_____10 Años antes____
-Santiago despierta, no te mueras-Le dije antes de dejar salir una lagrima de mis ojos.
Una suave y cálida mano acariciaba mí mejilla y pude ver la hermosa sonrisa del niño castaño que me miraba con un ojo entreabierto.
-Estoy bien, tranquila, yo soy fuerte- me susurró con dificultad tratando de levantarse
-Pero ese balón te pegó muy fuerte en tú abdomen- le dije limpiando una lagrima que corría por mí mejilla
Este me volvió a dejar una de sus más bellas sonrisas
-Tranquila-Ahí me abrazó con dificultad- yo soy fuerte, solo piensa que esto es una broma- hizo una pausa y se recostó aun mas a mí hombro enlazando sus brazos a mí espalda- siempre preferiré que me golpeen a mi que a ti, no quiero que te hagan daño-Me susurró con dificultad
____Actual____
Los quince grados de la sala de espera era lo único que sentía, escuchaba voces pero en realidad no entendía nada, solo esperaba escuchar el nombre de Santiago para salir de mí tormentoso trance mis ojos empezaban a arder perplejos esperando a algún doctor o enfermera. Angela y Lucas querían consolarme pero ambos sabían que en mi situación temporalmente nada me importaba, mis dedos empezaban a teñirse de un color morado, las 4 horas en la sala de espera empezaban a dejar marcas. Lucas me había dicho que unos ebrios habían impactado el auto de Santiago, y por lo tarde que era, el se había venido atrás con su auto, luego de eso trajo a Santiago lo más rápido que pudo y por eso me llamo en cuanto llegó, fue lo único que entendí
-Familiares de Santiago Crouse- anunció por fin una voz femenina
-Soy su esposa, ¿Como está?- pregunté preocupada.- Soy su hermano- Complementó Lucas
-El señor se está recuperando rápidamente- Respondió- Tiene algunas fracturas y un golpe en la cabeza, pero todo está controlado
Solté un suspiro, es como si un peso se me quitara de encima -¿Puedo verlo? - pregunté con un nudo en mí garganta
La enferma asintió con la cabeza y me mostró el camino hasta la habitación donde estaba Santiago. Un chico me dijo que me cambiara y me pusiera un gorro y una bata encima muy parecido al de la enfermera. Al llegar sentí temor antes de poder ver a Santiago, verlo tan desgastado y débil me hacia estremecer
-El estará bien- Me dijo la enfermera al percibir mí intranquilidad- Ahora este paso lo debes de dar sola, tu puedes- La enfermera se había ido dejándome sola frente a la fría entrada, mí mano temblorosa se dejó llevar y al soltar un suspiro giré la perilla y ahí estaba, Santiago. el suero que estaba inyectado en su mano fue lo primero que vi, me acerqué aún mas y puse una silla a su lado, vi su mano en donde también estaba el pulsioximetro oía de manera concentrada sus latidos del corazón gracias al electrocardiograma y eso me hizo pensar que siempre preferiré escucharlos recostada a su pecho.
Acaricié con suavidad su mejilla y no pude evitar llorar
-Despierta mí amor- le dije con una sonrisa triste- Ven y dame una de tus hermosas sonrisas de "No te preocupes"- Mí voz se ponía más aguda y poco a poco se formaba un nudo en mí garganta- Ven y dime que estarás bien- me desplomé en llanto y recosté mí cabeza en la cama, justo al lado de su brazo- ¿Esto es solo una broma, verdad? y cuando yo vuelva tu te lanzaras a mis brazos y dormirás en ellos- limpiaba mis lagrimas y tomé su mano- Mí amor, aquí estoy yo, para ayudarte,- Con mi otra mano apretaba el collar donde estaba mi anillo- Te necesito mí rey
-No te dejaré sola Lucía- escuché difícilmente en un susurro, cuando lo vi, me regalaba una sonrisa difícilmente formada, pero igual de bella que todas
Me estremecí totalmente y un calor recorrió mí cuerpo al sentir su mano moverse entre la mía. Sentí que el alma me volvía al cuerpo; me acerqué con cuidado a sus labios y le susurré:
-Tú eres más fuerte que todo esto mí amor- cuando bese con suavidad y delicadeza sus labios este se iba quedando nuevamente dormido me separé y le di una ultima mirada. Le sonreí tristemente y me fui acompañada por la enfermera que ya me había dado la seña de que el tiempo se había acabado.
-Descansa mí lobo- Y ahí cerré la puerta y volví a la sala de espera.
Cuando me senté casi al instante entró una llamada de un número desconocido.
-¿Diga?-Pregunté intrigada
-Buenas señorita habla del laboratorio, ya tenemos listos los exámenes ¿A que dirección se los mandamos?
-No estoy ahora disponible para recibirlos, ¿podría decirlos por acá por favor?- Le dije nerviosa
Duré un momento esperando mientras la enfermera buscaba mi examen- Bueno señorita su resultado fue negativo, no está embarazada
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Enamorados y enredados
Romance-¿Podremos sobrepasar obstáculos?- Le pregunté con lagrimas en mis ojos -Solo si así lo quieres