Capítulo 14

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Disclaimer: Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, yo solo me adjudico la historia, prohibida su publicación en otros sitios sin mi consentimiento.


—Edward deja de moverte—reí apartando mi cara, estaba sentada en su regazo tratando de rasurarlo —vas a ocasionar que te corte la cara —volvió acercarse a mis labios— ¡Basta, deja de besarme! — reí, mientras me volvió a apartar él, era imposible rasurarlo así que deje los utensilios que estaba usando en el lavabo.

—Lo siento nena, estoy muy feliz de que estés aquí —me abrazo y recargo su cabeza en la curvatura de mi hombro. Se separo de mí y me dio un casto beso en los labios

— ¿Qué hora es? —pregunte, habíamos pasado toda la tarde en su departamento y la mayor parte del tiempo lo pasamos en su habitación.

—mmh...no lo sé, temprano—Edward empezó a dejar besos por mi barbilla hasta alcanzar mis labios.

—Es todo menos temprano, está oscuro afuera —dije semi volteando a la pequeña ventana del baño mientras seguía besando a Edward.

— ¿No puedes quedarte, cierto?

—Papá me espera, hoy tuvo que ir a trabajar así que espero tener tiempo de hacerle la cena.

—No te vayas, aun no hemos platicado de tu viaje—Edward empezó a bajar su mano hacia la curva donde terminaba mi espalda.

—Lo menos que vamos a hacer es conversar —me pare de su regazo —nos vemos Edward-media- barba — Me di la media vuelta dispuesta a salir del baño cuando sentí que mis pies no tocaban el suelo y me vi en el hombro de Edward.

—Edward, no seas un cavernícola—dije entre risas, Edward me tumbo en la cama y se puso sobre mí —De verdad, me tengo que ir —Lo bese dulcemente y acaricie su cara.

—Me parece tan irreal que estés aquí—Edward delineo mi cara y yo cerré mis ojos, sentí sus largos dedos pasar por mis parpados, por mi frente apartándome el flequillo, por mis mejillas, por mi nariz y por mis labios —Te amo, gracias por esta sorpresa. Yo...yo no te merezco amor —Edward se separo de mi y se sentó en la cama.

Extrañe su cercanía y me senté sobre mis rodillas en la cama acercándome a él y abrazándolo por detrás.

—Hey no digas eso—Lo bese en su mejilla —ambos nos merecemos por eso estamos juntos, aquí —Mire a nuestro alrededor —y aquí—toque su corazón.

—Te amo, no sabes cuánto te extrañe, sentí que moría cada día sin poder verte y tocarte —Edward me tomo por los hombros, su mirada se encontraba ida —No dormía, no comía, me quedaba días enteros encerrado mirando tu fotografía...y ahora estas aquí—me tomo por las mejillas—No me vuelvas a dejar o me quedare loco —lo mire a los ojos y algo en ellos me hizo hacerle creer sus palabras.

—No digas esas cosas—aunque preocupada aun por sus palabras le sonreí para tranquilizarlo, el solo seguía mirándome fijamente como si fuera un espejismo —Vamos —me pare de la cama y extendí mi mano —tengo que quitarte esa media barba antes de irme con mi padre —Edward suspiro, tomo mi mano y volvimos a el lugar donde estábamos antes.

.

.

—Gracias por traerme a casa —le dije a Edward en la puerta, Charlie estaba cerca de nosotros "ignorándonos" mientras miraba la televisión.

—Mañana nos podemos ver ¿cierto?

—Claro —entrelace mis dedos con los suyos.

—Pasare por ti a las 8:00 de la mañana.

Amor y CelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora