Capítulo 24:
Escape
La reunión de las cortes no sirvió para lo que realmente esperaba.
Tengo una bruja que debería estar muerta pero no precisamente, y nadie tiene idea de cómo detenerla. Ninguno busco en su momento conocer el pasado de aquellas dos que forraron la hermandad. Lo único que sé es que Maritza se encuentra conectada a la puerta de cristal en la corte oscura, que dejo un diario y que este llego a manos de Arcadia, y también las de Gerald.
Si quiero encontrar respuesta debo encontrar a mi padre. Ir a esa frontera peligrosa a la que nadie quiere acercarse.
Después de que la reunión terminara, cada uno se dispersó por su lado en el gran zarzal. Solo quedamos la reina de hielo y yo, en el gran salón. La abuela de mis hermanos, una mujer que se ha equivocado en la vida, y sus errores acarrearon con la vida de su hijo.
—¿Cuál es su nombre? —pregunto.
—¿Cómo? —pregunta desorientada.
Supongo que esperaba que la recriminara por todo, pero ahora mi mente no está para culpar a una mujer que con cada respiro la vida se le escapa. Solo puedo pensar, en cómo voy a seguir ahora, sigo sin tener nada, el tiempo se agota, mis hermanos están en manos de una loca, y Shema, mi mejor amigo fue secuestrado por mi eterna enemiga Yira, la pequeña niña que comenzó todas mis desgracias.
—Quiero saber su nombre —digo—. Me he dado cuenta de que no tengo idea de cómo demonios se llama.
—Mi nombre es Gina.
—Un gusto Gina, ahora ¿tiene alguna idea de cómo detener a esa loca que intenta apoderarse de Encantus? —intento nuevamente, quizás ahora que estamos sola sin toda la presión de las demás cortes, recuerde algo que realmente sea útil.
—Lo que sé sobre Maritza no creo que pueda ayudarte a detenerla. Ella se desprendió de su cuerpo ante la posibilidad de la muerte. Pero está anclada a una cueva en el mundo humano, y Agadria. Lo que se hizo en el pasado sí la libero, pero no se logró el objetivo principal—explica sin ningún inconveniente.
—¿Lo que es? —expreso.
—Liberar a Maritza. No me preguntes cómo. No lo sé. De lo que sí estoy segura es que la traerán de regreso. Ella es el verdadero peligro para Encantus —confiesa con la voz cansada. La veo como si se estuviera desgastando con cada respiro.
No tienes más que decir sobre el tema. Lo veo en sus ojos.
—¿Qué te está pasando?
Gina no trasmite ese frío invernal que hace algunos meses, es como si su cuerpo se estuviera descongelando, dejando atrás su fuerza vital.
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Encantus. Alas de fuego (libro 3)
FantasyDiseño de portada por @AleanellF Mafer ha vuelto al mundo mortal, pero ya no es la misma chica que se fue en busca de su hermano; ahora, es un hada de fuego, parte de un mundo que jamas existió, y al mismo no pertenece a el. sigue siendo un renegado...