Lío de amores [BTS]

Capítulo 24

- Jungkook.

Solo el eco de su voz resonaba en las paredes de la sala, Jimin solo se dedicaba a observarle sin siquiera despegar su mirada un momento, no podía creer que lo tuviera tan cerca y no admirarlo era un pecado, un pecado aun más grande que no tocarlo.

- Hyung ¿por qué no fuiste con los demás y el mánayer?.

El maknae estaba más que incómodo, llevaba un rato tratando de leer un libro pero la mirada insistente de Jimin no se lo permitía, solo se quedaba sentado ahí, en frente de él mientras le observaba y eso mas que incomodarle le empezaba a desquiciar.

- Porque es más divertido quedarse aquí contigo que ir a revisar el tonto set de grabación.

Jungkook botó el libro arrojándolo a su lado en el sofá para sostenerle la mirada a su hyung que lo estaba molestando.

- No pude ir porque el manager no me lo permitió pero tú no tienes escusa, este es tu trabajo ¿no?, debiste haber ido Jimin.

Si, el maknae se estaba molestando, creyó que tendría un momento para relajarse pero eso era imposible con Jimin frente a él.

- Oh Kookie ¿acaso te molesta que me quede en casa un domingo?, y desde cuando me llamas por mi nombre, el Jungkook que yo conozco siempre me trata de hyung.

Jimin se estaba aprovechando de su falta de memoria y era divertido hacerlo.

- Yo...perdón no lo sabía...-el maknae solo le miraba sin huirle a sus ojos- pero aún así hyung, no podrías solo quedarte por ahí mientras me dejas leer un rato.

Definitivamente a Jimin le encantaba hacerlo desquiciar.

- No.

Respondió ganándose una mala cara de parte del maknae causándole un ataque de risa, Jungkook seguía conservando su tan distinguida personalidad que siempre lo atormentaba pero esa vez era diferente, seguía sin recordarle lo que hacía mucho más fácil manipularlo.

Trataba de no comérselo con la mirada mientras el menor se enfocaba tan concentradamente en ese estúpido libro que le había prestado Jin por la mañana antes de irse, se lo prestó al maknae para matar el rato, Jimin maldecía a su hyung ya que ese libro le robaba la atención que podría estar centrada en él y no en esa ridícula lectura de drama, aunque no podía odiarlo del todo, cuando el chico se emocionaba mientras leía solo mantenía esa sonrisa en su rostro, esa sonrisa que lo hacía verse ridículamente adorable, aún más de lo que ya lo era. Jimin solo le observaba sin perder detalle de todo lo que hacía, era imposible no sonreír al verlo tan él, tan suyo aunque ni si quiera lo recordara, aún se sentía en un sueño y no deseaba despertar, no tan pronto al menos.

- Jungkook ¿está interesante el libro?.

Preguntó sin dejar de observarle, de prestarle toda la atención del mundo a su rostro angelical, sus ojos negros entrecerrados sin despegarse de las blancas paginas, sus manos sosteniendo el libro de carátula rosa, sus perfectos y rojizos labios al moverse para contestarle.

- Si, esta chica es una idiota que no le hace caso al protagonista que es aún más tonto por creer que ella es una loca psicópata de la que se enamoró y...

El maknae había dejado de hablar puesto que se percató de la manera en que lo estaba mirando Jimin, solo seguía incomodándole esa manera de observarlo, se sentía indefenso y pequeño ante su penetrante mirada.

- Deberíamos hacer algo divertido, me aburro de solo mirarte leer.

Jimin se levantó de su sitio dándose cuenta de que debía empezar a moverse o posiblemente se le lanzaría encima, se daba cuenta que haberse quedado en casa no fue la mejor de las opciones.