¿Qué haces aquí? ¿A qué volviste? ¿No entiendes que ya no te quiero aquí?. Me lastimaste, me partiste en dos, quise detenerme y no seguir más con este dolor. Hasta ahora no me explico como logré sobrevivir pero ya no sufriré más, esta vez será diferente. Adiós.
Atte: El corazón.