Capitulo 48

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Después de pasar llorando alrededor de media hora, empecé a contarle a mi amiga la conversación que había tenido con Logan. Ella pasó toda la conversación cogiéndome de la mano, a veces, cuando veía que iba a empezar a llorar, me apretaba un poco para hacerme saber que estaba allí, y yo solo podía agradecérselo siguiendo con la historia y no echándome a llorar.

Cuando terminé me sentí más relajada, sabía que no iba a solucionar nada con contárselo a Teresa, pero sabía que ella iba a estar siempre ahí en los malos momentos, como aquel, por ejemplo.

Nos levantamos de la cama y fuimos al salón decididas a comer algo, cuando apoyé el pie una punzada recorrió mi cuerpo, así que intenté apoyar mi peso en el otro pie, por suerte el dolor se fue apagando mediante andaba.

Me senté en el sofá mientras Teresa traía diferentes cosas de la cocina, trajo helado, algo de chocolate y dos tazas que seguramente tendrían chocolate caliente. Creo que no he mencionado que mi amiga tiene un problema grave con el chocolate, come un montón de chocolate al día, pero igualmente no engordaba, la envidiaba por ello.

Cogí la taza y di un sorbo, efectivamente chocolate, mi amiga cogió el helado y me dio una cuchara, preferí no mencionar la rara combinación de helado y chocolate caliente, y acepté la cuchara.

- ¿Quieres ver algo? – intervino Teresa cogiendo el mando de la televisión.

Asentí aún bebiendo de mi taza de chocolate, encendió la tele y empezó a pasar por los canales.

- No creo que haya nada interesante a esta hora – comentó.

- Quizás hay alguna película.

- Las pelis deben estar terminando ya.

- Con más razón, pronto empezaran otras pelis.

Teresa se encogió de hombros y siguió pasando, esta vez por los canales de películas. Cogí el helado y la cuchara, y cuando me disponía a probarlo, una voz conocida hizo que me sobresaltara, mi mirada se clavó en la televisión, seguramente ayer me habría alegrado de verlo, pero hoy, lo único que quería era empezar a llorar de nuevo.

Reconocí esa película al instante, Percy Jackson y el ladrón del rayo, seguramente debí temerme que estuviera echando esa película, ya que la segunda parte estaba en el cine. Hacía tres años de esa película, pero Logan seguía siendo el mismo, sus ojos estaban igual de bonitos y su cara seguía igual de hermosa, incluso podría decir que ahora estaba mejor, en esos tiempos era un adolescente, y ahora... de repente el canal cambió, haciendo que me olvidara de lo que había estado pensando.

- Lo siento – murmuró Teresa, sentí su mirada en mí, pero yo seguía centrada en la televisión, donde ahora solo había anuncios.

- No pasa nada – dije finalmente apartando mi vista de la televisión, solo para mirar al helado.

Teresa apagó la tele y soltó el mando en la mesa, la miré extrañada.

- ¿Por qué no vamos a dar una vuelta?

- No tengo ganas.

- ¿Te vas a quedar aquí todo el día?

- Estoy comiendo – contesté como si fuera algo obvio.

Teresa me cogió del brazo y me levanté a duras penas, dejé el helado sobre la mesa y fuimos hacia el cuarto baño, me pegué un susto al verme en el espejo, estaba irreconocible, tenía el pelo totalmente despeinado, mis ojos estaban rojos y mis pestañas y mejillas mojadas, estaba horrorosa.

- Está bien, vamos a dar una vuelta, pero al menos deja que me dé una ducha primero.

Mi amiga asintió y salió del baño con una sonrisa de ganadora, cerrando la puerta tras ella, Teresa podía ser irritable cuando quería.

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Capítulo corto, lo sé. Quería daros las gracias por los comentarios del capítulo anterior y los privados de estos últimos días, no sabéis la felicidad que se siente cuando ves 54 notificaciones de wattpad por la mañana.

Gracias por leerme.


Un famoso y yo (Logan Lerman & tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora