BOX (H.S)

31

Llevamos unos buenos cincuenta minutos de camino a nuestro destino, el tráfico nos ha retrasado por completo y Harry trata de ocultar su impaciencia. Sus dedos no dejan de tamborilear en el volante y no para de mirar el reloj. Sé que le molesta la demora por como aprieta la mandíbula cada que los autos se detienen, pero me parece adorable la manera en que intenta no demostrármelo.

-¿Nos cancelarán la reservación de nuevo?.- pregunto con una sonrisa. Trato de soñar divertida, no me gustaría que su actitud cambiara tan pronto.

Deja salir el aire y aprieta los labios en una media sonrisa forzada.

-Tal vez debimos salir más temprano.- y se detiene el auto de nuevo. Hay una larga línea delante de nosotros que no parece moverse jamás. Harry se voltea hacía mi.

Su ceño fruncido aparece una vez más y su mirada se pierde en la ventana detrás de mí.

-¿Y a dónde vamos?.- pregunto curiosa. Deja salir el aire nuevamente y me mira una vez más.

-A este paso parece que a ningún lado.- me mira por unos segundos y devuelve su vista al frente.

Mi rostro se torna en una mueca de tristeza, no tan exagerada pero ahí está. De haber sabido que habría un tráfico terrible esta tarde, hubiese estado lista antes pero ya no podemos hacer nada.

Espero no hable en serio acerca de no ir a ningún lado, sería demasiado triste desperdiciar el tiempo así.

Nos quedamos unos minutos más en silencio y la larga línea de autos sigue sin avanzar, excelente. Harry se da cuenta que la línea no se moverá por un rato, así que coloca el freno de mano y se relaja en el asiento. Entonces voltea a verme.

-Y dime Abigail, ¿cómo disfrutas tus tiempos libres?- coloca su brazo izquierdo detrás de su cabeza y sus verdes ojos me penetran.- además de en el auto haciendo largas filas, claro.

Logra sacarme una sonrisa con su último comentario. Se que no es la situación que esperaba y el hecho de que esté tratando de hacerla divertida, me parece bastante tierno.

-Me gusta mucho leer.- me encojo de hombros, debo serle sincera después de todo. No puedo simplemente decirle que saliendo con mis antiguas amigas, porque apenas y me envían un mensaje cada semana, y se que eventualmente eso se detendrá, creo que nunca fuimos tan cercanas. Está esperando a que le diga algo que haga fuera de mi rutina pero a menos que las fiestas forzadas con Josh cuenten, no es como paso la mayor parte de mi tiempo libre. 

-¿Y qué lees?.- pregunta sin despegar su mirada de la mía.

-Novelas románticas más que nada.- y aquí viene su comentario burlón probablemente, pero de nada serviría que le mintiese, la verdad es que desconozco sobre cualquier libro que no involucre alguna historia de amor.

-Lo imaginé- asiente y dice ¿tranquilo? Me sorprende por completo que no haga ningún tipo de burla, realmente está intentando que nos llevemos bien o eso parece, y me fascina.- ¿y eso haz hecho todo el verano? ¿Leer novelas románticas?

-Si... bueno, la mayor parte- salvo tratar de entrar a Brown, Stanford, acompañar a Josh a sus eventos, visitar a Lexie... sería mejor que no hablase de eso tan pronto.- supongo que he pasado la mayor parte de mi tiempo leyendo en casa y, en el gimnasio.

-¿No disfrutas del verano a caso?.- me mira con un ceño fruncido y una sonrisa burlona. Ya se estaba tardando.

-Bueno, quizás tenemos definiciones diferentes de "disfrutar el verano".- cruzó mis brazos y lo miro seria. Él me mira confundido y comienza a negar con la cabeza.

-No me mal entiendas Abigail, me parece asombroso que te encante la lectura- ¿aguarda qué? ¿Eso es un cumplido?.- es solo que me preguntaba si no te gustaba hacer, ya sabes... las cosas divertidas que se hacen fuera de casa.