25.

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Las vacaciones estaban próximas a terminar lo que quería decir que estaba a nada de entrar a la universidad y estaba muy, muy nerviosa. Es decir, Marie no iba a estar conmigo ahí, ella iría a otra escuela y eso de hacer amigos no es algo que se me dé.

― ¿Te gusta?―dije mientras sostenía una mochila negra de piel con ambas manos.

― El color va contigo.

Lo miré mal y él soltó una carcajada.

― Venga ya, no te enojes enana―dijo entre risas y se acercó para abrazarme.

Forcejeé un poco pero me di cuenta de que sería imposible zafarme de su agarre así que terminé accediendo a su abrazo, me gustaba estar así con él.

― ¿Alonso?

Mierda, lo olvidé.

Alonso se separó y miró a la chica frente a nosotros que sostenía un par de libretas y lápices de colores en ambas manos.

― ¡Oh por Camila!

Ambos nos miramos extrañados y luego soltamos a carcajadas.

― ¿Por quién?―preguntó entre risas.

Agradecí que la chica no pusiera una cara de desagrado.

― ¡Es mi mascota!―gritó, pero no un gritó de enojo, más bien uno de emoción― ¡No puedo creer que estás aquí!

― ¿Quieres una foto?―dijo cuando ya se había tranquilizado y ella asintió.

― Vamos, yo la tomo―sonreí y dejé la mochila en uno de los anaqueles frente a mí.

Debo confesar que a pesar de que la chica nos vio a Alonso y a mi abrazados no hizo pregunta alguna y no me miró mal, incluso se tomó fotos conmigo. Sin embargo, en el camino al auto varias chicas me lanzaron miradas de odio y algunas de las que se acercaron me miraron mal e incluso me insultaron, en voz baja, claro está, porque no iban a quedar mal frente a su ídolo ¿o sí?

― Realmente voy a extrañar salir contigo―suspiré mientras me abrochaba el cinturón de seguridad.

― Podemos salir los fines de semana, siempre y cuando no tenga compromisos con los chicos o algún concierto o firma de autógrafos―me miró y encendió el motor.



Guardé las cosas que había comprado esta tarde en la mochila y la colgué en mi guardarropa.

Agarré el iPod que se encontraba sobre el buró y entré a twitter. La campanita en la parte inferior indicaba que tenía más de veinte notificaciones así que pasé el dedo sobre el ícono de la campana y de inmediato cantidad de insultos, palabras lindas y muchas fotos aparecieron frente a mí.

"Jos C @joss_xc
@.soffiax Son tan hermosos juntos ♥ pic.twitter.com/dDHge3hU"

"Alonso Villalp @danivillal_
@.soffiax ¡eres una maldita roba fama!"

"Fer Leyva @Leyva_bae
@.soffiax @danivillal_ Ni siquiera la conoces, no hables, conne*."

"Vale Camacho @ValCam_x
@.soffiax @soyalonsovillal fue un placer conocerlos hoy, eres muy agradable. -me gustas para Alonso pic.twitter.com/djgbRfG4"

"FOOD @.soffiax
@ValCam_x el pacer fue mío, ¡eres súper agradable! "

― ¡Dice mi mamá que si vas a bajar a cenar!―gritó el tarado de mi hermano. Aventé el iPod sobre la cama y me dejé tirar sobre esta, me estiré y enseguida me levanté.

Metanoia | Alonso Villalpando |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora