De nuevo Lunes, odio los lunes...ya lo dije? Bueno lo digo de nuevo , lo odio.
Hoy mamà me alcanzo hasta la escuela diciendo que Julian era muy lindo , que era una pena que no hablara , sino seria perfecto, ella y su necesidad de querer que este de novia.
Hoy tenia pensado llegar e ir a la oficina del Director, y explicarle lo que paso el sábado, y que yo quiero volver a ser la tutoría de Julián Serrano.
Mi primer materia del día es Literatura, una de mis preferidas.
- Sabatini, podrías leer la pagina 22.
Me paro , y comienzo a leer en voz alta el texto de la pagina indicada, me pregunto si Julián lee ,a mi me encanta leer , seria bueno poder pasarle algunos libros de mi biblioteca, sacudo mi cabeza , no podía vivir pensando en él.
El ultimo modulo fue muy aburrido, tenia matemática, odio los números.
Salí un momento del aula para tomar aire, obvio mentí a la profesora Rodríguez diciendo que iba al baño, en eso veo a Mateo en el pasillo.
Mateo me tomo fuerte del brazo-el iba rodeado de sus amigos-¡Sabatini, vos y tu retrasado van a pagar por esto, el sábado me hiciste pasar vergüenza, y eso no me gusta!-termino diciendo esto y me soltó bruscamente.
Tenia miedo, no voy a mentir, pero me hice la superada y seguí caminando. Realmente hace del sábado que no veía Julián, me pregunto a donde estará, se que tiene que venir a la escuela, pero bueno...en el pueblo hay solo dos escuelas, y esta es a la que la gente mas concluye por ende hay demasiados grados y niveles , medio difícil encontrarlo.
Seguramente si le pregunto al Director el podria decirme.
-Sabatini, realmente no entiendo el por que de tu insistencia con el joven Serrano.
-Solamente quiero saber en que salón esta, quiero llevarle unas cosas que se olvido el sábado-mintiéndole, al fin y al cabo solo quería saber eso-
-Esta en el curso C , pero como hoy tuvo unos problemas en la clase de Ingles , esta con la pedagoga de la escuela.
Mierda, tantos años en esta maldita escuela y jamás supe que teníamos una pedagoga. En fin, camino hacia la sala que me indico el Director toco la puerta y me dejan pasar , Julián esta sentado de espaldas , la Doctora me mira y me habla.
-Disculpa –dijo bajándose los lentes-¿En que puedo ayudarte?
-Necesito hablar con Julián Serrano.
Julián, mi Julián...da vuelta y me deja al descubierto su cara, esta llorando. Sentí como el corazón se me estruje, ¿Por qué esta llorando? Me quedo estática y la Pedagoga niega -No puede salir jovencita, perdón.
Él se para rápidamente, mira a la señora, toma de mi brazo y me saca de ahí.
-¿Qué pasa Julián? –en este momento no puedo ver mi cara, pero de seguro mi preocupación y miedo me delatan.
Como de costumbre el no me habla, sus ojos están rojos de tanto llorar, el solo me mira y me abraza, no dude y lo rodeo con mis brazos, el oculta su cabeza en mi cuello.
-Julián realmente me estas preocupando.
El suelta un suspiro, por Dios no quiero desesperarme pero no puedo.
-¿Juli?-digo separándome de su abrazo, lo miro y limpio sus lágrimas con la yema de mi dedo índice.- Por favor, háblame, sabes que podes confiar en mí.
El vuelve a negar.
-No voy a poder ayudarte sino me cuentas, por favor.
El agarra mi mano y con su dedo deletrea una palabra en mi mano: S-O-L-O
Niego-con mucha tristeza-No, Julián, yo estoy para vos-lo abrace transmitiéndole, todo lo que lo quería.
