Miami, Florida, Estados Unidos. Cuatro años antes.
Es el primer día de colegio y la verdad la llevo bastante bien. Son exactamente las 16hs y ya he hablado con un chico genial y los profesores parecen tranquilos.
Me tuve que cambiar de colegio ya que el anterior aumentó de precio y mis padres no podían darse el lujo de pagar tanto. En cambio, este colegio tenía el mismo nivel de educación y no tenía que pagar casi nada excepto la matrícula y mis útiles.
Sin embargo, ya que todo el mundo tiene su grupo de personas y yo soy nueva, no quería comer sola en alguna mesa o sentarme en una mesa lleno de frikis o no sé. Entonces decidí que lo mejor iba a ser comer mis emparedados en el baño. Poco higiénico sí, pero prefería eso antes que pasar vergüenza como la nueva que come sola. El nuevo bicho raro con el que se podía joder.
En este momento tendría educación física, por eso me estoy dirigiendo para el gimnasio. Iba a empezar con voley, según el programa. La verdad es que lo de los deportes nunca se me dio, soy bastante torpe sola, imaginense tratando de buscar una pelota, o picarla, o batear una.
Pero había que hacer el esfuerzo, verdad?
-Okey clase, los lunes y miercoles vamos a compartir la clase con una clase mas avanzada a la suya, ya que es más comodo para mi y para ustedes... y si se preguntan por qué para ustedes, es porque les dejo dos horas libres los viernes. - Nos dijo la profesora pero nadie contestó nada.- Bien, por favor troten cinco canchas y ponganse en pequeños equipos de tres jugadoras para poder empezar con partidos para medir a cada una.
Todas empezamos a trotar, yo no iba lento pero tampoco volaba como eran algunas, que supongo que eran afortunadas y tenían el don del deporte. Una vez que corrimos todas las canchas pedidas yo me arrime junto a dos chicas más que parecían agradables.
-Hey sos nueva cierto? Me llamo Kylie. Y ella es Gabriela. - Me dijo la chica más petisa, rubia con muchas pecas señalando a la otra flacucha con los ojos azules.
-Kylie, Gabriela, soy Camila y sí. Soy nueva.
-Pequeñas, vamos a intentar no hacer revotar la pelota en sus cabezas mucho tiempo.- Nos dijo una chica bastante rellena que supongo que era del grupo más grande.
Nosotras no dijimos nada y esperamos a que la profesora nos traiga pelotas y suene el silbato para jugar. Yo la verdad es que me sentía perdida, pero mis compañeras parecían tener idea lo que hacían.
Una vez que tuvimos la pelota y sonó el silbato dando inicio a los partidos, Gabriela hizo un saco y empezamos a jugar, una hizo un gran remate y no me pregunten como pero recibi como una campeona. Dos, tres, cuatro jugadas y una remató... literalmente... en mi cara.
Vi todo negro y una voz se escuchaba y también unas risitas.
-Se lo advertimos niñitas. Una iba a caer. Esta es la primera.
-Dejala ya Brittany, no ves que su nariz sangra? - Dijo una tratando de que yo reaccione. - Vamos, por favor, levantate. Voy a llevarte a la medica del colegio para que te revise esto. Lo hiciste bien Brittany, idiota. - Le dijo a su amiga matandola con la mirada.
Con un brazo en sus hombros y su mano en mi cadera, ella me acompaño hasta la médica, me sostuvo ahí un tiempo hasta que vino la camilla y me sonrió.
-Perdón por eso, normalmente los populares quieren meter miedo a los pequeños de tu edad pero nunca los golpeamos. Se les fue de las manos a estas imbéciles.
-Está bien, no te preocupes. Es era parte del plan. - Le dije sonriendo debilmente.
-Vas a estar bien?
-Sí, no te preocupes. Gracias por traerme...
Ella sonrió y yo sentí unas mariposas dentro de mi estómago, era bastante linda y su gesto fue algo demasiado lindo también. La enfermera vino y sólo se dignó a ponerme un algodon en mi nariz y me dejó ir con un par de caramelos en la mano.
...
Ya pasaron dos meses desde el primer día de clases y yo me llevaba muy bien con Kylie y su grupo de amigos. Eran bastante geniales.
Y si me preguntan que paso con la chica que me ayudó en la clase de gimnasia, realmente no volví a verla otra vez dentro del gimnasio, quizás se esté saltando las clases por ser popular o quizás se cambió de deporte... Pero sí la veo siempre que se escapa a las gradas del campo donde está la cancha de futbol y futbol americano. Siempre se va sola con un libro en la mano, supongo que es un diario porque escribe mucho ahí, a veces la persigo porque me instinto quiere, quiero hablarle, pero varios me dijeron que a los populares es mejor ignorarlos si ellos lo hacen. Entonces me escondo y la observo, la observo en la cafetería mientras ríe con sus amigos, o cuando en algunas clases de gimnasia juega con tanta pasión, o simplemente cuando se escapa y escribe en ese diario.
Parece acosador, pero ella realmente me gusta. Y si tengo que seguir escondiendome tras botes de basura y seguir espiandola, voy a seguir haciendolo con tal de verla diariamente algunos segundos.
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Waiting for you.
FanfictieLauren Jauregui está empezando a vivir su sueño, el momento que esperó desde que tiene memoria. Tiene una novia hermosa, es telonera de su banda favorita junto con su amigo Zayn, el mundo está empezando a conocerla. Pero un día, después de un conc...