Una gran serpresa

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Luego de ir a mi cuarto, muy enojada por cierto, comencé a pensar... «será cierto lo que dice Estefany, eso no puedo ser posible ».

Como todos estos pensamientos me quedó dormido.

Al día siguiente en clase...
Me tocaba Matemática a primera hora. Yo soy buenísima en las matemáticas, me encantan, no es normal que un chic@ diga algo como eso pero en mi caso así es.

Me tocó sentarme junto a Estefany en esta clase. La maestra puso un tema nuevo, en el cual nadie entendía nada, a excepción de mí, y de un chico.
Al la maestra preguntar, quien hacia un ejemplo, ambos nos paramos corriendo y no paramos cada uno a un lado de la maestra.

-yo, yo, yo, yo, yo- dijimos el y yo al unísono.

La maestra al ver que nosotros eramos los únicos dos que entendíamos, volvió a explicar, haste que -ringggg- la campana.

Salimos de clase y yo me paré en la puerta a esperar al chico que se había para junto conmigo.

-Hola, que bien que te gusten las matemáticas, ya no soy la única cerebrito aquí -

-digo lo mismo, además por suerte tu eres niña, en niñas se permite ser inteligente, pero en niños no, ¿quisieras y a la biblioteca esta tarde a hacer la tarea conmigo y mis amigos ?- me dijo el chico.

-claro, yyyy... ¿Puedo llevar a una amiga ?- le pregunté.

-si, hay problema -

-de acuerdo, por cierto , soy Mía-

-Yo soy Emil-

-Bueno, adiós Emil , no vemos esta tarde -

Claro que iba a ir, ni tenía voleibol ese día así que con mucho gusto iré, y voy a llevar a Ana conmigo , la pobre se pasó la clase mirando al pizarrón con cara de *¿que es esto?*.

«mira como son las cosas, ya hablar con chicos, se me hace muy normal, y pensar que ayer hasta le grité a Rafa »

En clase de Historia... Me siento, a esperar a Rafa, creo que le debo una disculpa por lo de ayer. Cuando entra al salón, me quedo viéndolo fijamente , de un momento a otro se detiene a hablar con uno de sus amigos.

-¡¡Mía !!, me susurra Ana que está sentada en la mesa detrás d mí, -¡Estás toda roja!, controlate-

-¿es enserio ? , ¿estoy roja?- le respondí muy preocupada.

-si, Mía - me dice Ana mientras asientes la cabeza.

Cuando le de sienta a mi lado, me puse muy nerviosa, pero aún así lo saludé.

-Hola Rafa, lo siento por gritarte ayer, pero es que yo... -

-No, descuida Mía solo te asustaste cuando aparecí de pronto, ¿cierto ?- me dijo Rafa con mucha seguridad.

-mmmm... Si, eso fue lo que pasó- dije mientras puse una sonrisa tierna en mi rostro.
En eso entró la maestra y comenzó su clase.
Yo pasé la clase mirándolo de reojo y me dí cuenta que en momentos el hacía lo mismo.

Al terminar, el me llamó y me dijo:

-Oye Mía, ¿ ya sabes todo sobre la fiesta?- me preguntó Rafa entusiasmado

-eeeeeeeh... Si, es será en la piscina este sábado, a las 4- le dije algo nerviosa.

-bueno entonces paso por ti a tu recámara mañana a las 3:30 pm.
¿Cual es tu habitación ?- me preguntó.

-pero... Los chicos no pueden ir al dormitorio de las chicas-

-no importa, solo es para pasar por ti - me dijo con esos ojos que me envuelven.

-de acuerdo, es el "#23 ,D. Y si eso es todo nos vemos mañana, que tengo otra clase-. Le dije mientras me despedí con una cara la cual aun me pregunto porqué la soguo haciendo.

Pasé todas las clases pensando en qué iba a usar para la fiesta.

En la tarde, fui por Ana, y fuimos a reunirnls con Emil y sus amigos para hacer la tarea de Matemáticas . Ellos me caen muy bien y ya quedamos para vernos todos los jueves a estudiar.

Hola chic@s, aquí otro cap. Este es uno de los más largos, espero les guste.
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Besos

El diario de MíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora