo despacio, pero dejando de llorar.

-Mi amor, no puedo. Simplemente no puedo hacer eso.

-Siempre puedes hacer algo si quieres, Ethan. Tú me enseñaste eso. Llevas meses dándome la esperanza para hacer todas esas cosas que nunca pude, y lo he logrado gracias a ti… Yo… ¡Yo no soportaría que te alejaras Ethan!... Prefiero morir antes que eso. No puedes simplemente dejarme, ¡Dijiste que me amabas! Y yo te creí… El problema fue que te creí. Como estúpida. Creí todo lo que me decías, esperé cada beso que me dabas y guardé cada “te amo”. Si solo quisiste irte y dejarme desde un principio… Podrías no haberme hecho pasar por esto.

-Te amo, Zöe.

-No me mientas, ya no más... Tan solo, solo vete ¿quieres?- Dijo con los ojos llorosos. Mordiéndose los labios para no ceder.

La miré con pena, y estaba dispuesto irme, no insistiría más, tal vez sería mejor que ella terminara odiándome. Si esa era su manera de evitar el dolor, es mejor. Besé su frente y ella no se rehusó a eso. Me seguiría queriendo y entendía que la quería de verdad tan solo se engañaba sola.

-Te amo.- Dije.

 La deje dormir, sabiendo lo cansada que estaba, admirando cada una de sus perfectas y finas facciones...

 Zöe, quizás seas lo que más extrañe del estar vivo, el amor.