Para ti andriuskyah, espero que te vaya bien escribiendo en esta increíble aplicación, que te haga tan feliz como me ha hecho a mí en tantas ocasiones. Para quien lea este capítulo que sepa que esta historia que me ha ayudado a desfogarme en tantas ocasiones, está a punto de terminar hare un par de capítulos mas y le daré fin a este parte de mi vida, también os recomiendo que leas a mi amiga aquí mencionada porque creo que tiene un don, hay que leerla detenidamente para darse cuenta que sus manos hacen magia. Besos <3
Katy
Tras media hora de historias, lagrimas y recuerdos, lo sé todo. Me acuerdo de cada detalle que había borrado de mi mente.
- Siento... Lo siento todo, por eso no quise acercarme a ti cuando descubri quien eras, no quiero volver a herirte Katy-
Yo no doy credito, escucho nuestros sollozos mezclados y tan lejanos. De vez en cuando rio, lo recuerdo todo, lo bueno, lo malo...todo.
-Kate ¿estas bien?- pregunta el preocupado.
- ¡Claro que estoy bien Tom! Acabas de darle sentido a toda mi vida, llevan tantos años evitando hablar mi trayecto por la universidad, de mi vida fuera de la empresa, de ti ¡Y dios mío te amo!- le digo acercándome a él, observando su confusión.- no lo sé, ahora que me has contado esto es como si hace una semana estuviéramos en la universidad tu y yo. Enamorándonos uno del otro. - Tom me agarra de las mejillas y deja de contenerse besándome como si yo fuera un sueño para él. Le sigo el beso y siento como una lágrima de felicidad se desliza por mi mejilla.
~Tom~
En su habitación, sintiéndonos como cuando estábamos junto, cuando podía gritar que estaba enamorada de ella.
Nuestros besos se tornan apasionados pero sin perder ni un matiz de ternura.
La tumbo en la cama me poso sobre ella, detengo nuestros labios y simplemente la miro adorándola.
Es tan bella.
Llevo desde la universidad tan perdido por ella un amor que en cada momento ha estado presente.
Katy me sonríe tiernamente al verme encantado por su belleza.
Vuelve a besarme.
Y esta vez nada nos para.
Le desabrocho la camisa mientras que ella hace lo mismo con la mía. Beso su cuello y ella gime excitada, sonrió contento, acaricio su piel ahora expuesta ya que he lanzado su camisa bien lejos de su cuerpo.
Noto como la mía se desliza por mi brazo junto a sus manos, nos miramos por un segundo y enseguida la devoro sin poder aguantar ni un segundo más.
Su piel es suave y cálida, tan rica.
Se quita la falda que llevaba puesta y yo me quito mis pantalones, es glorioso verla así bajo mi cuerpo. Me acaricia el cuello y yo agarro su muñeca ferozmente hasta sujetarla contra las sabanas.
Esta inmovilizada.
Es mía.
La acaricio desde el pelo hasta el trasero crean una trayectoria con mis manos.
Ella abre sus pies dejándome a mi entre ellas y siento un calor inmenso.
Creo un pequeño camino de besos en su abdomen.
Cojo entre mis manos esa tela blanca que ahora mismo es lo único que le cubre .
La deslizo hasta tenerla totalmente desnuda, me quito el bóxer y le hago el amor (con proteccion) como a ninguna otra mujer podría hacerle.
Me siente dentro de ella, y ambos jadeamos por la sensación, quiero besarla pero por nada del mundo callaría esos gemíos tan apasionantes.
Este es el fin de mi vida.
De aquí a delante todo irá cuesta abajo porque jamás podre llegar más alto.
Jamás.
La siento encenderse más.
Removerse de pasión.
De excitación.
Y yo acelero el ritmo haciendo que por fin ella sienta el orgasmo de su vida y poco después ofreciéndome ella a mí lo mismo.
