El sueño se acabó, sí que triste, ahora que todo está mejor, debo buscar más respuestas, aun es extraño y nuevo aceptar todo esto, Jeroen, está encerrado en un sueño o él es ficticio, el sueño es mío, de hazazel o de Jeroen, no sé qué sucede, aun no lo sé, pero debo resolverlo, antes de que algo malo suceda. Estoy en un nuevo conflicto lo sé, pero debo darme fuerzas, debo ser mejor.
Hoy es un día frio, de los primero de enero, la casa de mi abuela es acogedora, en estos días de año nuevo, Leslie nos ha dado vacaciones, esto está bien, porque ahora debo, empeñarme en mi y ver qué es lo que voy a hacer de mi vida, ahora más que nunca debo cambiar, debo resistir lo que este por venir.
Me doy un baño rápido, y me dirijo hacia la sala, donde se encuentra mi familia, es extraño, me parece que vivo en dos mundos, o bien tres, la realidad, el sueño acogedor y las pesadillas, cuanto a las pesadillas, porque ya han formado una gran parte de mi vida. Si así es, aunque siempre tenga sueños malos, no logro acostumbrarme a ellos, siempre son más feos, más fuertes, más malos. Ahora me dejare de otras dimensiones y me ocupare de vivir una vida normal, me pregunto si mi abuela sabrá algo de los sueños además cuando sucedió la guerra ella era una niña. Quisiera saber si acaso ella sabe algo. Creo que ya sé de dónde sacare más información.
Pero debo pensármela bien cómo voy a hacer para preguntarle a mi abuela que es lo que sucedió. Ella mejor que nadie debe saber qué es lo que sucedió.
En cuando llego hasta la sala, no hay nadie así que adivino que deben estar en la cocina o algo parecido. En cuando llego el lugar está lleno de personas, mis tíos tías, primos mi abuela. Están casi todos.
-Buenos días, saludo al llegar, todo me reciben con un buenos días, es lindo estar así.- Y bien que hay para desayunar, pregunto emocionada. -Claro es más que obvio que amo la comida.
-Querida, que bueno que estas aquí.- dice mi abuela sonriendo. –El desayuno está listo, deber venir a servirte, hay todo un manjar.
-Claro que sí, gracias.-Me senté al lado de mi prima Samanta, hija de mi tía Carolina. En cuanto todos se sentaron comenzó el desayuno .Fue todo una delicia, mas porque lo preparo mi tío Carlos. Espere a que todos terminaran de desayunar y se fueran de ahí, entonces cuando me quede a solas con mi abuela me decidí a preguntar de la manera más sutil.
-Abuela. Dije con la voz un poco entrecortada.
-Dime cariño. –su dulce voz es casi música
-¿Puedo preguntarle algo?
- Claro, dime
-¿Cómo fue cuando se casó?. -estoy un poco nerviosa, no sé si la abuela quiera contestarme o sospeche algo.
-Bueno, fue muy bonito, un poco difícil.
-¿Porque?
-Bueno, yo era muy joven, y las condiciones en las que vivía, no me eran de mucha ayuda.
-Abuela, ¿podría contarme más?
-¿Por qué quieres saber?, ¿por qué ahora tu curiosidad?
-Bueno, usted sabe, debemos saber la historia de la familia. Vamos abue cuéntame, si, por favor. –ahora sueno más convincente, espero me diga algo que me sirva.
-¿Qué es lo que quieres saber?
-Todo, sé que para usted no ha sido fácil, pero me gustaría saber, ¿Cuál fue su historia con el abuelo?
-Está bien. Solo porque te adoro, dijo pellizcándome una mejilla. –Haber cómo puedo empezar.
-Tal vez desde lo que más recuerde.
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En donde ellos no están
FantasíaLos sueños, el lado obscuro de la conciencia, esos seres en el abismo del alma, la más clara expresión de los miedo. Verraco Spin... En donde ellos no están, puede que te haga imaginar que se trata de algo mas de la vida cotidiana, pero en est...