The Chosen Ones II : Darkness

Capitulo 8

Era lunes. Arakiel se había ausentado debido a una tarea que le pidió Lucifer, su Maestro. Me habia mandado un mensaje esta mañana.

Cuidate, chica escalofriante.

Había sido un día muy tranquilo hasta el regreso del receso. Había tomado mis clases de manera calmada y todo al inicio de la mañana. Ya nos empezaban a decir cuando empezarían los exámenes parciales. Dentro de la mitad de la siguiente semana y la próxima se celebrarían dichos exámenes. No tenía problema con alguno. Física no se como pero siempre en mi vida lo había pasado sin estudiar, Matemáticas 3 me preocupaba un poco pero no era algo que temía, Historia me la sabía sin mirar el libro, Biología era mi materia favorita así que no había problema, Literatura también estaba sencillo. Cultura Física no tenía exámenes aso que no había que preocuparse.

Fue entonces que la campana sonó y me dirigi a la cafetería. Alice estaba junto a un chico del curso que había visto en algunas ocasiones dentro del curso de Literatura. Alexander Pettyfer se llamaba. Si me dijeran que describiera al chico con una sola palabra diría que era tierno. Mejillas redondas y mirada bondadosa. Cabello oscuro despeinado. Sonrisa amable.

Terese se hallaba platicando amistosamente junto con ellos y otras chicas que nunca había visto. Sin Arakiel, el receso se me hizo eterno.

Las clases siguientes pasaron igual de tediosas. Trataba de escribir algunas notas pero mi cabeza no daba para ello. Entregue unos trabajos que ya había terminado a distintos profesores para ya no preocuparme por lo puntos de la diaria. Todo marchaba demasiado humano como para bajar la guardia.

Cultura física era la última de mis clases y tocaba cómo práctica por lo que corri a los vestidores a cambiarme con un viejo y andrajoso short negro y una blusa sin mangas lycra color rojo. Tocaba ver soccer.

Era un deporte con el que me había familiarizado mucho. Mi padre había sido un fanático de aquel deporte del balompié. Me acuerdo que el me había enseñado a jugar cuándo era chica. Antes de que... De que aquello pasara logre ser una muy buena portera— posición donde se cuida la portería del asecho del gol.

Sin dudarlo en algún momento me puse en dicha posición, tomando los guantes que me tendía el entrenador. Cómo habría de imaginarlo, Jen escogió la posición de delantera. Resople con una sonrisita... Ella no sabía que tan buena jugadora era. Y ya sabía que sus inútiles intentos de hacerme quedar mal se disiparían al momento en que le parara los vagos intentos de goles que ella tiraba.

Y estaba en lo cierto. Al parecer, ella no tenía habilidad alguna sobre sus piernas que siempre dejaban pasar el balón por centímetros. Tuvo muchos intentos de gol pero yo cubría la portería con una destreza que nunca hubiese imaginado ya que aunque tenia dicha habilidad, los reflejos de inmortal también ayudaron mucho.

Terminamos el encuentro con 3-0. Alice había hecho una increíble recepción a gol y Therese me había cubierto muy bien.

Celebramos dicho resultado y luego me encaminé sola hacía el vestidor donde ya la mayoría de las chicas se había ido. Para desgracia mía, Jen me estaba esperando.

"Vaya habilidad te dio tu difunto padre, parasito"

Ignoré dicho comentario y tome mis cosas y me encerré en un cubículo para cambiarme a gusto.

Saliendo me agarró de la coleta. No me dolía pero me quedé tensa por la sorpresa.

"A mi nadie me deja hablando, parasito..." Dijo susurrando a mi oído. "Stromo" dijo sacando su varita mientras me hacía caer al piso. "Dolora" dijo y me empece a retorcer de dolor en el suelo. Era un dolor en mi mente muy intenso como si las brasas del mismísimo infierno atravesaran los poros de mi piel. Soltó una carcajada.