4

5.2K 214 20
                                    


-Pensé que no volverías nunca- dijo esa voz grave y pausada que tanto temía escuchar hoy.

Me di media vuelta para encontrarme con esos fríos ojos color esmeralda. La ultima vez que lo vi parecía que iba a golpearme en cualquier momento pero hoy, simplemente tenía una sonrisa arrogante en su rostro y su mirada se veía más calmada, aunque aún así era muy fría.

-También yo- respondí suavemente. Me quede en silencio unos segundos.- Tenía cosas que hacer.

-No te pedí explicaciones-respondió casi burlándose- ¿no recuerdas lo que te dije la ultima vez que te vi?.

-Me querías echar.

-Te pedí que no volvieras.- dijo mas serio de lo que esperaba; parecía tranquilo.- Pero claro, aquí estas de nuevo.

Sonrío achinando los ojos y dejó libre mi muñeca. Me miro fijamente a los ojos intimidándome aún más.

-Mira, Abbigail- dijo pausadamente acercándose más a mi rostro.- normalmente la gente me obedece, tu también deberías hacerlo.

Me quedé congelada en mi lugar sin articular palabra mientras que Harry me sonreía de lado. Me pasó de largo chocando levemente su hombro con el mío.

Lo seguí con la mirada observado su gran espalda a través de la ropa que llevaba. Era bastante ancha en comparación de muchos de los chicos de aquí, parecía ser uno de los más fuertes y de los más temidos, eso estaba claro.

-Willson- Connor estaba parado enfrente de mí y ni siquiera lo había notado- ¿No piensas aprender a boxear?.

Me miraba con una gran sonrisa amigable en su rostro. Me detuve a observarlo unos momentos; Connor básicamente era todo lo contrario a Harry. Connor era muy amable, tenía una sonrisa preciosa y una mirada encantadora, mientras que Harry tenía una de las miradas más frías que había visto y era un chico muy grosero.

-Si, claro- respondí con una gran sonrisa.

Seguí a Connor hasta una pequeña banca donde me indicó que dejara mis cosas.

*

Después de unos 30 minutos de estar golpeando un saco, corriendo de un lado a otro y golpeando las manos de Connor, decidimos tomar un pequeño descanso. Estábamos sentados en una pequeña mesa que estaba al lado de los sacos de boxeo.

-Y dime Abby, ¿cuantos años tienes?-preguntó Connor con curiosidad.

-Dieciocho- respondí con media sonrisa.

-Pensé que eras mas pequeña Abby- dijo casi riéndose.- realmente pareces mas pequeña.

-¿Y cuantos años tienes tu?- pregunte riéndome.

-Diecinueve- dijo satisfactoriamente.

-¿Y esperabas que fuera mayor que tu?- pregunté riéndome a la vez.

-No, bueno llegué a pensarlo ¿sabes?- dijo soltando una pequeña risilla.- pero me alegro de que no.

-Vaya creí que morías por entrenar y aquí estás, sin hacer nada.- un Harry con un ceño fruncido apareció en mi campo de visión.

-Estoy tomando un descanso- dije con un tono serio.- No todos aguantamos tanto como tú.

- Pues si no pararas cada cinco minutos, aguantarías mas.- dijo con una mueca de obviedad.

-De cualquier forma, eso a ti no te tiene que importar.- este hombre siempre haciéndome enojar, tal vez fui algo grosera, lo cual usualmente no soy pero no soportaba que me tratara así.

BOX (H.S)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora