No pienso dejarte.

Capítulo 11

Estaba lloviendo a cantaros, y Alex miraba por la ventana de su habitación. Solo podía pensar en que hubiera pasado esa noche si hubiera llegado a tiempo... si tan solo no se hubiera quedado hablando con su amiga Lottie... ¿su vida habría cambiado?

Se le formó un nudo en la garganta. Solo quería abrazarla una última vez más... una lágrima se le cayó. Se limpio con la manga de su abrigo.

Salió de su habitación para luego bajar las escaleras que se dirigían al salón de la casa. Al bajar, vio una persona parada justo enfrente... era ella. Estaba allí, estaba viva. No dudó en correr hacia ella... pero cuando estaba por abrazarla... cerró los ojos y al abrirlos, estaba en un cuarto completamente negro. Allí había un pasillo. Al final del mismo, una figura humana de espaldas. Seguido del ruido de cadenas y gritos.

Comenzó a recorrer el pasillo...

- ¿Qué estas ocultando?... Mejor dicho... ¿Quién eres?

Seguía caminando cuando escuchó una voz que golpeaba directo en su oído:

"Alex... Alex... ven a mí. He vuelto. ¿Me extrañaste?"

Entonces la chica comenzó a correr y al volver a cerrar los ojos, comenzó a gritar. Luego... despertó.
Relatado por Alex:

Felicité abrió la puerta. Se dirigió hacia mí rápidamente. Tomó mi muñeca y encendió una lámpara ubicada en mi mesita de noche.
Tenía calor y sentía que me faltaba el aire. Respiraba rápidamente. Comenzé a moverme entre las sábanas revueltas sobre mi cama. Felicité apoyo sus manos en mis hombros y me miró a mi. Me decía que me calmara, que todo iba a estar bien.
No, nada estaría bien. En mis sueños la había visto. Pensé que superaría aquel trauma de mi infancia. Pensé que por fin todo iría para bien. Desearía que Lottie estuviera aquí, para mí.
Esa noche, días después del desaparecimiento de Lottie. Ella y Chloe salieron de casa con Ryan y Sophie. Amigos nuestros. Felicité se quedó conmigo esa noche, durmiendo en el cuarto de mi hermana.
Me calmé y la abrazé. La abrazé fuerte. Como si fuera la última vez que nos fueramos a ver en mucho tiempo. Con una mano, tomo mis mejillas empapadas de las lágrimas que nacían en mis ojos y morían en mi boca.

- ¿Qué pasa? - dijo ella.

- Nada, ya estoy bien. Una pesadilla... - le dije.

Se recostó a mi lado. Me acurruqué a su lado. Me sentía bien a su lado. Sentía que la necesitaba solo a ella. Me envolví con las sábanas.

- ¿Qué sucede? - me dijo. - Realmente me preocupo por ti.

- Tuve una pesadilla muy fea. - dije. Era verdad. - No se porque - Mentira.

- Se lo que es... Yo también las tengo.

- Nunca te vallas. Por favor. Nunca me dejes sola.

Se acercaba mi lentamente. Su aliento se sentía cada vez más intenso.

- Nunca lo haré. - dijo por fin.

Era el momento, debíamos hacerlo. Yo lo anhelaba tanto como ella, así que solo toqué su mejilla y acerqué sus labios a los míos. Encajaban perfectamente. Su mano tocaba mi cuello, comenzaba a bajar lentamente por mi cuerpo, primero por mi pecho, para finalmente terminar en mis caderas.
Solo unas bragas y una camisa me cubrian. Lentamente desabrochaba los primeros botones.
Solté sus labios y tomé la parte inferior de su camiseta, levantandola suavemente hacia arriba. Toma su cuello, y lo besé. Lo besé salvajemente. Pero yo quería mas.
Como si hubiera leído mi mente, su mano abandonó mis caderas. Sus dedos bailaban hacia mis bragas. Lujuriosamente. Su mano bajo hasta entrar en mi ropa interior. Ya había experimentado esto antes. Pero... Era distinto. Era... Especial. Con ella.
No había pasado, presente o futuro. Nada nos detendría.
Comenzé a bajar su pantalon. Nuestros labios seguían enredados. Sin darme cuenta, ella estaba encima de mí.
Todo era perfecto... Hasta que escuchamos un ruido en el piso de abajo.

- Felicité, ¿escuchaste eso? - dije

- ¿Qué sucede? - dijo ella. - ¿No quieres jugar a un juego? - dijo con voz seductura.

- Para, creo que son mis padres.

Felicité saltó de la cama, tomo su camista azul. Yo tome mi camisa y me vestí rápidamente. Felicité se ocultó debajo de mi escritorio. Me recosté en mi cama y apagué la luz. Fingí estar dormida, con los ojos casi del todo cerrados.
Mi madre entró en mi cuarto y se dirigió a mi armario. Lo examinó de pies a cabeza. Tomó unos vaqueros y unas botas marrones. Como si de su propio armario se tratara, y se retiro cerrando la puerta.
Felicité salió de su escondite. Y se recostó junto a mi de nuevo.
Me abrazó y dormimos como angelitos.

Relatado por Felicité:

Eran las 10:53. Tomamos nuestras cosas y salimos al comedor a desayunar.
Los padres de Alex estaban sentados en la mesa.
El padre de Alex me miro con sobrervía y se retiró del comedor. Alex y yo nos sentamos en la mesa.

- ¿Qué le pasa a papá? - preguntó Alex.

- Digamos que le fué bastante mal en el trabajo. Es todo. - dijo la madre de Alex.

Al finalizar el desayuno, salimos de la casa de Alex para dirigirnos al instituto. Subimos a su moto, y nos dirigimos hacia alla. Rodeaba con mis brazos sus caderas. El viento soplaba fuerte en nuestras caras. Después de lo de anoche, para mi el día era perfecto. ¿Que mas se podría desear?
Seguimos nuestro camino por el asfalto.
Llegabamos tarde al instituto, teníamos clases separadas. Alex tenía geografía, y yo tenía clases de fisico-química. Alex pasó por su casillero. Yo la acompañe, antes de despedirnos, tomo se barbilla y y le di un pequeño beso. Pero se saparó de mi. Y se fué.

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(͡° ͜ʖ ͡°)(͡° ͜ʖ ͡°)(͡° ͜ʖ ͡°) Ya se lo que piensan mentes sucias. Hoy doble cap, porque soy feliz. └(^o^)┐ ñee, en esto de las escenas 69 soy malísima :s