C. 12: Feliz.

688 29 35
                                    

Bajé más que contento, ella me había besado... Y, Dios. Fue excelente, moría por quedarme con ella, para seguir besándola, había olvidado el sabor de sus labios, suaves, y delicados.

Me subí al auto y Gómez me miró riendo.

-¿Tú de que te ríes romano extraño?.- Si, Gómez era romano, y hablaba todos los idiomas que puedan imaginar.

-Nada jefe... Solo pensé que se iba a quedar con la chica.-Murmuró y arrancó el auto.

-Otro día, hoy no era el día.-Le dije riendo y él entendió todo.-

|...|

*10:21am*

(Violetta)

Estaba caminando por la oficina, entregándole unos papeles a Estefania, para que se los diera a Diego, la verdad estaba avergonzada por besarlo, y no quería verlo.

Caminé de vuelta a el estudio, pero Axel se puso en mi camino, sonriendo.

-Hola Violetta.-Saludó con una sonrisa, estupida... Yo de verdad no quería toparme con nadie, solo quería grabar e irme de inmediato, gracias a Dios me iba al medio día...

-Hola.-Saludé tratando de caminar de vuelta, pero me frenó...-¿Qué pasa Axel?...

-Es que... Quería saber si...-Intentó decir pero la voz ronca de Diego se escuchó al fondo nuestro.

-¡Violetta!.-Gritó y me giré a verlo.-Necesito que hablemos en privado... Ven a mi oficina.-Dijo y entró de vuelta, miré a Axel y me hizo señas que estaba bien. Caminé a la oficina de Diego, y al entrar él estaba parado esperandome. En serio que era extraño aveces, podría jurar que solo me llamaba para joderle la vida a Axel.

-¿Qué pasa, Diego?.-Pregunté acercándome un poco, él se giró a verme serio. Y terminó de acercarse a mí.

-Necesito que me expliques...- Habló con la voz sumamente ronca, sentí su aliento chocar con mis labios, y me di cuenta que me miraba justo ahí.

-¿Qué cosa?.-Susurré, me estaba poniendo nerviosa, quería correr, pero las piernas no me daban... O simplemente, no quería irme.

-¿Por qué no me has dado mi beso, de buenos días?.-Tardé en entender eso, para luego echarme a reír.

-¿Podrías dejar de flashear, loco?.-Dije separándome de él, al fin me daban las piernas...-Solo te besé anoche, para... Agradecerte.-Murmuré incomoda. Lo miré, pensado en que idiota que soy... Besarlo había sido algo estupido... Yo soy una idiota por besarlo.

-Quiero ser lindo contigo, y tú... Me tratas mal..... Genial.-Murmuró y me reí de vuelta, era muy cínico .

-Deja de ser un nene, por favor... Sos grande Diego.-Le dije riendo, y me miró feo, cosa que obvio me causó gracia.

-No soy un "nene"...-Hizo comillas con los dedos, y me reí un poco.-Solo reclamo mi derecho, como novio.-Dijo mirandome con picardía, y desvíe mi mirada, nerviosa.... ¿Qué le pasa?

-¿Y quién  es tu novia?...¿Ludmila?.-Pregunté haciéndome la desentendida.

El se rió un poco, y volvió a estar muy cerca de mí.

-Tú, cariño...-Susurró e intento besarme. Yo lo alejé riendo, y él me miró raro.

-Yo no acepté ser tu novia en ningún momento... De hecho, jamás me pediste eso... Recuerdo todo.-Murmuré riendo y el miró con cara de perrito arrepentido, callado.

-Tienes razón... No te pedí ser mi novia... Por que, ibas a negarte... Tu me odias.-Murmuró serio, y sacó su cigarro... Genial, volvió el Diego idiota.

Hypnotic, DielettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora