"Good boy"(yaoi/gay)

Capitulo 18 Creo Que...

Sentí como mis ojos me pesaban, tenía ganas de seguir durmiendo, como si nunca quisiera despertar y seguir al lado del castaño de ojos verdes, seguir en sus brazos, pero la sorpresa que me lleve fue que dicho chico ya no se hallaba en mi cama, estaba solo en aquella gran cama, me incorpore con los ojos aun adormecidos y susurré para mí mismo su nombre.

-Chris...

Por la ventana la luz se asomaba demostrando que era de día, la luz era potente un día maravilloso y soleado en LA, voltee mi cabeza mi puerta estaba semi abierta y vi una sombra que venía de la sala, era Chris, me di cuenta al escuchar su voz, estaba hablando por teléfono, me permití escuchar su conversación.

-Me alegra- dijo con su voz burlona - sí, si tranquila iré esta noche, no me perdería tu cumpleaños por nada de este mundo, sí, bueno, adiós, cuídate - dijo, creo cortando la llamada y entrando al cuarto, sonrió al verme despierto, traía la misma ropa de ayer; una camiseta negra con mangas largas con el número 72 en él, luego unos pantalones negros iguales, pero ahora estaba descalzo.

-Buenos días, precioso -Me sonroje al escuchar "precioso" - ¿Cómo dormiste?- se sentó en la cama y me beso en la frente.

-Hola, Bien ¿y tú?

-Contigo al lado de maravilla- dijo dando una sonrisa como los actores eróticos de las películas de adultos.

-¿Con quién hablabas?-Pregunte para no ponerme rojo por aquella sonrisa de en sueños.

-Mi tía, hoy es su cumpleaños- Dijo recostándose en la cama.

-¿Qué día es?- dije Volviéndome a recostar pero ahora a su lado, por alguna razón ya había agarrado algo más que confianza con Chris, el me abraso un con un brazo y me atrajo más a él.

-¿Y esas confianzas?- me dijo levantando una ceja y sonriendo burlón.

-Es mi casa y puedo hacer lo que quiera-Dije dando mi mejor sonrisa, y abrazándolo, por alguna razón a los ojos de nadie y en la seguridad de mi casa podía no se...actuar algo más como un niño que necesita cariño y quiere dar algo más.

-Por mí no te detengas, me gusta- dijo depositando el primer beso del día en mis labios -Y hoy es 26 de septiembre.

En ese momento lo capte todo, era como si alguien me diera un choque a la realidad, la visita de ayer de mi padre era porque... hoy era el cumpleaños de mi mamá.

-Mierda...- maldecí, aunque fuese el cumpleaños de mi madre y sabría que hoy habría una gran pero gran fiesta más tarde, no quería ir a casa, no quería.

-¿Qué pasa Sean?

-Hoy es el cumpleaños de mi madre y habrá fiesta, no quiero ir- dije hundiendo mi cabeza en su pecho.

-Tranquilo todo irá bien, tu ve.-

Lo mire drásticamente, ¿Qué no se acordaba lo de ayer?, El monstruo arrogante que era, no quería ir a la cueva del ogro.

-¿Porque dices eso?- fruncí el ceño, él estuvo a punto de responder pero, el timbre le interrumpió.

-Eh Yo voy- dijo el levantándose de la cama.

-Pero es mi casa yo voy.

-No tu ve al comedor, yo abro- Dijo saliendo de mi cuarto, le hice caso y me senté en una silla del comedor, él fue a la puerta y se quedó unos minutos en ella hablando con alguien y luego entro con unas bolsas en la mano con un logo de Starbucks.

-¿Quién era y que es eso?- dije algo interesado más en la comida que en la persona.

-Milo, el chofer de mi padre, le pedí que trajera el desayuno- dijo poniendo las bolsas en la mesa.