Girl On Fire | Justin Bieber

Capítulo 40

"Ella quiere besar la punta"

Me desperté enredada entre su cálido y fuerte cuerpo. Madre mía que sensación. Era la primera vez que despertaba junto a él y me dispuse a recordar cada momento para guardarlo en mi corazón.

Tenía su brazo sobre mis pechos y su rostro escondido en la curva de mi cuello. Nuestras piernas estaban una sobre la otra. Y su erección matutina chocaba contra mi muslo izquierdo. Lamí mis labios y sonreí. Ojalá fuera así el despertar de todos mis días. Tenerlo a mi lado, enroscada entre su cuerpo, abrazada por él era hermosamente perfecto.

-Así es que has despertado. -murmuró sobre mi cuello.

Su ronca voz adormilada y su respiración chocando contra mi piel me estremeció. Ronronee y me hice más hacia él.

-Así es que tú también has despertado -dije con un rin tintín.

Besó mi cuello lentamente y levantó la mirada. Me sonrió de manera dulce y observe sus ojos brillantes.

-Hola.

Dios mío, Justin Bieber no puede ser más perfecto. Su pelo era una maraña sexy, su rostro estaba adormecido y sus ojitos se cerraban de vez en cuando.

-Buenos días, precioso.

-Mmh, que despertar más agradable. -sonrió y besó mis labios de manera corta.

Retiró su brazo de mis senos y luego sus ojos se escaparon hacia allí. Me sonroje levemente y tome las sabanas para cubrirme.

-Oh, no lo creo. ¿Te escondes? ¿Tú, _____? Pero si eres una gatita. -se burló y se encimó sobre mí para atacarme a besos en el cuello.

-No, mierda. Para Justin. -me removía debajo de él mientras reía. Que agradable sensación.

Las sabanas se enredaban, separándonos, hasta que Justin las saco de un solo tirón y se hincó en la cama. Me observó, sus ojos mieles recorrieron mi cuerpo desnudo recostado sobre su cama. La vergüenza y el pudor se habían ido, mordí mis labios y respire fuertemente. Mis ojos también lo contemplaron, sonreí divertida al ver su hermosa carita y luego bajar para encontrarme con esa gran bestia que estaba entre sus piernas.

-Oye, tu cosa esta apuntándome.

Justin bajo la vista y comenzó a reír junto conmigo. Luego miró mi rostro y levantó sus cejas consecutivamente.

-Ni se te ocurra, Justin. Debo volver a casa o si no mi madre se pondrá como loca.

Justin frunció los labios y se inclino sobre mí.

-Nena, no te vayas.

-Pero Bieber, Jazzy también volverá a casa.

Justin dibujó mi suelta con sus manos mientras sus ojos miraban con profundidad los míos, se lamió el labio con sensualidad y solté un gemido.

-Uno pequeño. Una folladita rápida.

Me reí por sus palabras tan guarras y negué con la cabeza.

-Lo siento, cariño pero debo...

Me callé cuando escuchamos mi celular sonando sobre la mesita de noche. Ambos nos miramos pero ninguno reaccionó. Justin estiró su mano hacia mi móvil y lo tomó.

-Es tu mamá. -me miró con sus ojos abiertos.

Le arrebate el celular y conteste la llamada, no sin antes hacerle una seña para que se callara.

-¿Hola? Mami...

-¿Dónde estás? -espetó con la voz dura. Mire a Justin y lo acerqué a mí, para que me abrazara y me diera seguridad.