La historia del amor prohibido

Capítulo 22: Plan B, C, D, E y F.

Para calmar a Stea, la noche anterior mientras ambos regresaban a casa, él le había confirmado lo opuesto a lo que ella había visto, con un tono áspero él le narró la historia ridícula de cómo había pensado que Margott estaba enamorada de él por el obsequio; pero, a pesar de sus esfuerzos, solo logró que ella se alejara más de él y que pensara aun peor de sus intenciones. Esto hizo que Stea se arrepintiera de las actitudes que había tomado, pues todo no era más que un malentendido. Esta fue una de las principales razones responsables de cesar el llano de Stea, y otra fue, como él la llevaba con ternura mientras cuidaba que ella no se mojara más.

Cualquier persona lograría suponer que después de la fiesta Nollan estaría triste, pensativo y melancólico, es decir, devastado. Stea era la única que sabía ese suceso, por lo cual se sentía responsable de ayudar a Nollan a superarlo. Al día siguiente al levantarse ella, decidió ir a consolarlo, o al menos eso pensaba hacer ella; al salir de su habitación notó que él la esperaba con una sonrisa en el rostro, él la estaba esperando. Era lo último que esperaba Stea que él hiciera. Al verla esa mañana Nollan se sonrojó un poco pues ella llevaba el cabello de una forma distinta a lo normal, pero logró disimularlo para que ella no lo viera.

Al finalizar de comer Nollan estaba más enérgico que otros días, al entrar en la habitación de él, le expresó sus ideas a Stea, le dijo que ese plan era solo el primero de muchos otros; y que al idear más, habrían menos posibilidades de fracasar al final. Stea se mostraba encantada porque ese entusiasmo significaba que lo sucedido el día anterior no le había afectado a Nollan, ni siquiera en su forma de expresarse; tan libre, tan honesto, tan inocente. Y además significaba que ella estaría más tiempo con él; formulando planes, encontrando oportunidades y probando sus ideas.

Por consecuencia ambos estuvieron varios días pensando en los planes, en las estrategias que usarían y en cualquier detalle, absurdo para muchos, pero importante para ellos. Lo que ambos temían era el fracaso de alguno de esos planes porque habían considerado la mayoría de opciones para realizar, y si fallaran seria decepcionante. Al terminar de escribirlos y revisarlos más de 4 veces, ellos decidieron no esperar más para probar su plan B la semana próxima; pero era aún más abrumador esperar los resultados.

Este plan en particular consistía en tratar de ridiculizar frente a Margott a todos a quienes ella consideraba candidatos dignos de su mano; con el fin de que Nollan pareciera más inteligente e ingenioso en comparación. Por desgracia el plan falló. Era muy evidente que este par de amigos estaban realizando bromas a los demás pues no consiguieron disimular su emoción y al no controlarla la mayoría logró notar que ambos eran responsables de estas, por el simple hecho de aparecer en cada escena vergonzosa riéndose y felicitándose por cada acto que hacían.

Al ser este su primer fracaso ellos no se rindieron pues aún tenían planes para ejecutar. Probaron el resto de los planes durante semanas, pero ningún plan logró funcionar, y si funcionaba no resultaba como ellos lo habían estimado. Otra desventaja que tuvieron fue que desde las bromas del plan B, Margott ya se había percatado de sus intenciones, y cuando no logró contenerse más, no tuvo más opción que decirles que todo su esfuerzo había sido en vano, pues ella sabía qué querían lograr con esos sucesos intencionales que ellos habían planeado.

Después de eso Stea había quedado devastada porque se sentía tan inútil, sentía que no podía ayudar a Nollan de ninguna manera posible. Pero Nollan no se rindió, un último plan ofreció a Stea, durante todo un mes habían formulado ese plan, el plan F. Era infalible, ambos estaban seguros de que este plan era imposible de rechazar, un plan "aprueba de fracasos". Pero en el momento en el que lo ejecutaron, se arrepintieron del plan, porque amos recordaron que habían olvidado un detalle mínimo pero crucial, que el plan tenía que funcionar en Margott. Fue lo único en lo que este plan falló, y al fallar en ese detalle el éxito no era evidente.

Después de ese plan "aprueba de fracasos" ambos decidieron que debían descansar, porque una posibilidad era el cansancio mental, y ambos estaban exhaustos de estar formulando planes los cuales no resultarían. Así que ellos mismos se motivaban y juntos se contradecían luego de un plan.