CAPITULO 18

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Levemente abro mis ojos, teniendo a la vista mi nueva habitación.

Era enorme y estaba pintada color rosa, supongo que con quien intercambie es mujer, porque no creo que tengan un cuarto de huéspedes color rosa tendría que ser blanco o algo por el estilo.
¿No?
Después preguntaré.

Todavía tenía que desempacar.
Busque el armario y este estaba lleno de ropa.
Debo preguntarle a Anne donde puedo poner la mia, ya que el armario esta repleto de la de su hija.
Inmediatamente me cambie con unos shorts verde agua, una blusa azul y mis vans negras, que me apresuré a sacar de mi maleta.

Salí de la habitación encaminandome a las escaleras.

Una vez bajadas, busco por la casa, hasta que la encuentro en la cocina.

-Buenos días - saludo amablemente.

-bulma -exclama- que bueno que despertaste, dormiste bien? -pregunta-.

-pues si, estaba muy cansada, necesitaba un buen descanso.

-que bueno, ¿ya te instalaste?.

-no todavía no, justo por eso la necesitaba.

-¿que pasó?

-en el armario hay mucha ropa, la de su hija, y quería saber donde podría poner la mía, así no le desacomodo nada.

-¿hija?, yo no te di la habitación de juliana.

-no lo sé, venga, le muestro.

Subimos a la habitación y le mostré el placard.

-ve, no hay espacio, no es que tenga mucha ropa que digamos pero ahí no alcanza a entrar.

-ahora entiendo todo- comenta Anne, yo la miré confundida- pensaste que te di el cuarto de "mi hija", con la que hiciste el intercambio- yo asentí con la cabeza- pues no es mujer es un hombre, se llama Aaron, su habitación es la de enfrente. Yo había pedido que el que se quedaría tenía que ser mujer, porque siempre quise tener una niña de tu edad. Juliana es la más chica tiene 7 años, y no es lo mismo ¿me entiendes a lo que me refiero?

-ah, si claro que entiendo, entonces...¿y esa ropa?

-es toda tuya

Abro los ojos como platos

-¡¿Q...qué?!

-si es un regalo de mi parte, espero y te guste el estilo francés, y deseo que te la lleves cuando te tengas que ir.

-¿en serio? - dije aún sorprendida- gra...gracias.

-De nada cariño, bueno termina de arreglarte que nos vamos al club.

-si esta bien.

Al club, interesante, que tipo de ropa se lleva a lugares finos?, porque no creo que quede bien llevar vans no?

Voy hacia el baño y me adentro en la ducha.

Minutos después salgo y me envuelvo una toalla en la cabeza y me coloco la bata en el cuerpo.

Toc Toc.

-¿si?

-bulma, soy Anne.

-¡oh!, si adelante.

-¿Cómo vas querida?

-me falta vestirme pero no se que ponerme para la ocasión, ¿me ayudas?

-si, claro.

Fue al armario, mientras yo esperaba sentada en la cama peinándome, y buscó, hasta que salió con las prendas en mano.

Eligió un vestido floreado, muy bonito y creo que lo escogió por el calor que hace, un sombrero de verano color pastel y unas sandalias con muy poco tacón en rosa claro.

Perfecto, diría yo, termine de vestirme dejando mi cabello suelto.

Me los combinó con un collar de perlas blancas, una pulsera de plata para la muñeca izquierda y un reloj blanco, para la muñeca derecha.
Me ofreció maquillaje pero no era necesario, hacía mucho calor como para llevarlo en la cara, iba a sudar, iugh.
Ya lista tomé un bolso color rosa claro, y guardé mi celular y un poco de dinero.

Bajamos juntas a la entrada, que ahí ya nos esperaban los demás.

Juliana quiso que me sentara al lado de ella y así lo hice.

~~~~

El lugar era enorme, la entrada de rejas altas color negro y dorado en las puntas, estaba custodiada por personal de seguridad, el camino hacía la mansión estaba rodeado de flores, la gran puerta blanca daba al gigantesco vestíbulo que después daba paso a una gran sala.

Los señores Thompson saludaron a los que parecían socios, de trabajo o algo así.

Los esperamos y nos dirigimos al comedor.

◆ ◆ ◆ ◆

El día allí fue espectacular, me encantó, lo disfrute mucho.

Ahora me hallaba en mi habitación, vistiéndome para salir con los chicos un rato.

Ya le había pedido permiso para salir a Anne, así que no habría problema.

Milk me paso a buscar, y juntas fuimos a donde nos esperaban los demás.

-¿Y?¿Qué tal tu nueva casa?-preguntó mi amiga.

-Es genial, ya la viste es muy grande.

-si,¿tienes "hermanos"?

-así es, Juliana y John. ¿y tú?

-sólo uno, Franco.

-¿y?, ¿Se llevan bien?

-sí, supongo.

Dimos por terminada la conversación, ya que llegamos al centro comercial.

-¡vegeta!- exclamé feliz.

-hola, mi amor. ¿qué tal tu día?

-estuvo bien, ¿y el tuyo?

-nada interesante. ¿Quieres un helado de frutilla?

-si, muchas gracias.

Vegeta me compró el helado y juntos volvimos con los chicos, que ya estaban en alguna que otra tienda.

-¿Vas a la fiesta de esta noche?- me preguntó.

-¿Cuál?

-Una que se hace a las afuera de la ciudad. Nanomi me comentó sobre ella.

-ah. ¿tu irás?

-si tu vas, sí.

-esta bien, tendré que preguntar.

-llámame, y quedamos.

Asentí con un movimiento de cabeza.




Perdonnnnn!!!
Es corto lo sé , pero quise dejarlo hasta ahí.

Si se preguntan porque no actualice ( no me maten por no avisar) es que estuve de viaje.
Ya que solo era ir a pasar año nuevo con la familia y volver, pero no fue asi.

Perdonenme...

nos vemos.

BULMA Y VEGETA UNA HISTORIA QUE CONTAR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora