BOX (H.S)

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Jamás había esperado recibir un mensaje con tantas ansias en toda mi vida. Después de decirle a Harry que quiero mi auto de vuelta le pregunto qué es lo que debo hacer para que me lo regrese, pero no ha respondido nada por una hora y la espera me está matando. Me prometo no revisar el celular cada segundo y de igual manera me encuentro haciéndolo así que decido ponerle sonido, solo por si a caso no lo escucho. Me dispongo a leer un poco pero me resulta totalmente imposible también. Y después de lo que me parecen horas, mi teléfono suena.

Aún me debes una cena.

Siento la emoción recorrer mi cuerpo y me apresuro a contestar. Sé que pareceré una desesperada pero, ¿a quién le importa? Quizás el próximo mensaje tarde más en responderlo.

¿Con eso tendré mi auto de vuelta?.

No puedo esperar a que conteste, mi corazón late con tanta velocidad que siento como si hubiese corrido unos cuantos kilómetros. Asumiendo que Harry tardará en responder dejo el celular en la cama y me dirijo a la cocina a prepárame algo de cenar. No tengo ganas de preparar algo elaborado y no quisiera molestar a las chicas que se encuentran en el jardín regando algunas flores, las pocas que tenemos. Así que opto por algo sumamente sencillo, me preparo un bowl de yogurt natural con las frutas que logro encontrar en la nevera, fresa y arándanos. Le añado unas cuantas almendras y guardo todo en su lugar antes de ponerle una cuchara y subirlo a mi cuarto.
Para cuando me siento en mi cama y tomo mi celular, un mensaje aparece en la pantalla de notificaciones.

Sabía que eras lista.

Casi lo visualizo diciéndomelo con su voz sarcástica y su sonrisa petulante, como siempre no deja pasar ningún momento para hacer uno de esos comentarios. Pero no me molesta, en realidad logra hacerme sonreír. Decido no contestar el mensaje y dejo el celular en la cama, algo lejos de mí. Así evitaré contestar al instante. Tomo mi recientemente adquirido ejemplar de "Carta a una desconocida" y mi bowl para pasar el rato pero cuando estoy a punto de abrir el libro, mi teléfono suena de nuevo. Dejo las cosas a mi lado y gateo rápido hasta él. Es otro mensaje de Harry.

Paso por ti mañana a las ocho.

Siempre tan demandante. Al menos esta vez puedo ir como me plazca. ¿A dónde me irá a llevar?. No se me ocurre nada que usar que pueda servir para cualquier ocasión. No creo que me lleve al mismo sitio de la vez pasada. ¿Y si me lleva a un lugar lujoso? ¿Y si no lo hace? El lugar no me interesa en absoluto pero no quiero parecer fuera de lugar con un atuendo inadecuado. Un millón más de preguntas invaden mi mente y me convierto en presa de los nervios una vez más. Decido preguntarle, así sabré que podré usar.

¿A dónde iremos?.

Su respuesta es casi inmediata y logra dejarme confundida pero extremadamente emocionada.

Buenas noches Abigail.

Mi rostro no elimina la sonrisa tonta que tengo desde el primer mensaje que me mandó y le respondo casi tan rápido como él lo hizo. Sé que sólo esperaba que aceptara, y al preguntarle a dónde iríamos, lo he hecho. Aún quiero saberlo pero no preguntaré más al respecto, ya veré mañana que hacer.

Buenas noches Harry.

Y así termina nuestra corta pero emocionante conversación. Es la primera vez que conversamos por mensaje de texto y claramente no es muy expresivo que digamos. No ha utilizado ni un solo emoticono en toda la conversación lo cual me llevó a tampoco hacerlo, pero no es la gran cosa. Me gusta su manera de escribir, aunque han sido pocas palabras las que nos mandamos, no he encontrado ni un solo error ortográfico en ellas, y eso me encanta.

Dejo caer mi cara hacia el frente de la cama y ahogo un grito de emoción en la cobija. Estoy más que emocionada por esta cena, más que cualquier vez que fuese a ver a Harry antes. Y a pesar de que entró en mi habitación como un acosador la otra noche, no siento ni la más mínima sensación de miedo o temor hacia él esta vez. La cena me tiene más que nerviosa que mi mente no ocupa lugar para otra cosa. Quisiera presentarme de una manera adecuada para la ocasión pero Harry no me da muchos detalles. Mañana me encargaré eso, seguramente encuentro algo sencillo pero lindo. <<Dios, parezco una loca...como si esto fuese una cita.>> <<No es, ¿verdad?.>> Creo que me lo habría dicho si lo fuera. Él no parece la clase de chico que va a citas.