CAP 17: Días duros

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Hoy es navidad. Han pasado cinco días desde el accidente de Sirius. Y él no pasará navidad con nosotros. Malditos sean todos.

-___, ¡Mira lo que papá me obsequió! -Escuché a James hablarme mientras subía a mi habitación. Lo miré un segundo y le dije con la mirada "No me jodas". Luego vi su regalo: Una capa de invisibilidad. Estaría genial si Sirius estuviera aquí.

-Me alegra. -Espeté.- Feliz navidad. -Dije, entrando a mi habitación.

Me quedé dos o tres horas encerrada allí, hasta que decidí visitar a Sirius. Bajé las escaleras y caminé rápidamente hacia la enfermería. Al llegar, la enfermera me dio las peores noticias de mi vida.

-Él ha entrado en un estado de coma -Dijo, con notoria tristeza. Sentí mis ojos llenarse de lágrimas de nuevo.- No sé cuándo despertará. Quizás ya no lo haga...

-¿¡QUÉ!? -Chillé, comenzando a quebrarme- Sólo... ¿Me deja a solas con él? -Supliqué. La enfermera asintió.- Y no deje que nadie más entre. -Dije, en un tono que hasta a mí me dio miedo.

Me dirigí hasta la camilla de Sirius. Él se encontraba ahí, tenía suero en el brazo y estaba con los ojos cerrados. Parecía durmiendo, pero no lo estaba. Dejé que las estúpidas lágrimas corrieran por mis mejillas. Tomé su mano y me senté a su lado.

-Sirius... Si me estás escuchando, por favor no nos dejes... No dejes a los merodeadores... No me dejes a mí -Sollocé- Te necesito. Por favor. Yo... te quiero -Lo miré. No se movía.- No es una feliz navidad sin ti... Despierta pronto.

Suspiré. Me levanté y me limpié las lágrimas. Salí de la enfermería y me crucé con Remus, quien estaba muy nervioso y traía un ramo de flores. Sonreí, emocionada y fui a llamar a Carly.

-¡Carly! ¡Carly! ¡Es una emergencia! -Grité, exageradamente cuando la vi.

-¿Qué pasó? -Me miró, algo alterada. Sin decir nada, la jalé, corriendo por los pasillos.

-Tienes que ver esto -Sonreí, al llegar a donde estaba Remus.

-¿Qué cosa? -Preguntó, acercándose a ver

El coro, estaba cantando una canción romántica, y Remus apareció de detrás de ellos, con un gran ramo de flores de todos los colores. Sonrió, le entregó el ramo a Carly y se arrodilló.

-Carly, eres la única chica a la que realmente he querido hasta ahora... -Sonrió, muy ruborizado. Saqué una cámara y tomé fotografías.- Y, me preguntaba si tu... ¿Quisieras salir conmigo?

-¡Sí, Remus! -Sonrió, lanzándose a abrazarlo. Ambos sonrieron y luego se besaron. Tomé fotografías y me dolió el corazón. Quizás Sirius y yo nunca podremos estar así...

Bufé y regresé a mi habitación. Así pasaron las fiestas hasta el regreso de clases.

Un mes. Ha pasado un puto mes y Sirius aún no despierta. Admito que me he apartado del mundo. Ya casi no le hablo a Lily ni a Leah, y menos a Carly. 

Siempre evito a los merodeadores y ando sola. Daryl ha intentado subirme el ánimo, pero tampoco quiero verlo. Mando a la mierda a cualquier otra persona que intentara acercarse a mí, pues no quiero que vean mis ojos y descubran que mi mundo está destruido. 

Cat ha sido la única amiga con la que he hablado en todo este tiempo, ella escucha lo que digo, y lo que no digo, también. Siempre que quiero estar sola, no me lo permite y simplemente me hace compañía en silencio. 

Se podría decir que ella me ha estado entendiendo.


La prima de cornamenta (Sirius Black y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora