Miranda's Unknown Secret (Draco Malfoy) EDITANDO

Ponerse las pilas

Es el primer dia que voy a clases de magia, supongo que se dice así. Mi tía abuela me ha mandado a un niño pequeño de primer curso para que me de mi horario. Casi he tenido que poner la mano debajo de la boca del niño para aguantarle la baba. 

Mientras camino por los pasillos, hacia una maldita clase llamada pociones, sigo preguntándome como un abogado y una cantante algo bohemia han conseguido tener una hija bruja. A ver, sé que mi madre es sobrina de Minerva y tal... pero ella no tenía poderes o magia o como mierdas se llame. 

Por cierto, también debo mencionar que llevo puesto por primera vez el uniforme de Slytherin y quien haya creado estas cosas debe de haber usado pelo de cerdo porque no son precisamente las cosas más estilosas del mundo. 

- Pensaba que no te vería en esta clase- dice Draco mientras entro en la clase de pociones con un tal profesor Horace Slughorn, pero vamos que hay que llamarlo profesor Slughorn porque aquí son así de respetuosos. 

- ¿Decepcionado?- pregunto mientras hago un falso mohín.- Qué pena- digo sarcásticamente. 

La verdad es que estoy siendo un poco borde, teniendo en cuenta que es el único que me habla... a parte de mi tía abuela, que no cuenta. Pero dado que es un gilipollas... tampoco cuenta. 

- ¡Señorita Moon!- exclama el profesor animado cuando me ve entrar en la clase.- Su tía abuela me ha hablado de usted. Aquí tiene un libro- dice mientras me entrega un pequeño libro. 

¿Hola? ¿Así de pequeño es el libro? Me esperaba un tochaco de mirarme y no me toques.

- Puede ponerse junto a su compañero de casa, el señor Malfoy- apunta mientras me señala el hueco junto a  Draco. 

¡Joder! 

- Nos volvemos a ver- dice Draco como si fuese la persona más importante del mundo. 

- A no ser que alguno de los dos se haya quedado ciego en estos últimos segundos... sí, puedo verte- respondo mientras abro el libro por la pagina que dice el profesor. 

- ¿Te crees muy importante porque mandaste a volar a tres chicas de tu casa?- pregunta enfadado. 

- No eran de mi casa y me habían robado, si salieron a volar o no... no fue mi culpa- respondo mientras comienzo a seguir las instrucciones del libro y trato de leer las etiquetas de los botes con los ingredientes. 

La clase pasa bastante rápido dado que hacer pócimas o guarradas, como yo lo llamaría, es divertido.  

La siguiente clase es Transformación y ¿adivinais quien es la profesora? Sí, mi tía abuela, Minerva McGonagall. 

- Bienvenida, señorita Moon- dice Minerva mientras camino por el pasillo de la clase hasta la mesa del profesor, o en su caso hasta su mesa. 

- Buenos días- trato de decir.- ¿Cómo debo llamarte?- pregunto susurrando. 

- Llámame profesora McGonagall, al menos durante mis clases- explica. 

Bien, bien. Ya está todo más o menos controlado. 

- ¿Con quién debo sentarme?- pregunto mientras echo una ojeada a la clase. 

- Siéntate en una de las mesas del final de la clase y presta mucha atención, debes ponerte al día si quieres aprobar- comenta mi tía abuela de la forma más sabia que he oído en mi vida. 

¡Pues a la mierda todo! ¡Al final de la clase! ¡Donde se sientan siempre los malotes y... mierda! ¡Draco Malfoy! ¿Pero que le pasa a este chico que siempre está allá por donde voy? 

- ¿Y... de donde vienes?- pregunta un chico de piel oscura mientras se gira hacia mi pupitre. 

- ¿Qué?- pregunto frunciendo las cejas. ¿A que se refiere?

- ¿Eres de Beauxbatons, de Durmstrang...?- trata de aclarar. 

- Cállate Zabini, a nadie le importa- se queja Draco aun sin darse la vuelta. 

- No es que me importe, solo estoy aburrido- argumenta. 

- Pues...- comienzo a decir- me da a mi que te vas a quedar con la duda. 

Trato de prestar atención a la lección pero resulta que el tal Zabini no deja de lanzar miraditas furtivas hacia detrás, lo que me pone nerviosa y hace que se gane un codazo por parte de Draco. 

- ¿Qué tengo que hacer para que me lo digas?- pregunta Zabini abordándome por sorpresa mientras salgo de la clase. 

- Dejar de ser un completo gilipollas para empezar- suelto. 

- ¡Vaya! Con la chica nueva. Sí que parece una Slytherin- dice abriendo los ojos de par en par.- Solo quiero saberlo, somos compañeros de casa necesitamos contarnos estas cosas. 

- Australia- suelto de repente. 

- ¿Hay una escuela de magia allí?- pregunta sorprendido. 

- No que yo sepa- respondo antes de escabullirme por uno de los pasillos y ocultarme bajo el marco de una puerta.