Aquella noche fue la más larga de mi vida. Y no sé que dolía mas si el hecho de que Géminis estuviera haciéndome cortes cada vez que le placía o ver como golpeaban a Andrés incluso estando inconsciente en la silla donde le tenían atado.
Me dolía la garganta de tanto chillar y suplicar que parara con esto de na vez, pero cada vez que lo hacía Géminis tenía más gana de hacer daño. Decía que le gustaba verme suplicar al igual que lo había hecho mi madre el día que acabo con ella.
- Mátame de una vez.- le suplico entre lágrimas pero el rostro de mi hermana sigue intacto. No hay un ápice de lastima en él al contrario disfruta con ello.
- Si lo hago se acabaría la parte divertida de todo esto.
- ¿Y cuál es?
- Verte sufrir.
- ¿Más? Ya no puedes quitarme nada Géminis. Has acabado con todo lo que tenía.
- Te equivoca aún tienes dos cosas por las que luchar cariño. No te apenes.
- Si te refieres al dinero... puedes quedártelo. No lo necesito.
- Eso ten por seguro que me lo quedaré pero ese que está allí.- señala a Bradley.- él muy imbécil se enamoró de ti.
- Yo quiero a Andrés.
- Lo sé, pero él te quiere a ti y ahora es cuando empieza la parte divertida.- la miro con cara de desconcierto. No tengo ni idea de a lo que se refiere. - te explicaré un poco porque te veo un tanto perdida. La verdad es que te hacía más inteligente después de todo, pero en fin como soy buena muy en el fondo te explicaré el asunto.
>> Bradley trabajaba para mí cuando yo vivía en estas cuatro paredes y sabe todo el plan desde el principio. Es más, Bradley tuvo la genial idea de ser tu abogado para así tenerte más a mano. Porque es cierto que es abogado, pero con unos cuantos ceros en un talón puede cambiar de bando. No te haces una idea de lo que hace el dinero ¿sabes?
- Pues como te ha pasado a ti supongo.
- Ahí te equivocas. El dinero no me ha llevado a hacer todo esto, pero reconozco que juega un papel importante. Pero no me cambies de tema. Lo que te estoy intentando decir es que el muy imbécil se enamoró de ti sin darse cuenta, tienes algo que los atrae Aria, aún no sé el que porque se supone que yo también lo tendría entonces y no es el caso ¿sabrías decirme que es lo que ven en ti?
- Humanidad. - respondo con asco.
- Mmm tal vez tengas razón, pero siendo buena te las meten dobladas así que prefiero mi postura. El caso es que yo antes de todo esto estaba con Bradley pero no podía darle lo que necesitaba o mejor dicho lo que me pedía.
- ¿Y qué era?
- Amor, Aria. Algo repugnante que no debería de existir. Te hace ser débil y estúpido.
- No puedo creer que digas algo así Géminis. Es imposible que no sientas nada por nadie, ni siquiera por ti misma.
- No, si yo me quiero mucho hermanita.- dice con tono divertido.
- Si te quisieras a ti misma no harías todo esto.
- Soy mala Aria, es lo único que puedo asegurarte, así que si buscas que sea benevolente contigo llevas todas las de perder. No te esfuerces en suplicar clemencia ni por ti ni por tus amigos, porque no la vas a tener.
Ella se da la vuelta y coge una de las copas de vino que hay en la mesa y da un largo trago hasta dejarla vacía.
- ¿Sabías que nos conocíamos?- pregunta girando la copa entre sus dedos.
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Géminis ♊ ©
Misteri / ThrillerHay caminos en la vida que son realmente difíciles, pero Aria Erwin no tenía ni idea de cuanto. Tras despertar aquella mañana en esa habitación gris, sucia y fría, donde tan solo una ventana llena de barrotes le permite ver la luz del sol, empieza a...