Capitulo 5.

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Me quedé ahí tirada un rato mas, que aunque a mi me parecieron horas, debió de pasar solo una media hora.

Dejé de oír los pasos de mi secuestrador por la habitación de al lado. Me quité la manta de encima y fui al baño a ver mi ropa, el pantalón ya parecía estar algo mas limpio y la blusa se le habían quitado algunas manchas. La dejé secarse un poco mas y cierré de nuevo la puerta del baño.

Abrí el grifo de la bañera y el agua salió helada. "Perfecto" pensé.

Me quité las dos prendas que me quedaban y me metí prácticamente aguantando la respiración.

El agua fría me tensó aun mas los músculos y mis lágrimas se mezclaron con ella.

"¿Que hará conmigo?" repetía mi cabeza una y otra vez y el llanto seguía.

Salí y miré al rededor en busca de una toalla, no había.

-Joder - susurre yendo a por una de las mantas. Cogí la mas fina y que menos pareciera una manta y me la llevé al baño, me sequé rápido y me puso la ropa interior sin mirar, seguidamente me enfundé los vaqueros y luego la blusa que aun seguía un poco mojada. 

-¡No voy a matarla! - escuché que gritaba alguien detrás de la puerta y el corazón se me aceleró al instante.

Intenté abrir la puerta sin hacer ruido a penas, pero estaba cerrada, ¿que esperaba?¿la puerta abierta? Pegué la oreja a la puerta sin apoyarme.

-¡Tienes que hacer joder! Sácale todo lo que necesitamos, ¡y mátala! - volvió a gritar una segunda persona.

-Que yo sepa, tu ya no mandas, ¡puedo hacer lo que me de la puta gana!

-Yo no mando, pero Jack si, y si no ma matas tu lo hará el.

-No va a morir. - oíque dice entre dientes.

-¿Porque estas tan seguro de eso?

-Yo me encargare de eso, Marcos. - un silencio se hizo entre los dos y me puse de los nervios.

-Hazlo tu, o te juro que lo haré yo mismo, pero primero me la follaré, eso te lo aseguro, Jesus Oviedo- hizo algún movimiento que no vi pero si distinguí una carcajada ahogada.

-Como yo me folle a tu hermana. 

Oigo un impacto de piel con piel y luego otro contra la madera. Me resbalo y caigo contra la puerta haciendo un ruido no muy fuerte, pero que si rompió el silencio entre los dos, retrocedí rápidamente.

Luego se abrió la puerta rápidamente y el rubio que vi el otro dia en la habitación con las demás chicas avanzó hacia mi a paso decidido.

-Hola bonita - me miró de arriba abajo y sonrió asquerosamente. - Ahora sé porque Jesús queria quedarse contigo. - doy pasos inconscientes hacia atrás hasta que choco con la pared y su mano desciende por mi cintura, me despega de la pared emujándome hacia el y me pega una palmada en el culo metiendo la mano entre el hueco de mis piernas. 

Grito aterrorizada y lo empujo con fuerza

Antes de que pudiera llegar a mas, Jesús tiró con fuerza de el y yo caí contra la pared de nuevo. 

-No - tenía la respiración entrecortada - te metas. - Marcos sonríe con superioridad aunque ahora Jesús parece mas grande y cabreado que el. 

Jesús levanta el puño tan rápido que cuando impacta contra su cara, Marcos hasta se sorprende, pero recupera la compostura rápido.

-Nos vemos otro día, Oviedo. - ladea la cabeza y escupe.

El secuestro. (Gemeliers Hot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora