Bella
-¿Qué fue eso?- preguntó mi padre de brazos cruzados.
-Nada, no fue nada- dije enojada.
-Estaba casi por besarte en frente de todos- dijo mi padre serio.
-¿Y? No se que problema tienes, siempre andas atrás mio. Papá, ya no soy la niña de antes, tengo 18 años- me quejé.
-Se que eres grande y te entiendo pero desde lo que pasó con ese chico, no puedo evitar sacar los ojos de encima tuyo- dijo triste.
-Si, pero tienes que dejar de hacerlo y no culpes a Matthew porque el no sabe todo lo que te pasa y lo que me pasó- dije mirándolo a los ojos.
-Si, estuve mal, pero tú también tienes que entederme- dijo mirando a la nada.
-Te entiendo más de lo que te imaginas- sonrió y quede tranquila.
-Ya, ve a dormir que debes estar cansada- dijo mi padre pero el sonido de mi celular lo interrumpió. Matthew me estaba llamando.-¿Es él?- asentí y se fué.
-Hola, Matthew...- contesté la llamada.
-Bella, lo siento si metí la pata, es que estabamos solos y no pude resistirme. A mi me pasan cosas contigo, cosas que con ninguna otra chica me han pasado, tu haces que yo sea yo mismo, no el idiota sino el verdadero Matthew- sonreí al escuchar sus palabras, mis ojos estaban brillosos a punto de llorar.
-Matthew te entiendo, fue algo incómodo no te voy a mentir pero ya hablé con mi padre y entendió. Mi padre tiene un problema, él es muy sobreprotector y no acepta que ya estoy grande. Con respecto a lo que me acabas de decir... Bueno... No tengo palabras, nunca nadie me dijo tantas cosas hermosas como tú lo acabas de hacer, eres un gran chico y valoro eso. Te pediré uno de mis deseos: intenta ser tu mismo todo el tiempo, me gusta el verdadero Matthew.- dije sonriendo. Sentí un suspiro del otro lado de la línea.
-Si tu lo deseas, lo haré.- dijo Matthew y sonreí.-le pediré a tu padre perdón, él es como un padre para mi, ya que el mio está ausente la mayoría del tiempo, me ha ayudado muchas veces y quiero demostrarle que no soy un chico cualquiera que viene y se roba a su hija- reí con su comentario.
-Está bien, ahora iré a descansar, adios Matthew- dije suspirando.
-Que descanses, Bella- dijo y cortó la llamada.
¡Ay Matthew lo que generas en mi!
Me dirigí a mi habitación, me dí una ducha y me tiré en la cama. Estaba muy cansada pero igual me costó dormir. Pensé en Matthew y en lo que pasó hace unas horas. No podía controlar mis sentimientos hacia él, aveces pensaba que era un idiota y que nunca podría estar con él pero otras veces pensaba que era muy tierno y podría tener una oportunidad. No tenemos muchas cosas en común, él es popular y yo no, él es tranquilo y yo una loca, el vive con su madre y yo con mi padre. Lo único en común que tenemos es que los dos amamos la música.
[...]
Llegó el Sábado y a la noche era la fiesta de Chase.
Me levanté y bajé a desayunar.
-Hija, hoy tendré que ir a mi trabajo y me quedaré toda la tarde, puedes salir en tu auto, ten cuidado- me advirtió.
-Okey...- dije, me dió un beso en la frente y se fue.
Festejé porque ¡iba a estar sola toda la tarde! Puse música a todo volúmen y comencé a cantar.
Me gustaba todo tipo de música pero en especial el rock y el pop.Baje el volúmen de la música porque sentí un sonido de una guitarra. Seguí el sonido, el cual me llevó al jardín y vi a Matthew trepado en el muro que separa mi jardín con el de él. Estaba tocando la guitarra y cantando, no se dió cuenta que lo observaba porque estaba de espalda a mi casa. Terminó la canción y aplaudí.
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La Música puede unir Corazones
Teen FictionBella es una chica amante de la música que puede tocar con facilidad muchos instrumentos y que posee una hermosa voz. Vive en España con su madre pero decide viajar a Hollywood, donde vive su padre. Allí irá a un instituto de música en donde conocer...