Capítulo 14: El Adiós y una sorpresa

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Me pareció extraño que Lee Joon manejara el auto de Leeteuk, pero bueno así lo había querido Leeteuk, tenía que respetar.

EN EL AEROPUERTO
Leeteuk: te voy a extrañar, me acostumbre a ti que y ahora ya no quiero que te vayas – me dijo con sus ojos llorosos, y se me partía el alma verlo así.
Minnie: como dice el dicho. “El que mucho se despide pocas ganas tiene de irse” jiijiji ¡te quiero mucho!, y ¡te cuidas precioso!… te extrañaré y te llamaré de vez en cuando, por fis no te olvides de mí. Y gracias por todo – le di un besito en su mejilla y me retiré pero al instante me detuvo.
Leeteuk: espera tengo que hacer algo
Me miro tiernamente y me dio un besito en mi frente y luego bajo a mis mejillas pero lo que más me sorprendió era el último beso y fue en la boca… un dulce piquito

Minnie: ¡Leeteuk! Graciela me va a matar jajaja
Leeteuk: jijijiji te quiero mucho…
Minnie: gracias. Igual yo.  Bye – ahora si fue la despedida final y tuve que entrar definitivamente.
Pero alguien me detuvo otra vez
PJM: ¡espera! - Regrese a ver y era Jung min… Me detuve y lo miré - TE AMO - me sorprendió su confesión ya que esa mañana me había dicho que terminaba conmigo y se iba a casar, pero aun así solo lo tomé como un beso de despedida.
Minnie: ¡adiós Jung min! y gracias por los maravillosos momentos. Adiós – entré y ahora si fue definitivo
Pasé todos los controles y subí al avión sin embargo me dio mucho sentimiento el dejar Corea que de hecho fue la mejor experiencia que tuve.

Muchas horas después fuimos llegando a Chile en vuelo directo y ¡vaya, que cansado! Llegamos a la madrugada y bueno no tuve ningún problema al salir… solo uno pequeñísimo… ¿quién me iba a recibir a Chile, si no avise a nadie? ¡Upps!

Desesperada sin saber qué hacer, me arriesgué a pedir un teléfono a esa hora y bueno creo que les conmoví muchísimo con mi carita y me prestaron
Minnie: ¡hola!, ¡podría prestarme su teléfono!, necesito decirle a alguien que venga por mi… no soy de aquí, pero tengo amigos, por favor – le rogué ya desesperada
Secretaria: si claro, tenga – me dijo muy amable…
Como gracias a los cielos tenía el número de Claudia llamé a su celular. Ya que ella era la más cercana.

Claudia: ¿hola?
Minnie: hola… ¿con Claudia amante de Jung Min?
Claudia: si con ella… ¿quién habla?
Minnie: ¡soy Min Eun So!
Claudia: ohh Minnie! ¡que sorpresa oírte! ¿Cómo estás?
Minnie: bien gracias… ¿podría pedirte un favor?
Claudia: ¡sí claro! dime
Minnie: jijiji cometí el error de no avisar antes con la intención de sorprenderlas a ti y a Graciela pero resulta que no conozco Chile jajajaja. Estoy en el aeropuerto de Chile, ¿podrías venirme a ver?… estoy asustada jajaja – le dije pero con tal de hacer una broma.

Claudia: ¿Qué?  ¿Enserio estas aquí?
Minnie: ¡sí claro! ¡Aquí!
Claudia: ¡espérame!, ¡no te muevas!, ¿cómo estás vestida?
Minnie: estoy con un suéter gris de osito jijiji, un jean negro y unos converse blancos.
Claudia: ok, ok   espéranos, ya vamos

Pensé que ella ya había colgado, así que yo no colgué y de pronto escuché que Claudia le hablaba a alguien

Claudia: ¡hey Graciela despierta!
Graciela: ¿qué pasó?
Claudia: Min Eun So está en Chile y quiere que vayamos a verla
Graciela: ¿qué? ¡Enserio… vamos! ¡Que esperamos!

Me reí con solo escuchar lo que decían. Devolví el teléfono y me senté frente a la puerta para que pudieran verme. Veinte minutos después, ya cansada y con sueño a más de eso, seguía esperando cuando de pronto vi dos chicas que se acercaban a mí, pensé que eran ellas y no me equivoqué…
Claudia: ¿hola? ¿Eres Min Eun So?
Graciela: creo que es ella tiene el suéter que dijo
Minnie: jijiji soy yo
Con un fuerte abrazo me recibieron y me dieron la bienvenida y era tal cual me las había imaginado.

Claudia: ¿cómo así por Chile?
Minnie: les dije, que vendría algún día jajaja
Graciela: ¡qué bien! y ¿qué tal tu país?
Minnie: ¿qué? no voy hace un mes jijijiji ya les dije estaba en Corea
Claudia: naaaa… ¿enserio?
Minnie: ¡enserio!

Claudia: bueno, bueno… haber hagamos algo de desayuno y nos cuentas…
Deje mis cosas ahí y me levanté a ayudar a hacer algo pero de pronto alguien tocó la puerta
Claudia: ashhh y yo con las manos así… Minnie podrías abrir la puerta por favor
Minnie: ¡claro que sí!... ¡Ahora voy!
Fui a abrir la puerta y mis ojos no podían creer a quien estaban viendo.
Minnie: ¡esto no puede ser cierto! ¡Tú! ¡tuu!… tú... Pero…Pero. Pero.. ¿Cómo llegaste aquí?

Mi Vida... Eres Tú!!! (Park Jung Min)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora