127 7 0
                                    

Un beso.

Le he dado a Tom un beso.

Si, un beso...* pensé.

Os preguntaréis ¿cómo esta chica le evita, le rechaza y le dice de todo y al final le deja que el la bese, y si eso fuera poco va y se lo devuelve?.

Yo tampoco lo entendía, solo fue que esa parte de mi que antes me decía que me alejara de él, me rogaba que no lo soltara, que le dejara que estuviera bien cerca de Tom, algo dentro de mi dejo de aconsejarme para rogarme que hiciera lo contrario.

Nuestros labios se separaron, nuestra respiración estaba agitada, muy agitada para ser exactos.

Quise moverme de donde estábamos sentados, me encontré una cala (una pequeña playa) cerca de donde estábamos, mire al suelo y salte hasta caer de pie en el.

-Vamos- le dije a Tom .

El también saltó y se puso a mi lado, nos sentamos en la suave arena de aquella cala, simplemente mirando al horizonte. De repente el me tumbo y casi se puso sobre mí, yo levante mi rodilla y así impedirlo, estaba sorprendida, ¿que se suponía que estaba haciendo?... Empezó a darme pequeños beso en el cuello y pasó su mano por la pierna que tenía haciendo tope, gracias a la abertura de mi falda esta estaba totalmente descubierta y él iba subiendo con su mano poco a poco. Ey, ey, ey hasta ahí habíamos llegado.

-¡Quieto parado!-le ordene. El se separo de mi cuello, lo que me permitió sentarme de nuevo y controlarme porque...vaya.

-¿Qué ocurre?- me pregunto.

-¿Como que, qué ocurre?-señale con la cabeza su mano que ya había llegado hasta mi muslo. El me miro con una sonrisa picarona y se mordió el labio inferior.

-¿Qué?-dijo.

Muy bien, en ese momento, por primera vez en mucho tiempo me quedé sin saber que decir, ¿qué de qué?, que debía responder. Que se apartara, eso mismo, pero sin ser muy bruta.

-Que te quites - bien eso de no ser bruta no era lo mío...-digo... que eso aun no, vas un poquito rápido.- dije con más tacto.

-Perdón- dijo apartándose un poco más de mí.- pero la verdad es que es tu culpa listilla, ¿quién te manda ser tan irresistible? –

Pensé: Inbecil.

Reí sutilmente, le cogí del cuello y lo abrace. Sentí un escalofrío, iba en tirantes y la noche dejó de ser templada.

-¿Eso ha sido por mi o porque tienes frío?- preguntó Tom.

-Puede que por los dos- dije un poco picara.

Él se apartó y se quitó su cazadora, la puso alrededor de mi espalda, me dio un corto beso y me acarició la mejilla. No podía entender como era tan tierno, volví a tener un escalofrío.

-...Este ultimosi que ha sido solo por tu culpa...- dije mirándolo de reojo.

Algo estalló en mi, sentí en el pecho una pequeña presión, fue extraño, fue como si me hubiera enamorado, como si hubiera encontrado alguien que me completara o me hacia mejor, como si supiera que Tom seria mío, como si sintiera que el seria el amor de mi vida, la única persona en la que estaría pensando a todas oras ante todo, sentía una presión de seguridad, conocida pero que jamás tuve con nadie... Ni siquiera con John, de quién me había enamorado locamente años atrás.

Que se suponía que debía hacer, sentía un poco de pánico.

-¿Te ocurre algo? - me pregunto Tom.

-Estaba pensando- respondí.

-¿En qué?-

-En algo que jamás me había preocupado- volví a responder sincera.

Amor A MomentosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora